La mejor ruta de senderismo en Barcelona te lleva por paisajes que parecen de otro mundo
Si quieres escapar de la gran ciudad, te proponemos esta ruta para toda la familia que no te puedes perder.
Como dicen (o decían) en Juego de Tronos: “Se acerca el invierno”. Cada día que pasa es más oscuro que el anterior, y con ello, sentimos que el frío nos atraviesa la chaqueta hasta acariciarnos los huesos. Sabemos que lo que apetece durante estos días es mantita y peli, así que te proponemos una ruta para que salgas de casa y te des cuenta de que hay vida más allá de tu sofá y los mercados navideños en diciembre.
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La ruta al mirador de Sant Jeroni, con 1.236 metros de altitud, es una de las más populares y completas del macizo de Montserrat, ideal para quienes buscan pasar un día apreciando la naturaleza que tenemos cerca de casa y admirando vistas espectaculares. A tan solo una hora de Barcelona (como estos lugares que no te puedes perder), este recorrido que parte desde el monasterio de Montserrat y ofrece una experiencia bien señalizada (ideal para realizar en familia), te va a sorprender por una belleza que parece de otro mundo.
Descubre el recorrido
El punto de inicio es el monasterio, accesible en coche, tren y teleférico desde la estación Aeri de Montserrat (que queda a 40 minutos en coche desde Barcelona, y a una hora en tren con la R5). Desde allí, puedes elegir tomar el funicular de Sant Joan para ganar algo de altitud o empezar directamente el camino a pie. Si optas por esta última opción, prepárate para un recorrido de aproximadamente 12 kilómetros (ida y vuelta) que puede completarse en unas 4 horas a un ritmo tranquilo: parece mucho, pero vale la pena y no te vas a arrepentir.
La ruta recomendada para llegar a Sant Jeroni es el Camí de Sant Joan a Sant Jeroni, un sendero bien señalizado que asciende gradualmente por las montañas. La primera parte transcurre por un paisaje boscoso, con pinos y arbustos mediterráneos. A medida que subes, el camino se estrecha y serpentea entre las icónicas formaciones rocosas de Montserrat (ideal para aquellos enamorados de las fascinantes obras de la naturaleza), ofreciendo vistas hacia el monasterio y el valle del Llobregat.
Tras cruzar la Plaza de Santa Anna, un punto intermedio ideal para descansar, comienza el tramo más empinado. Aquí, el terreno se vuelve más rocoso, y los escalones tallados en la montaña te acercan poco a poco a la cima.
La recompensa en la cima
El mirador de Sant Jeroni ofrece vistas de 360 grados que abarcan desde el Mediterráneo hasta los Pirineos. Incluso en días nublados, la experiencia de tocar el cielo en este mágico lugar resulta espectacular. Hay bancos de madera donde puedes detenerte a disfrutar del paisaje y recuperar fuerzas antes de iniciar el descenso de vuelta hacia el mundo real.
Un último detalle importante a tener en cuenta
Más allá de los consejos típicos de “lleva buen calzado” y “no olvides tu botella de agua”, es importante mencionar que esta ruta es bastante popular, especialmente durante las fechas de Navidad, cuando la gente tiene vacaciones, así que la mejor opción es realizar esta ruta entre semana para evitar aglomeraciones. Aparte de este detalle, no necesitas nada más que ganas de descubrir la belleza de Montserrat para disfrutar de esta ruta.