El país que parece ciencia ficción: islas paradisiacas, ríos subterráneos y colinas de chocolate

Filipinas es un destino de ensueño que parece salido de una novela de ciencia ficción. Y es que este archipiélago situado en medio del océano Pacífico tiene lugares que parecen de otro mundo. Islas paradisíacas, lagos y ríos subterráneos y hasta unas colinas de chocolate. Te contamos cuándo viajar a Filipinas y lo que no debes perderte en este país.

Este archipiélago ofrece una variedad de paisajes y experiencias únicas en el mundo. A continuación exploraremos algunos de los lugares más espectaculares de Filipinas que hacen de este país un destino mágico.

Cuándo viajar a Filipinas

Filipinas tiene un clima tropical por lo que es crucial planificar tu viaje en el momento adecuado para disfrutar al máximo de su belleza y que el tiempo no te arruine las vacaciones. El clima en Filipinas es cálido y húmedo durante todo el año aunque se divide en dos estaciones principales: la seca y la de las lluvias.

La temporara seca abarca desde noviembre hasta abril y es la mejor época para visitar Filipinas. Las temperaturas son agradables y hay menos lluvias, lo que hace que sea el momento ideal para explorar playas, islas y actividades al aire libre. Diciembre, enero y febrero son las meses más frescos, con temperaturas que oscilan entre 24°C y 31°C. A partir de marzo la temperatura empieza a aumentar y hasta abril pueden alcanzarse hasta 34 grados.

En mayo comienza la temporada de lluvias y el país experimenta un clima más húmedo con lluvias frecuentes y la posibilidad de tifones, especialmente entre agosto y octubre. De mayo a junio las lluvias no suelen ser muy intensas, por lo que se pueden realizar actividades al aire libre. A partir de julio y hasta octubre tiene lugar la temporada de lluvias intensas y tifones. Viajar durante estos meses puede ser impredecible y algunas áreas pueden ser inaccesibles, por lo que no es nada recomendable.

Qué ver en Filipinas

Si viajas a Filipinas no puedes perderte un recorrido por algunas de sus islas más espectaculares y algunos de sus paisajes naturales como ríos y montañas. Entre las islas más conocidas del archipiélago destacan Palawan, Boracay o Siargao.

Palawan es conocida como la "última frontera" de Filipinas y ha sido nombrada en múltiples ocasiones como la mejor isla del mundo. Sus playas de arena blanca, aguas cristalinas y exuberante vegetación la convierten en un verdadero paraíso. En Palawan se encuentra el Nido, famoso por sus acantilados de piedra caliza, lagunas escondidas y playas vírgenes; Coron, donde podrás bucear entre naufragios de la Segunda Guerra Mundial y arrecifes de coral.

Boracay es la Ibiza de Filipinas. Famosa por su vibrante vida nocturna y sus playas, es el lugar donde debes ir si te gusta la fiesta. La Playa Blanca es el epicentro de la acción, con arena fina y aguas tranquilas ideales para nadar y practicar deportes acuáticos.

Siargao es conocida como la capital del surf en Filipinas, gracias a su ola más famosa, Cloud 9. Además del surf, Siargao ofrece piscinas naturales, lagunas y una atmósfera relajada perfecta para los amantes de la naturaleza.

Además de playas de ensueño, este país también tiene agua en el interior. Hablamos del río subterráneo de Puerto Princesa, ubicado en Palawan, uno de los sistemas fluviales subterráneos navegables más largos del mundo. Este río, que fluye directamente hacia el mar, atraviesa una cueva de piedra caliza llena de estalactitas y estalagmitas impresionantes.

Si llegas hasta allí puedes tomar un bote desde la entrada de la cueva y recorrer el río subterráneo mientras un guía explica las formaciones rocosas y la historia del lugar. Los alrededores también son dignos de visitar y son el hogar de muchas especies de plantas y animales endémicos.

Tras bañarte en sus paradisiacas playas y recorrer el río subterráneo, tampoco puedes perdert las Colinas de Chocolate en Bohol, uno de los paisajes más icónicos de Filipinas. Este conjunto de más de 1.200 colinas de forma cónica se extiende a lo largo de 50 kilómetros cuadrados. Su curioso nombre se debe a que durante la temporada seca, la hierba que cubre las colinas se vuelve marrón, dándoles su aspecto de "chocolate". En la temporada de lluvias, las colinas son verdes y exuberantes.

Qué hacer en Filipinas: actividades que no puedes perderte

Filipinas es un paraíso para los amantes del buceo, con algunos de los mejores sitios del mundo. Tubbataha Reefs es un parque marino protegido en el Mar de Sulu, famoso por su biodiversidad y ecosistemas intactos. Tampoco puedes perderte Apo Reef, el segundo sistema de arrecifes de coral más grande del mundo, ideal para avistar tiburones, rayas y tortugas marinas.

Si te gusta la naturaleza, aprovecha para subir al Monte Pulag, la tercera montaña más alta de Filipinas, famosa por su "mar de nubes" y sus vistas panorámicas al amanecer. Otro plan que te encantará es la exploración de cuevas en Sagada. No te pierdas la famosa Cueva Sumaguing, con sus impresionantes formaciones de estalactitas y estalagmitas.

En cuanto a la cultura del país aprovecha tu visita para participar en alguno de sus coloridos festivales como el Sinulog en Cebu o el Ati-Atihan en Kalibo, celebraciones llenas de música, danza y color. La comida filipina te encantará. Prueba delicias locales como el lechón, adobo, sinigang y halo-halo, una mezcla de postres que es perfecta para el clima tropical.