Tu pasaporte tiene un chip con una función secreta y no lo sabías

Lo usas cada vez que vas a emprender un viaje, pero nunca te habías fijado. Y no es para menos, pues es tan solo un símbolo diminuto que se puede observar en la parte baja de la solapa de tu documento para viajar al extranjero. Pero, lejos de ser un grabado sin más, este es uno de los métodos de seguridad más avanzados en materia de identificación. 

Un tipo de pasaporte que ya recorre prácticamente todos los países del mundo y que, en España, empezó a expedirse en 2007. No sería hasta 2015 cuando se lanzaría, definitivamente, el que todos llevamos en nuestros viajes: conocido como pasaporte 3.0. Este nuevo modelo de pasaporte fue el que introdujo las grandes novedades electrónicas que nos han dejado con la boca abierta (por desconocimiento de su existencia, claro). 

Este nuevo pasaporte, físicamente, no tiene grandes diferencias con su antecesor en una primera vista: es rectangular, tiene una portada en color Burdeos y cuenta con 32 páginas preparadas para ser selladas en tu próximo gran viaje. Pero lo sorprendente es el imperceptible chip RFID embebido en la portada posterior que permite nuestra identificación sin necesidad de contacto.  

Un chip invisible, pero muy poderoso

Quizás ya lo conoces si, en los últimos años, has decidido rellenar el formulario ESTA para viajar a los Estados Unidos desde tu teléfono móvil. Y es que su aplicación te permite rellenar tus datos básicos de dos formas: manualmente o, si dispones de un dispositivo con la tecnología NFC, escaneando tu pasaporte por la parte posterior. Cuando lo haces, este te indica que se están leyendo tres cosas fundamentales: tu rostro, tus huellas y tus datos personales. 

Por supuesto estos datos van encriptados, pues integra métodos de seguridad avanzados, habitualmente en base a una lámina de policarbonato con un circuito electrónico incrustado. Es en su interior donde se usa la biometría para autentificar la identidad y nacionalidad de su portador, que sirven en primera instancia para dar veracidad a los datos contenidos en el pasaporte físico, haciendo imposible forjar identidades falsas entorno a tu persona. 

¿Qué datos contiene el chip del pasaporte sobre nosotros?

No es ninguna sorpresa, pero a todos nos ha pasado que hemos pasado de las explicaciones y manuales al pedir la cita de nuestros documentos sin, si quiera, prestar atención a lo que estamos haciendo. Y es que, la web de Pasaporte y DNI de la Policía Nacional lo deja claro en su portada “Todos los pasaportes españoles que se expiden en la actualidad son pasaportes electrónicos, también conocidos como pasaportes biométricos”. 

O lo que es lo mismo, tiene diversos datos sobre nosotros que tú (y nosotros) desconocíamos que se podían ocultar bajo un chip. La misma web de la Policía Nacional detalla los datos que este guarda sobre nosotros: 

• Una imagen digitalizada en alta calidad. 
• Datos biométricos (o, lo que es lo mismo, un escaneo de nuestro rostro y nuestras facciones para poder ser identificados) 
• Datos biográficos: datos de nuestros antepasados, edad, sexo... 
• Huellas dactilares de ambos índices: una de las medidas de seguridad por excelencia para viajar al extranjero. 

Si te sorprende tanto como a nosotros que un mini-chip incrustado en nuestro pasaporte pueda contener tantos datos sobre nosotros, piénsatelo bien: así te libras de que cualquier persona del planeta se pueda hacer pasar por ti en el futuro. 

Y, si te sigue preocupando, te adelantamos que el pasaporte físico, sin el chip, también cuenta con unos altísimos estándares de seguridad: un papel con nuevos entramados y medidas, nuevas marcas de agua, componentes holográficos específicos renovados, medidas de seguridad visibles e invisibles que reaccionan a las luces ultravioleta e infrarrojas o un punto de contacto vinculado al DNI, que sirve en caso de sufrir alguna emergencia fuera de España.