Un 2024 a bordo de un crucero: surcando el Mediterráneo en un barco gastronómico

Los cruceros todo incluido son un plan idílico: despertarse cada mañana en un puerto, buena gastronomía y actividades para todos los gustos. Pero también pueden ser, si no te organizas, estresantes: te damos todos los trucos para disfrutar de tus soñadas vacaciones. 

Un crucero gastronómico: una experiencia que debe vivirse una vez en la vida
Un crucero gastronómico: una experiencia que debe vivirse una vez en la vida / Costa

“Lo único malo que tiene un crucero es que tienes que volver a casa”, decía una amiga al subirse por primera vez a uno de estos gigantes barcos por primera vez en la vida. Razón no le faltaba, pues es una suerte de paraíso flotante en el que, rotundamente, debes subir una vez en la vida (la vuelta a la vida real ya la gestionarás después). Un hotel flotante que es perfecto para los que quieren hacerse una idea general de varios puntos geográficos para, de un vistazo, determinar si estos merecerán la pena para un viaje más largo.

El Costa Toscana surcando el Mediterráneo

El Costa Toscana surcando el Mediterráneo

/ Costa

Pero los cruceros son más que un mero transporte a través de diversos puertos, son una experiencia completa en sí mismos: son el lugar donde conocer gente, donde reír sin preocupación, donde disfruta de una brillante gastronomía, donde bailar y donde sorprenderse. Y uno de los mejores lugares para dejarse llevar es el Mediterráneo, uno de los itinerarios más codiciados por los europeos para disfrutar de esta experiencia. 

Uno de los barcos a los que debes subirte es el Costa Toscana. Este buque insignia de Costa Cruceros es todo lo que has soñado: un crucero con espectáculos cada noche, con amplios camarotes, entretenimiento para mayores y pequeños, grandes piscinas y su punto fuerte: una gastronomía para chuparse los dedos. Nos hemos subido a bordo y esta ha sido nuestra experiencia. 

Ver el atardecer desde un crucero es una experiencia inolvidable.

Ver el atardecer desde un crucero es una experiencia inolvidable.

/ Costa

La experiencia de un crucero gastronómico

Poner un pie dentro de un crucero es una sensación que solo se puede explicar viviéndola. Ya desde abajo, desde el muelle de partida, una colosal embarcación ante la que todo el mundo exclama lo mismo: “¿Cómo es posible que flote?”. Si, somos ese tipo de personas que nos hemos pasado 2 horas debatiendo e intentando averiguar cuál podría ser la forma en la que es capaz de flotar con semejante magnitud. 

Pero, para debatirlo, primero hay que llegar a los camarotes, dejar las maletas, preparar el uniforme de seguridad conformado por un salvavidas y pasar el primero de los controles que tiene cada crucero en el que subas: el simulacro. Una vez hecho, cosa que recomendamos que hagas a la mayor premura posible si no quieres recibir una carta imponente del capitán del barco, ya entrarás de lleno en la aventura de estos grandes hoteles flotantes. 

Terraza Infinity del Costa Toscana

Terraza Infinity del Costa Toscana

/ Costa

La primera vez que recorras sus pasillos te darás cuenta de que es más complejo de lo que parece, pero no tardarás en acostumbrarte a sus decenas de pasillos y grandes salones en los que siempre estará sucediendo algo. Salones en los que, además, se suceden las barras libres de cócteles y zumos, los restaurantes de especialidad y las grandes estancias donde se abre el telón cada noche para dar paso a magnos espectáculos. 

Especial importancia a la comida que, como contaba David Foster Wallace en uno de sus libros más aclamados, puede ser la absoluta guerra por conseguir un rebosante plato con el que sentirse satisfecho. Las guerras, de hecho, no están presentes en el Costa Toscana, que se ha especializado con este buque insignia en uno de los pilares fundamentales en los viajes: la gastronomía. Tanto, que son más de 21 restaurantes y espacios dedicados a la gastronomía los que se pueden encontrar en su interior. (Sí, nos hemos subido al crucero y hemos podido comprobar que definitivamente puede flotar un barco con todo esto dentro, más los camarotes, un ratio de personal altísimo, grandes piscinas y zonas de espectáculos con discoteca. ¡Alucinante!) 

Una de las elaboraciones que podrás degustar en el Costa Toscana.

Una de las elaboraciones que podrás degustar en el Costa Toscana.

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Un viaje gastronómico que se materializa en restaurantes de especialidad como Sushino, en el que degustar un delicioso sushi hecho al momento; Teppanyaki, donde acudir a una demostración en primera persona de la cocina de los chefs japoneses en primer plano con platos de inspiración asiática; o la Pizzería Pummid’Oro, con una gran variedad de pizzas artesanas elaboradas al momento con mozzarella de buffala, tal como manda la tradición italiana. 

