El pueblo más pequeño de Badajoz: 150 habitantes, infinitos encantos

La vida es tan lenta aquí, que en cualquier momento se puede parar...

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En Reina, el pueblo menos poblado de Badajoz, la vida es tan lenta que en cualquier momento se puede parar. Los servicios públicos no funcionan todos los días, el centro médico, por ejemplo, y no abundan los bares y las farmacias: uno y una. El reto de la despoblación en España es grande, y la tendencia que pareció intuirse durante la pandemia: el regreso al campo, no parece haber cuajado. Vamos a conocer Reina, a ver si nos dan ganas de mudarnos allí, temporal o definitivamente.

Tantos pueblos por los que el autobús se olvida de pasar

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"El balcón de la campiña sur"

A Reina también la conocen como el "balcón de la campiña sur", y este nombre tan hermoso se debe a las impresionantes vistas que ofrecen sus cerros. Desde los muros de la alcazaba del pueblo, se pueden ver otros municipios de los alrededores. Y las sierras colindantes y largos paisajes de llanuras, colinas y monte, mucho monte.

La región tiene una rica biodiversidad mediterránea. En las áreas cultivadas, se ven aves esteparias como avutardas y grullas. En las zonas montañosas, la vegetación natural incluye encinas, jaras y tomillos. La fauna incluye águilas, buitres, ciervos y jabalíes, entre otros. La Alcazaba alberga un mirador celeste: es ideal para observar las estrellas y constelaciones, un mirador astronómico que abre por las noches y muestra mil estrellas.

El buen comer extremeño

En cuanto a la gastronomía, los platos estrella son: "las sopas cocía", "las puchas", "las migas canas" y la "macarraca". Nombres diferentes para platos diferentes. Si quieres saber qué son, ya sabes, ven a Badajoz. Reina está situada en el sur de la provincia, a 740 metros sobre el nivel del mar, una meseta tranquila y alejada.

¿A quién no le gustan las migas?

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Un evento de relevancia es el conocido como “festival de la luna llena de agosto”, que además de tener un nombre muy poético, atrae gente de la zona y celebra el patrimonio arqueológico y artístico del pueblo con actividades nocturnas, teatro de calle, procesiones y conciertos de música medieval. También hay romerías y celebraciones primaverales, que avivan la llama de Reina cada año. Hay mucho que hacer en este rincón de la península.