El pueblo más antiguo de Baleares: diferentes civilizaciones que pasaron por sus playas paradisíacas

En un encantador rincón del norte de la isla de Mallorca, se encuentra el pueblo más antiguo de las Islas Baleares, y uno de los más bonitos del archipiélago. Este lugar ha sido testigo diferentes civilizaciones, así que caminar por sus calles es como hojear las páginas de un libro de historia vivo. Desde los fenicios y romanos hasta los musulmanes, todos han dejado su huella en este rincón mediterráneo, creando una mezcla cultural que se refleja mires donde mires. ¿Sabes cuál es?

Historia y belleza abrazada por el Mediterráneo

Estamos hablando de Alcúdia, cuyos orígenes se remontan a hace más de 2000 años, cuando los romanos en el 123 a.C. fundaron la ciudad de Pollentia, justo al lado de donde hoy se levanta el casco antiguo. Esta ciudad romana llegó a ser uno de los asentamientos más importantes del Mediterráneo occidental.

Las ruinas de Pollentia, con restos de un foro, una muralla e incluso un teatro romano, se pueden visitar. Son un destino ideal para los amantes de la historia romana, pero si os quedáis con ganas de una visita arqueológica más original, os proponemos un yacimiento romano bajo el mar.

Los romanos no fueron los únicos que dejaron su huella en Alcúdia, ya que tras la caída del Imperio Romano, los árabes se asentaron en la región y construyeron nuevas fortificaciones. Su legado es visible en las angostas callejuelas del centro histórico, que serpentean alrededor de la iglesia de Sant Jaume.

Uno de los tesoros de Alcúdia es su impresionante muralla medieval. Construida en el siglo XIV por orden del rey Jaime II de Mallorca, esta fortificación se erigió para proteger la ciudad de los ataques piratas, tan frecuentes en esa época. Con sus torres almenadas y puertas robustas, uno se puede imaginar en plena Edad Media, cuando los vigías escudriñaban el horizonte en busca de peligros. Si la historia no te apasiona, deberías darle una oportunidad para disfrutar de unas vistas impresionantes del casco antiguo y la Bahía de Pollença.

Más allá de la Historia

Además de su legado único, Alcúdia ofrece una ubicación inmejorable. A solo unos minutos en coche se encuentra la espectacular Bahía de Alcúdia, con kilómetros de playas de arena fina y aguas cristalinas.

Si prefieres la montaña, el cercano Parque Natural de s'Albufera es una joya para los amantes de la naturaleza, con rutas de senderismo que serpentean entre humedales y bosques. Este contraste entre el mar y la montaña es otro de los atractivos que hace de Alcúdia un destino especial.