El pueblo más pequeño de Extremadura: 73 habitantes, infinitos encantos

La despoblación es un problema muy presente en la mayoría de los pueblos de nuestro país, cada vez son más las personas que abandonan la zona rural para buscar nuevas oportunidades en la gran ciudad. Los territorios españoles que abarcan mucho terreno como Extremadura o Aragón son más propensos a tener menos habitantes por kilómetro cuadrado. Pero cada vez más gente asegura que la vida en el pueblo es mucho más feliz y tranquila y que es el lugar ideal para vivir. Si todavía quedan dudas de ello, pueden preguntarle a las 73 personas que viven en Pedroso de Acím, el pueblo con menos habitantes de Extremadura.

Ubicado en la ladera de la espectacular sierra del Pedroso, en la provincia de Cáceres, se encuentra Pedroso de Acím, un pequeño pueblo lleno de encantos que son disfrutados por sus 73 habitantes censados. Su situación en la comarca de Monfragüe, a unos 40 kilómetros de Plasencia y 58 de Cáceres hace de este destino un lugar increíble en el que disfrutar de la naturaleza que regala emplazamientos como la ruta de la plata. Con una extensión de poco más de 30 kilómetros cuadrados, destacan en el paisaje la Peña de los Cenizos y los cerros del Pelado y Entrecabezas. Además, el lugar cuenta con increíbles arboledas de olivos y dehesas y está bañado por los mágicos arroyos de Fresneda y Razasa. Las buenas temperaturas protagonizan el clima de Pedroso de Acím, con una media anual de 16.7 grados que se elevan hasta los 25.8 grados en la época veraniega. 

La historia de Pedroso de Acím se remonta al siglo XIV cuando los carboneros se dedicaban a explotar el bosque y posteriormente fue el hogar de la Casa de Alba perteneciente al marquesado de Coria. Pero sus encantos históricos continúan ya que en la dehesa del Berrocal, muy cercano a la fuente del Palancar, se hallaron monumentos megalíticos, fragmentos de una antigua calzada romana y enterramientos que datan de la época visigoda. La belleza de Pedroso de Acím está caracterizada por las tradicionales casas antiguas que se construían con granito. Las viviendas blancas decoran este pueblo en el que la sencillez y la calidez de sus habitantes protagoniza un enclave idílico.

Pese a que su economía está basada en la comunidad de agricultores y ganaderos, hay otras muchas opciones de entretenimiento y socialización en el pueblo. Uno de los lugares más importantes de Pedroso es su monasterio, considerado el más pequeño del mundo y que cada año visitan los viajeros que buscan deleitarse con un monumento impresionante. Además, otro de los edificios más resaltados del municipio es su torre del reloj, un gran edificio en forma de torreón con un reloj y un campanario. El convento del Palancar y la Ermita de Santa Bárbara son otros de los enclaves religiosos con mucha historia que no debes perderte en tu visita a Pedroso de Acím. 

Es un grave error pensar que la vida en el pueblo es muy aburrida, a veces hay que buscar los encantos en aquellos lugares en los que la tranquilidad abunda. Como buen municipio español cuenta con sus fiestas patronales que se celebran el 19 de octubre en honor a San Pedro de Alcántara y en las que se realiza una procesión y romería hasta el convento del Palancar y se celebran verbenas populares. El carnaval y la Semana Santa son otros de los festejos que tienen lugar en Pedrosa de Acím. Debido a la escasa población infantil (tres niños de entre 0 y 15 años censados en 2022) el municipio no tiene servicio de escuela, pero los más pequeños pueden seguir su educación en pueblos cercanos. Pese a esto, las actividades de entretenimiento que ofrece este destino no son escasas, piscina, casa rural, bares y restaurantes son el escenario ideal para desarrollar la vida social. 

Está claro que existen lugares mágicos donde no hace falta un centro comercial y una calle llena de tiendas y bares para ser feliz. Los encantos de pueblos como Pedroso de Acím hacen de nuestro país un lugar en el que la sencillez de vida es la protagonista del bienestar de sus habitantes.