El pueblo nada masificado que es una paraíso para los que buscan un verano sin calor

En el corazón de los pirineos aragoneses, se esconde el refugio perfecto para el verano. Si durante esta época del año te gusta huir de las grandes ciudades y de la masificación turística, y además, odias el calor, hemos encontrado tu destino perfecto para este verano. 

El pueblo está ubicado a unos 1,200 metros sobre el nivel del mar, en la entrada del Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido. Este entorno montañoso genera un clima fresco, muy diferente a las bofetadas de bochorno de las ciudades. Las temperaturas en verano suelen rondar entre los 15ºC y 25ªC ofreciendo un agradable ambiente para disfrutar al aire libre. ¿Has descubierto ya de qué pueblo estamos hablando? 

Torla: el destino ideal para los aventureros y para los que no lo son tanto

Torla tiene un encanto rústico con calles y casas de piedra, perfectos para pasear sin preocupaciones en verano. Las vistas de la naturaleza que se pueden apreciar desde Torla, y la arquitectura tradicional ofrecen un destino tranquilo para aquellos que quieran dedicar sus vacaciones a relajarse. 

El pueblo goza de hoteles, como el Hotel Abetos o el Hotel Villa de Torla donde puedes descansar y disfrutar de las instalaciones, como los espacios abiertos para leer, o jugar a juegos de mesa con familia y amigos… Y algunos hoteles también disponen de piscina. En el pueblo y en sus alrededores también hay casas rurales y apartamentos para una experiencia diferente. 

Uno de los principales atractivos de la zona es la naturaleza, y desde Torla se puede visitar el Parque Nacional del valle de Ordesa, el Valle de Bujaruelo, y El Valle de Sorrosal. Las tres ubicaciones ofrecen vistas espectaculares, y una de las actividades tranquilas que se pueden realizar en todos ellos es senderismo. Hay caminos adaptados para familias con niños o principiantes, y caminos con más difocultad para los viajeros más intrépidos. 

La poza del Molino son unas piscinas naturales que se forman a partir del río Ara, y es el lugar perfecto para refrescarse rodeado de naturaleza. Es importante destacar que solo se debe entrar en el agua de las zonas autorizadas, ya que es un el Ara es un río de montaña con grandes corrientes. Por suerte, las grandes corrientes se pueden aprovechar para practicar deportes como el rafting o el barranquismo, y disfrutar de la adrenalina. 

Las fiestas patronales de Torla, en honor a San Sebastián, se celebran en agosto. Durante este mes, el pueblo se llena de vida con mercados de artesanía, productos locales, y conciertos de música y danza tradicional.