El pueblo de Guadalajara que invita a Bruce Springsteen a sus fiestas

Un verano de 1981 y una pancarta de 2012 fueron el pistoletazo de salida para que el pueblo entero se convirtiera en fan absoluto del cantante.

El Alto Tajo aguarda pueblos de una belleza espectacular
El Alto Tajo aguarda pueblos de una belleza espectacular / Abel Moreno

Un pueblo entero aficionado a Bruce Springsteen. Enclavado en el Alto Tajo, en plena provincia de Guadalajara, este municipio con 158 vecinos presume orgulloso de tener al americano como hijo adoptivo y a su lugar de nacimiento, Freehold, como ciudad hermanada. Quizá Springsteen no sea del todo consciente de este amor que se le profesa en Peralejos de las Truchas, a unos 3.500 kilómetros de distancia de su ciudad natal en Nueva Jersey, pero sus vecinos tienen una meta clara que viene de lejos: conseguir que el cantante vaya a Peralejos. Todo comenzó en el bar del pueblo, un verano de 1981.

Vista aérea de Freehold, la ciudad de nacimiento de Bruce Springsteen

Vista aérea de Freehold, la ciudad de nacimiento de Bruce Springsteen

/ Istock / Wirestock

Aquella fue la primera vez que los peralejanos conocieron a Bruce Springsteen, a través de unos vinilos que llevó un vecino del pueblo desde Madrid -donde estudiaba durante el año- y que no dejaron de escucharse en todos esos meses. Año tras año, los locales pedían a su paisano la nueva discografía del artista, que él acarreaba con gusto hasta el bar de sus padres. Así se creó una especie de club de fans que se ocultó en el pueblo hasta el año 2012, cuando el Boss aterrizó en la capital española para ofrecer uno de los mayores conciertos que presenciaría el antiguo Santiago Bernabéu de Madrid. Acudieron unos pocos con una pancarta en la que se leía el nombre de su querido pueblo.

El paisaje del Alto Tajo

El paisaje del Alto Tajo

/ Abel Moreno

"No queremos un concierto, pero sí una visita"

"What the fuck is 'Peralehos'?", preguntó extrañado desde el escenario. La cámara les había enfocado y el sueño había comenzado. A raíz de este suceso, los peralejanos aprovecharon su pequeña fama para pedir a Bruce Springsteen que se personara allí, en Peralejos de las Truchas. Según nos cuenta su actual alcalde Abel Moreno, en 2014 se le nombró hijo adoptivo y se le entregó la placa "en persona". Desde entonces, la bola no ha dejado de crecer y se empezó a celebrar el festival Greetings from Peralejos, "tributo a Bruce Springsteen", que se celebra entre la primera y la segunda semana de agosto. Dos años después llegó el hermanamiento con Freehold.

Peralejos de las Truchas en mitad de la sierra

Peralejos de las Truchas en mitad de la sierra

/ Abel Moreno

El alcalde aclara que "no es que queramos que venga a hacer un concierto", puesto que las infraestructuras no son suficientes para acoger un evento de tal envergadura. "Pero bueno, sí que venga a hacernos una visita por lo menos", afirma. En todos los actos los vecinos colaboran, más aún si se trata de algo relacionado con el Boss. "Esto es algo bueno para el pueblo y todo el mundo colabora", dice. Hay quien organiza el festival, quien se encarga de la música, algunos que ayudan en la campaña anual para recibir a Springsteen... La iniciativa realmente tomó fuerza el pasado 2023, cuando Las Burbutrizes de Guadalajara decidieron centrar su vídeo anual en dar voz a Peralejos.

Las Burbutrizes, responsables de mover la iniciativa en 2023

Este grupo de mujeres lo conforman unas amigas de diferentes puntas de la provincia que se conocían desde el colegio. Decidieron empezar juntarse para celebrar la amistad cuando cumplieron los 50 años, cuando se dieron cuenta de que "la vida va en serio", tal y como cuenta Laura Domínguez, Burbutriz. Ahora tienen 58 y lograron en 2022 un récord Guinness al colocar el lazo rosa más grande del mundo alrededor de las Tetas de Viana en apoyo a la investigación, detección precoz y los trabajos para evitar y minimizar el cáncer de mama. El año pasado, Bruce Springsteen hizo una gira mundial y encontraron la excusa perfecta para hablar de su relación con Peralejos.

Los peralejanos cantando The River junto a una figura de cartón de Bruce Springsteen

Los peralejanos cantando The River junto a una figura de cartón de Bruce Springsteen

/ Laura Domínguez

El vídeo llegó a un gran número de personas que se hicieron eco del lema: "Bruce, ¿qué haces en octubre? ¡Vente a Peralejos!" En él aparecen actores, cantantes e incluso la embajadora de América en España. Este mensaje se ideó debido a que en su gira había un vacío en aquel mes otoñal. Un hueco perfecto para que Springsteen invirtiera su tiempo en visitar el pueblo guadalajareño. Vieron en esta una historia "de verdad, absurda incluso" que merecía la pena contar. "Que a un pueblo tan pequeño del Alto Tajo, con una cultura tan distinta a la americana, le llegue la música tanto, por algo será", asegura Laura, que ahora ya es "muy fan del personaje".

Un valle en el Alto Tajo

Un valle en el Alto Tajo

/ Abel Moreno

Canciones hermanadas

En la canción 'The River' encuentran una similitud muy clara para ellas entre lo que el cantante quería contar y la vida de Peralejos de las Truchas: "allí ocurre también que los enamoramientos adolescentes van a darse sus paseos junto al río", igual que sucede en este tema tan popular del americano. Por ello decidieron hacer una versión bilingüe, "la única que hay en el mundo" que se cante en español e inglés. Los propios moradores también encuentran una gran inspiración en 'Only the strong survive', que para ellos habla de los gancheros, "héroes nómadas" que se dedicaban a transportar madera desde el curso alto del Tajo hasta Aranjuez, "los pastores del bosque flotante" tal y como describe José Luis Sampedro en uno de sus libros.

El río Tajo a su paso por el pueblo

El río Tajo a su paso por el pueblo

/ Abel Moreno

La Burbutriz coincide con el alcalde en que "su paisaje y su gente" es lo que más gustaría al cantante. "La naturaleza que tenemos en el Alto Tajo, con el río de aguas cristalinas, limpias, impolutas; las montañas, los bosques... Es algo que no está en todas partes", presume Abel Moreno. "Un paseo por el pueblo, charlar con la gente, que tomara algo con nosotros, la gastronomía local, sus pijancos o sus torreznos, por supuesto el río". Los gancheros se jugaban la vida en estos paisajes tan bonitos y al mismo tiempo peligrosos. En un lugar que aún hoy continúa recordando su labor durante la Fiesta Ganchera, es donde a Laura le gustaría ver al Boss: "qué bonito sería que subiera sobre un tronco y los gancheros le enseñaran a navegar por el río, esa imagen sería espectacular", asegura emocionada.

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