Eso sí... el culmen de la gastronomía por antonomasia, la joya de la corona, el lugar donde deleitarse con verdaderos manjares no es otro que el restaurante Archipelago. Es uno de los más demandados, y tendrás que hacer una reserva previa cuanto antes si no quieres quedarte sin tu merecido hueco, y tiene una razón de ser. Se ubica en uno de los espacios más sofisticados del barco y cuenta con una carta firmado por tres chefs de renombre: Ángel León, Bruno Barbieri y Hélen Darroze, tres afamados cocineros con estrellas michelín. Deberás elegir uno de los tres menús, que se compone de cinco platos diferentes cada uno que reinterpretan los ingredientes, tradiciones y recetas de los destinos en los que recala el crucero. 

Estos tres chefs de renombre firman la carta del restaurante más importante del crucero.

Estos tres chefs de renombre firman la carta del restaurante más importante del crucero.

/ Costa

El toque dulce lo ponen otros de sus tantos espacios, como el Nutella Bar, que no necesita presentación alguna: deliciosas creaciones como crepes o gofres servidas con este chocolate líquido catalogado por muchos como el summum del placer chocolatero por excelencia. Si te has quedado con hambre... tranquilos, porque seguís teniendo decenas de corners donde disfrutar con todo tipo de comidas que van desde las ensaladas a platos internacionales. 

Tampoco te olvides de pasar por sus restaurantes principales, los incluidos en el precio y en formato buffet, que te van a cautivar en igual medida y que cambian su menú cada día. En cualquiera de ellos encontrarás sus famosos Platos de Destino, con los que la compañía interpreta la tradición y los sabores del lugar que se visitará al día siguiente, como una anticipación del próximo destino. 

Si lo tuyo es comer... este es tu crrucero soñado.

Si lo tuyo es comer... este es tu crrucero soñado.

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Si tras comer como no has comido nunca, todavía te quedan fuerzas... he aquí unas cuantas cosas más que podrás hacer al subirte al Costa Toscana. 

Más allá de la gastronomía

¿Por qué decíamos que un crucero puede llegar a ser estresante? Es sencillo: si no eres organizado, puedes entrar en una parábola de estrés que te haga cegarte ante tal magnitud de actividades por hacer, comprimidas en unos cuantos días. Y es que sí... los cruceros nos sirven para hacernos una pequeña idea de las ciudades o pueblos en los que va parando, pero también son un destino en sí mismos. 

Bar Campari del Costa Toscana

Bar Campari del Costa Toscana

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Un destino flotante en el que no falta el entretenimiento, que empieza en su teatro. Un espacio en el que disfrutar de espectáculos para toda la familia: desde clásicos de humor a espectáculos teatrales para que los más pequeños disfrutan (y los mayores también). O si eres cantante, con uno de los espectáculos que más furor ha causado: su propio show de La Voz, en la que solamente por ser uno de los huéspedes puedes participar y llevarte suculentos premios. Pero ojo: competirás con verdaderos vozarrones. 

A las actividades más culturales se le unen otras como su casino, donde probar suerte con sus especializados crupiers; su sala de juegos recreativos para adolescentes con una gran cantidad de videojuegos de arcade; o la Piazza del Campo, una gran escalera con las vistas más privilegiadas del mar donde cada día por la tarde encontrarás actividades y juegos para toda la familia. 

Una de las terrazas del Costa Toscana

Una de las terrazas del Costa Toscana

/ Costa

Si haces el crucero en verano, además de tostarte en una de sus tantas tumbonas e inflarte a cócteles, también podrás jugar a ser atrevido con su zona de toboganes y aquapark. No apto para corazones cardíacos, pero sí una joyita en alta mar con la que te vas a entretener (y mucho). 

Al llegar la noche, tras 15.000 pasos en la ciudad, 2 actividades, 10 cócteles, una¡ ratito de descanso en una tumbona y un crepe de nutella, todavía te quedan ganas de continuar.... ¡Obviamente puedes! ¿Cómo? Pues con una de sus tantas fiestas temáticas: desde una fiesta en la piscina con cascos y 3 djs en el que tú eliges a cuál de ellos quieres escuchar, a una noche en la discoteca principal en las que bailar con tus amigos al son de los grandes éxitos pop y reggaetón internacionales. ¡Merece la pena! En pocas ocasiones podrás ver a tu tía Amparo dándolo todo en la pista.

Habitación con balcón del Costa Toscana

Habitación con balcón del Costa Toscana

/ Costa

Eso sí, te avisamos que lo mejor que puedes hacer es retirarte a tiempo. Y no lo decimos nosotros, lo dice el ideario popular: “Una retirada a tiempo es una victoria”. Una frase que en los cruceros cobra especial sentido, porque puedes terminar verdaderamente agotado tus vacaciones por querer abarcar todas las opciones que se cruzan por tu camino. Y lo más importante y que debes recordar: no quieres acabar tus vacaciones deseando que vuelvan a empezar las siguientes. 

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