Los viajes de la chef Begoña Rodrigo: "Un país al que vuelvo siempre es Tailandia"

Además de la propuesta de su restaurante La Salita (Estrella Michelin), la chef y creadora de Anarkía Begoña Rodrigo imparte clases y talleres sobre gastronomía. 

La chef Begoña Rodrigo.
La chef Begoña Rodrigo. / ©Tatiana Tsarenko.

El gran público la conoció en la pequeña pantalla tras coronarse ganadora de la primera edición del programa Top Chef. Hoy, Begoña Rodrigo es una de las chefs más reputadas de nuestro país. Esta es su experiencia viajera.

Begoña es muy motera.

Begoña es muy motera.

/ Istock

Al pensar en su infancia, ¿cuáles son sus vacaciones más recordadas?

Mis vacaciones más recordadas son las de mi pueblo. Afortunadamente, siempre he viajado mucho, pero las que más recuerdo son las vacaciones en Sot de Chera, un pueblo en Serranía, en Valencia. Todos los años, cuando terminábamos el colegio, mis abuelos me recogían y me llevaban allí tres meses sola con ellos.

¿Cuál fue el primer viaje que hizo sin sus padres?

El primer viaje que hice sin mis padres fue a Aguadulce, en Almería. Los padrinos de mi hermana eran de allí, y nos fuimos los tres hermanos en autobús. Yo tenía 11 o 12 años, y nos dijeron que nos iban a invitar a un concierto de El último de la fila. No tenía ni idea de quienes eran, así que paramos en una gasolinera a comprar un cassette, y estuvimos todo el viaje escuchándolo para aprendernos la letra.

Tailandia.

Tailandia.

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Si no viviera donde lo hace, ¿en qué ciudad le gustaría hacerlo? 

Si no viviera en Valencia, me gustaría vivir en un sitio en el que hiciera mucho sol todo el año. Pero es que yo estoy enamorada de Valencia. Después de vivir ocho años fuera, me di cuenta de que echaba muchísimo de menos la luz y el clima de Valencia. Una ciudad que me encanta es Ámsterdam, un país al que vuelvo siempre es Tailandia, y allí, me encantaría vivir en Pai. 

¿A qué destino le gustaría ir si tuviera el tiempo y/o el dinero?

Un sitio al que no he ido por tiempo es Australia, pero necesitas mucho tiempo para ir, y mucho tiempo para estar ahí. Nunca encuentro el momento para ir. Me interesa mucho la gastronomía, el buceo, siempre me ha dado mucha curiosidad.

Sídney, Australia.

Sídney, Australia.

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¿Su rincón favorito del planeta?

Mi rincón favorito del planeta es mi pueblo. Esa es la verdad. Y eso que no tiene mar. Es un sitio que me da mucha paz, y me recuerda a mis abuelos.

¿Ha realizado algún viaje inspirado en algún libro, película o disco?

Sí. Fui a conocer Vietnam después de leer el libro Viajes de un chef: en busca de la comida perfecta, de Anthony Bourdain, porque él decía que allí lo había conseguido. Aunque al final del libro dice que lo mejor es tomarse unas sardinas en la playa con alguien que quieres… También Tailandia, Orleans o Nueva York son viajes que he hecho después de ver alguna película, porque me encanta el cine. 

¿Medio de transporte favorito?

En Ámsterdam me encantaba ir en bici, pero en Valencia es difícil porque el tráfico es horrible. Entonces voy en moto, tengo una Harley y una Vespa. Soy muy motera. Me da una sensación de libertad brutal.

Ámsterdam.

Ámsterdam.

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¿Cuál es la compra más estrambótica que ha hecho en uno de sus viajes?

En el primer viaje a Tailandia, me traje un cubo de bambú enorme para fermentar el arroz. Pero como he viajado tanto ya, no compro muchas cosas en los viajes, solo una prenda que me recuerde al sitio en cuestión.

¿Qué no puede faltar en su maleta? 

Soy muy simple, lo único que no puede faltar en mi maleta es mi crema de cara y el cepillo de dientes. No necesito mucho más. Soy muy backpacker y me gusta mucho viajar sin tener muy claro lo que voy a hacer allí. De hecho, suelo reservar el hotel solo la primera noche, y si no me gusta, me voy y me busco la vida. Por eso odio viajar con maletas cargadas.

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