'Se ha escrito un crimen' cumple 40 años: descubre el pintoresco pueblo donde se rodó

Jessica Fletcher aterrizó en la pequeña pantalla hace ya 40 años, en 1984, de la mano de la actriz Angela Lansbury. Esta entrañable viuda escritora de novelas y aficionada a resolver asesinatos -inspirada en Miss Marple de Agatha Christie- se convirtió en la detective amateur más querida de la televisión. En 1997 finalizó su emisión, no así su fama internacional y su presencia en antena. Alguno de los vestigios de la serie siguen presentes en las localizaciones de sus rodajes. Aunque ella vivía en una localidad ficticia de la costa de Maine (Estados Unidos), la verdadera ubicación era California, en un pueblo llamado Mendocino, donde el cielo se une con el océano bajo la atenta mirada de un faro.

La casa de Jessica

Este municipio ha sido el plató de otras producciones como 'Karate Kid III', 'Elegir un amor' o 'Al este del Edén', aunque la serie que verdaderamente le otorgó la fama de la que goza es 'Se ha escrito un crimen'. Pese a que las grabaciones se repartían entre varios puntos de Norteamérica, en este pueblo está el hogar de Fletcher, la Casa Blair, construida en 1888. Hoy es un alojamiento turístico y uno de los retiros históricos más lujosos del norte de California, donde esperamos no vivir uno de los crímenes que tanto le gustaba resolver a la detective. Todas las primaveras, el equipo de rodaje acudía a Mendocino y sus vecinos esperaban con impaciencia su llegada.

Pese a que California se encuentra en la otra punta del país con respecto a Maine, la localización se eligió debido a que grabar en la costa de Maine era mucho más caro y la arquitectura de ambos lugares era similar. La serie allí continúa viva con elementos como un cartel en la puerta de la vivienda que reza "The Hill House of Cabot Cove". El interior, sin embargo, no se utilizó en el rodaje, pero con el tiempo se ha convertido en la auténtica casa de la escritora, con detalles victorianos y ornamentos que Fletcher adoraría con un toque vintage.

El pueblo

Haber acogido esta importante producción ha llevado a Mendocino, un municipio de menos de mil habitantes, a ser conocido en todo California. A lo largo del año presenta más facetas artísticas siendo la sede de eventos como el Festival de Música de Mendocino, el Festival de la Ballena o el Festival de Cine. Este pueblo costero abraza una belleza natural innegable, con bosques de secuoyas exhuberantes, impactantes acantilados a pocos metros de la urbe y unas vistas al océano de las que pocos lugares pueden presumir.

Las casas se reúnen en lo alto de un acantilado, lo que hace que la pequeña ciudad tenga unas vistas espectaculares desde cualquier rincón, incluso paseando por su centro histórico entre tiendas, cafeterías y galerías de arte. En el Parque Estatal Mendocino Headlands se puede practicar senderismo y observación de aves y ballenas, además de visitar áreas históricas como la Casa Museo Ford o el faro de Point Cabrillo. Pasear por los acantilados, montar en bici por las calles del pueblo, disfrutar de las vistas al océano e incluso pasar alguna noche en la casa de Jessica Fletcher... ¿Qué más se puede pedir?