Un paseo por La Rinconada, la ciudad más alta del mundo
En la estribación occidental del Nevado Ananea Grande nos encontramos con una pequeña ciudad que puede presumir de ser la urbe más alta del mundo.
Llegar a La Rinconada, ciudad situada en los Andes Peruanos, no es fácil. No es un lugar tan remoto como Ushuaia, conocida como la tierra del fin del mundo, pero poco le falta… Y es que esta urbe peruana, que cuenta con una población de poco más de mil habitantes, se encuentra en un enclave único a unos 5.300 metros sobre el nivel del mar. Una altitud que lleva a sus habitantes a vivir en la ciudad más alta del mundo. Bienvenidos a La Rinconada.
Viajamos hasta la estribación occidental del Nevado Ananea Grande para descubrir cientos de casitas bajas que parecen haberse colocado sobre las montañas con un programa de imágenes de Inteligencia Artificial (al igual que las casitas de las islas Feore) por lo remoto de su ubicación y lo agreste de su paisaje. Una ciudad en medio de la nada en la que la vida no es fácil, ya que el acceso a sanidad, educación y servicios básicos es muy muy limitado.
Vivir en La Rinconada supone todo un desafío para sus habitantes, ya que cuenta con un clima gélido y una media de temperatura anual de 1 grado. Además, lo de vivir en la ciudad más alta del mundo, trae aparejadas algunas dificultades, como la necesidad de aclimatarse a vivir con la mitad de oxígeno que aquellos que se encuentran a nivel del mar. Y esto se traduce en problemas de salud crónicos que afectan a gran parte de la población con la denominada enfermedad de Monge. Si a esto se le suma la insalubridad y la contaminación minera, el viajero puede hacerse una ligera idea de lo difícil que es vivir aquí.
Robos, desapariciones y prostitución también están a la orden del día en esta ciudad sin ley que, desgraciadamente, es uno de los puntos más peligrosos del mundo casi a la misma altura que el barrio caraqueño de Petare, en Venezuela. De hecho, se recomienda a los viajeros que visitan La Rinconada que informen a las autoridades de su paradero y duración de su estancia por lo que pudiera pasar…
La Rinconada y la fiebre del oro
Para conocer los orígenes de la ciudad más alta del mundo debemos remontarnos a la década de los 80 del siglo pasado, ya que fue entonces cuando en los alrededores de lo que hoy es La Rinconada se descubrieron depósitos de oro. Esto llevó a muchas familias a crear un asentamiento para poder conseguir sustento económico. Y así nació esta ciudad en la que actualmente viven mineros locales, trabajadores de otras partes de Perú y de países vecinos como Bolivia.
La economía de La Rinconada gira en torno a la minería informal de oro, una actividad muy lucrativa para algunos (que obviamente no son los que trabajan de sol a sol), pero que ha traído consigo una serie de problemas ambientales; sobre todo, la contaminación por mercurio debido a la extracción minera.
¿Qué es el cachorreo?
Los trabajadores que se dedican a la extracción de oro en una mina situada cerca de La Rinconada lo hacen bajo un sistema de trabajo conocido como cachorreo que, desgraciadamente, es un buen ejemplo de explotación laboral. Por su parte, las mujeres tampoco corren mejor suerte, ya que a ellas se destina el pallaqueo o búsqueda de oro entre las piedras que han sido desechadas. Lo hacen martillo en mano y con la esperanza de encontrar alguna micra de este metal precioso.
Los hombres que trabajan en la mina lo hacen durante un periodo de tiempo (entre 25 y 31 días) sin cobrar nada. Después, su patrón les permite que a lo largo de una jornada se apropien de todas las menas (rocas en las que puede haber oro) que puedan cargar. Y lo que allí saquen (si la suerte está de su lado), será su salario mensual. Así, hay meses en los que, desgraciadamente, habrán trabajado de sol a sol sin haber obtenido ningún beneficio económico.
Y es que, como hemos dicho, La Rinconada es la ciudad más alta del mundo, pero también, una de las más difíciles para poder vivir dignamente.
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