El rincón secreto de Granada: una joya nazarí escondida en el Albaicín

Podría pensar el viajero que no quedan rincones secretos en Granada por visitar, pero se equivocaría. Siempre hay alguna calle (aquí tienes las más bonitas de la ciudad), algún edificio o algún mirador que, si bien no pasa desapercibido para los granadinos, sí lo hace para el viajero convencional. Hace tiempo os ofrecíamos, por ejemplo, un listado con los lugares escondidos de la ciudad para tener las mejores vistas de La Alhambra, muestra de que aún quedan enclaves mágicos por descubrir.

La ciudad andaluza esconde en sus calles tesoros que van mucho más allá de la mítica y bella Alhambra, ciudad palatina nazarí del siglo XI. Hoy, por ejemplo, ponemos un pie en el Albaicín para descubrir una casa nazarí construida en el siglo XIV que alberga el Centro de Interpretación del Albaicín, un lugar único para conocer todo lo referente al estilo de vida árabe que se vivía en Granada.

Casa de Zafra: joya nazarí

Este palacete nazarí perteneció en el pasado a una familia de aristócratas andalusíes y, desde que se levantó, es una buena muestra de la impronta árabe tan presente en la ciudad. Desde el exterior lo que ve el viajero es un macizo sin vanos, algo muy propio de las casas islámicas, cuya vida gira en torno al patio central ajena a miradas indiscretas.

Se cruza el zaguán y uno sigue sin imaginar el tesoro que se va a encontrar a tan solo unos pasos. Por una puerta de arco apuntado de ladrillo llegamos al patio, con una alberca alargada y una fuente de mármol blanco en uno de sus extremos.

La casa sigue como antaño, con un pórtico norte formado por vanos que se apoyan en columnas de mármol con capiteles cúbicos. A través de un arco de medio punto decorado con atauriques de yeso se llega a la sala principal. Y el pórtico sur tiene una organización parecida, pero las columnas sostienen capiteles almohades.

La planta alta se construyó varios siglos más tarde (en el XV). Y, aunque no se sabe con certeza, parece que se levantó para albergar a diferentes familias, dejando de ser una residencia individual.

Centro de Interpretación del Albaicín

La Casa de Zafra acoge el Centro de Interpretación del Albaicín, un conjunto de exposiciones que invitan al viajero a adentrarse en los orígenes del barrio musulmán y descubrir cómo fue y cómo es hoy en día este barrio declarado Patrimonio de la Humanidad.

El recorrido pasa por cuatro puntos temáticos: el concepto de Patrimonio Mundial, el origen y evolución de la ciudad de Granada, el Albaicín y la recreación de una casa nazarí.

• Desde 1994 el Albaicín es Patrimonio Mundial y este Centro de Interpretación trata de poner en valor el enorme patrimonio histórico, artístico y cultural por el cual el barrio fue incluido en la lista de la UNESCO.
• El viajero también podrá aprender más sobre el nacimiento y evolución de la ciudad de Granada, haciendo especial hincapié en las transformaciones que fue viviendo el Albaicín a lo largo de los siglos. 
• En la planta superior, descubrimos el legado del barrio y abundante información sobre sus calles, plazas, iglesias y restos islámicos. 
• Por último, encontramos una muestra de cómo era la vida doméstica en las casas islámicas, siendo esta Casa de Zafra el mejor ejemplo.

Para visitar la Casa de Zafra debes dirigirte a la calle Portería Concepción y buscar el número 8. En la temporada que va desde el 15 de marzo hasta el 14 de octubre, se puede visitar de martes a sábado de 9:30 a 13:30 y de 17:00 a 20:00 horas. Los domingos solo permanece abierta en horario de mañana, de 9:30 a 13:30 horas. La entrada general cuesta 3 euros, mientras que estudiantes, jubilados y menores de 16 años deberán abonar tan solo 1 euro. Y si lo que buscas son planes gratuitos, puedes visitar este rincón secreto de Granada el domingo, puesto que el acceso es libre.

En definitiva, si tienes pensado disfrutar de Granada, es más que recomendable visitar esta joya nazarí escondida en el Albaicín. Y, como consejo final, si buscas alojarte en un sitio sorprendente, puedes descubrir el primer hotel Gran Lujo de Granada, con vistas a la catedral y ubicado en un antiguo banco. Un planazo redondo.