El truco de la salida de emergencia en el avión: apréndetelo para tu próximo viaje

La mayoría de viajeros suelen preferir ventanilla cuando viajan en avión. Y, generalmente, lo hacen o bien por las vistas o por la posibilidad de recostar la cabeza y echar una cabezadita durante el vuelo. También hay gente que prefiere que su asiento se sitúe en el pasillo, ya que así pueden acudir al baño sin necesidad de levantar a los compañeros de fila o, los más agoreros, por posibilidad de salir de la aeronave más rápidamente en caso de algún percance.

Con la asignación aleatoria de asientos que realizan las diferentes compañías aéreas (cada una cuenta con su propio algoritmo de selección) no vas a poder elegir fila ni ubicación dentro del avión. Eso siempre que no pagues un extra o pongas en práctica el truco de la ventanilla.

Y, como de trucos va la cosa, hoy te contamos el de la salida de emergencia, que debes aprenderte de cara a tu próximo viaje. Eso sí, conviene que tengas claras las ventajas y, también, las obligaciones.

Cada aeronave tiene diferentes salidas de emergencia. Normalmente encontramos en la parte delantera, en la trasera y en las alas. Y es precisamente en estas, en las que se sitúan unos asientos con características especiales.

Ventaja de los asientos en las salidas de emergencia

Los asientos que se encuentran junto a la salida de emergencia suelen contar con mucho más espacio para las piernas que los asientos normales. Incluso, en ocasiones, hay un hueco y en la fila anterior solo encontramos dos asientos que corresponderían a las posiciones central y de pasillo. Esta peculiaridad hace que sea un asiento muy demandado en todo tipo de vuelos (especialmente los de medio y largo radio), ya que te permite disfrutar de un confort extra muy parecido al de categorías superiores. Vale, no es business, pero es lo más parecido que podemos encontrar a precio de turista.

Obligaciones y desventajas de los pasajeros en salidas de emergencia

Al no tener una butaca delante, los pasajeros que se ubiquen en estos asientos van a tener una bandeja más pequeña que el resto del pasaje, ya que la suya se extrae desde uno de los reposabrazos.

También hay que tener en cuenta que no se pueden depositar objetos personales en la zona del asiento delantero y, por tanto, todas tus pertenencias deberán ir en los compartimentos superiores durante el despegue y el aterrizaje. Y es que, más allá de la comodidad, esta posición es clave en caso de una emergencia o evacuación del pasaje.

No todo el mundo puede sentarse en las salidas de emergencia de un avión, ya que el pasajero que se sitúe en esa posición deberá aceptar el compromiso de colaboración con la tripulación en caso de algún problema. Además, cada aerolínea establece sus propias normas. Generalmente hay que ser mayor de 16 años, hablar inglés o el idioma del país de la compañía aérea, no viajar con un bebé sin asiento, no requerir ningún tipo de asistencia especial en el aeropuerto ni necesitar un alargador del cinturón de seguridad.

Con todo esto, el viajero deberá valorar pros y contras a la hora de elegir un asiento en las salidas de emergencia. Y, ojo, porque si ya has hecho el check in y no tienes muy clara la posición de tu asiento, el buscador de Seat Guru (cuando metas nombre de la aerolínea, número de vuelo y día de salida) te dará todo tipo de información. Además, marca en rojo los peores asientos dentro del avión teniendo en cuenta el tránsito de pasajeros, ruido o cercanía a los baños.