Las galletas de la fortuna no son chinas: historia de un mito

Imagina por un momento que estás en un programa de televisión de preguntas y respuestas. Has llegado casi al final, te falta una última respuesta acertada para ganar el bote millonario y te hacen la siguiente pregunta: ¿De dónde son originarias las galletas de la fortuna? Seguramente, la mayor parte de la gente diría China sin dudarlo, pero… habrían perdido el bote. En este caso, se trataría de una pregunta con algo de trampa porque estas galletitas se originaron… ¡en San Francisco!

Antes de contarte la curiosa historia que hay detrás de las galletas de la fortuna, debemos descubrir (por si queda algún lector rezagado) qué son estos dulces de la suerte. Se trata de unas galletitas elaboradas con harina, huevo y vainilla de consistencia dura y crujiente que en su interior albergan diferentes mensajes. Estos pueden ser de lo más inspiradores pero, a veces, también pueden ofrecer malos presagios.

¿Cuál es el origen de las galletas de la fortuna?

Hay varias teorías sobre el origen de las galletas de la fortuna; de hecho, es tal la controversia con respecto a su nacimiento que esta se ha tenido que determinar en los juzgados. Sí, como lo lees. Y es que tanto chinos como japoneses luchan por agenciárselas como especialidad gastronómica de su país.

Lo primero de todo es remontarnos a Japón, sus costumbres y su gastronomía. Y es que en el país del Sol Naciente (sobre todo en la zona de Kyoto) existe una tradición llamada ‘tsujiura senbei’, en la que se ofrecen galletas con mensajes adivinatorios en su interior. Ese podría ser un antecedente, pero las galletitas de la suerte tal y como se conocen hoy en día nacieron en San Francisco.

Ahora viajamos hasta la ciudad del Golden Gate. Las confiterías japonesas empezaron a vender unas galletas similares a las de Kyoto. Es 1909 y han nacido las galletas de la fortuna. La teoría más extendida es que el japonés Makoto Hagiwara inventó esta galleta para agradecer al alcalde de la ciudad la confianza prestada tras contratarle como diseñador. Se cuenta que, en lugar de una tarjeta de agradecimiento, le entregó una galletita con un bonito mensaje en su interior.

Tras finalizar la Segunda Guerra Mundial, los chinos se hicieron con muchas de las confiterías japonesas de la ciudad y, de ahí, el embrollo con respecto a su origen. De las pastelerías saltaron a los restaurantes chinos, a los que muchos soldados y marineros acudían para disfrutar de una comida de lo más exótica para la época.

Y, como fueron los restaurantes chinos los que empezaron a ofrecer estas galletas de la suerte al finalizar la comida, la gente empezó a dar por sentado el origen de este dulce.

El éxito de las galletas de la suerte

Es tal el éxito de las galletas de la suerte que han sido protagonistas de varios libros; entre ellos, podemos destacar el volumen de la periodista y escritora Jennifer 8. Lee 'The fortune cookie chronicles', una obra en la que analiza el origen, los mitos y las falsas creencias acerca de esta galleta con dotes adivinatorias.

Tal y como hemos contado, el origen de las galletas de la suerte está en San Francisco. De hecho, hoy en día es posible visitar una fábrica en la que se elaboran galletas de la fortuna de forma artesanal desde 1962: la Golden Gate Fortune Cookie Factory.

Esta tienda ubicada en el corazón de Chinatown hace hasta 10.000 galletas de la fortuna al día, horneándolas en una plancha giratoria de hierro fundido. También ofrecen galletas de la fortuna de diferentes sabores (desde fresa a matcha) y pueden incluir mensajes personalizados.

En definitiva, si te ha resultado curiosa esta historia del origen de las galletas de la suerte y tienes pensado visitar San Francisco, debes hacer una parada en Golden Gate Fortune Cookie Factory para que tú experiencia con estos dulces sea completa.