Salamanca para principiantes: 7 rincones imprescindibles que debes visitar
Explora la preciosa ciudad desde un punto de vista diferente, con los ojos de un niño que se sorprende ante los secretos mejor guardados del lugar.
Salamanca en 12 horas: todo lo que debes ver en una escapada express.
Una de las ciudades más bonitas de España acoge a sus charros de adopción como si lo fueran de toda la vida. Cientos de estudiantes la conocen como ciudad universitaria y acaban enamorándose por su calidez, su patrimonio cultural, su ambiente nocturno y los múltiples misterios que esconde. No hace falta ser estudiante para quedar prendado de la belleza de la urbe, descubriendo esos rincones más allá de la misma Universidad, la Playa Mayor, la Catedral o la Casa de las Conchas.
Al visitar un destino, muchas veces olvidamos que no solo es cuestión de conocer los lugares más concurridos, más fotografiados o más populares, sino que hay que abrir la mente y explorar la zona desde un punto de vista mucho más abierto, como si tú mismo fueras un local que se sorprende ante cualquier novedad de su querida ciudad. Por eso, la recomendación es clara: abre los ojos y la mente y lánzate a patear las zonas más desconocidas de Salamanca.
Barrio de San Bernardo
Aunque se dice que el más vanguardista es el del Oeste -también conocido como barrio hipster-, el de San Bernardo merece la misma atención. Es una zona ubicada en el sur, muy cerca del Campus Miguel de Unamuno de la Universidad de Salamanca, por lo que se trata de un barrio preminentemente universitario. Allí se encuentra también la estación de autobuses, pero muchos visitantes pasan de largo frente a los múltiples murales de gran calidad artística que invaden las calles.
Huerto de Calixto y Melibea
Detrás de la Catedral de Salamanca aparece una gran puerta de metal encastrada en un muro de piedra sobre el que puede leerse 'Huerto de Calixto y Melibea'. No es el espacio verde más extenso de la ciudad, pero quizá sí sea el que cuenta con una historia más curiosa. Es un lugar perfecto para refugiarse del calor y de la muchedumbre que pasea por las calles más populares, ideal para relajarse y contemplar unas vistas diferentes de la parte alta de la Catedral.
Se dice que en estos jardines se encontraron los famosos amantes creados por Fernando de Rojas para su tragicomedia 'La Celestina'. Otros autores han encontrado allí la inspiración, igual que lo hizo el escritor nacido en la Puebla de Montalbán (Castilla-La Mancha). Casi seis siglos después, todavía se sorprende en sus rincones a algunos amantes furtivos que celebran su amor en los bancos de piedra o bajo las enredaderas de los arcos de metal.
Museo Art Nouveau y Art Dèco - Casa Lis
Muy cerca de los antiguos jardines y sobre las antiguas murallas están la Casa Lis y el Museo Art Nouveau, un palacete modernista en pleno corazón de Castilla y León. Este llamativo edificio cubierto de vidrieras multicolores lo construyó el salmantino Miguel de Lis en 1905. Gracias a su trabajo como industrial, pudo viajar e impregnarse de todo tipo de culturas, quedando fascinado con el recién nacido Art Nouveau europeo -llamado Modernismo en España-.
Su interior alberga una cafetería, el Café de Lis, en la que se puede desayunar antes de entrar a ver la gran colección y el patio cubierto por otra vidriera a modo de cúpula. Está formado por dos galerías de cristal y hierro que son una auténtica joya y una impresionante colección de muñecas de porcelana, estatuas, esculturas, joyas, mobiliario y todo tipo de objetos de los movimientos artísticos Art Nouveau y Dèco. Se organizan también exposiciones temporales como la última de Fernando Botero.
El Cielo de Salamanca
Oculta en el Patio de Escuelas Menores de la Universidad está la bóveda astrológica de su antigua biblioteca. Se trata de un mural pintado en el siglo XV por Fernando Gallego que trata de mostrar un cielo estrellado a la luz del día. El término del Cielo de Salamanca no lo acuñó hasta 1951 el catedrático Rafael Láinez Alcalá. Así, se plasman constelaciones australes como las de Hidra, Centauro, Ara o la Corona Austral; así como constelaciones boreales como Boyero, Hércules u Ofiuco. También se representan planetas, signos zodiacales y vientos y estrellas, bajo el paradigma de que 'el Cielo en la Tierra cabe'.
Convento de Las Claras
Además de ser una ciudad puramente universitaria, Salamanca también cuenta con una tradición religiosa de siglos y siglos de historia. Por la ciudad se reparten varios conventos, pero pocos tan desconocidos como el de Las Claras. Data del año 1238, tiene dos Coros, murales y una Torre que ofrece vistas espectaculares a la urbe. Sin embargo, lo más llamativo es su Museo de Pintura Medieval que puede observarse por todo el edificio.
Volcán de Garrido
Se dice que las mejores vistas de todo Salamanca se disfrutan desde el Volcán de Garrido, en el Macizo Hespérico. Este volcán es tan reciente que data de los años de la Transición, pero nunca ha despedido gases tóxicos o erupciones, ni tiene cráter ni chimenea. Se acabó convirtiendo en un icónico mirador del barrio a 842 metros de altura sobre el nivel del mar.
Café Niebla Bar
Una de las mejores coctelerías del país no podría encontrarse en otro lugar que no fuera una de las mayores ciudades universitarias. Así se confirmó a principios de año en el marco de Madrid Fusión, cuando se decidió -entre otras cosas- el Top Cocktail Bars de España y Portugal. El Café Niebla Bar tiene a los mejores barmans, la mejor ambientación, los mejores conciertos de jazz y las mejores bebidas, con y sin alcohol.
Toma su nombre de la novela más afamada del literato salmantino por excelencia: Miguel de Unamuno. El escritor está presente en todos los rincones de la urbe, sobre todo en los más cercanos a los ambientes universitarios -fue rector de la institución- y, como no podía ser de otra manera, también en los bares. En esta coctelería hace una aparición estelar en forma de un ingenioso cóctel, el Niebla Clásico, y que es casi obligatorio pedir.