8 paradas imprescindibles para conocer el Downtown de Los Ángeles

El viajero que llega a Los Ángeles lo hace, generalmente, seducido por el glamour de Hollywood. Más allá de los sitios imprescindibles que ver en la meca del cine, hay un barrio que siempre ha estado a la sombra y a lo largo de las últimas décadas se ha llevado una inmerecida fama. Hablamos del distrito financiero de Los Ángeles y, hoy en concreto, de las 8 paradas imprescindibles para que puedas decir que conoces el Downtown de Los Ángeles como la palma de tu mano.

No hace falta ser muy listo para divisar el Downtown si se contempla el skyline de la ciudad. Los Ángeles parece ser una metrópoli sin fin, un vasto territorio de construcciones bajas que contrastan con los interminables rascacielos que hacen del distrito económico el punto más reconocible en la distancia.

Consejos prácticos para visitar el Downtown

Si se presta atención a las noticias, dan ganas de no acercarse por este barrio de Los Ángeles ni en pintura, ya que la tasa de criminalidad es bastante alta con respecto a otros distritos de la ciudad. Aun así, todo tiene sus matices y, con unas normas de seguridad básicas, no resulta más peligroso que cualquier otro punto de interés.

Debe saber el explorador que el Downtown es el distrito financiero y, por ello, es un hervidero de personas en horario de oficina. Cuando estas se vacían, queda un panorama desértico que le da un aspecto de barrio fantasma. Por la mañana, antes de que caiga el sol y evitando ciertas calles, se puede pasear y descubrir sitios fantásticos sin peligro alguno. Al caer la noche, en cambio, es mejor evitar zonas poco transitadas si no queremos llevarnos un disgusto. Vamos, lo mismo que en cualquier otra gran ciudad del mundo. 

Arrancamos nuestro recorrido por el Downtown en el Ayuntamiento de Los Ángeles. El Ayuntamiento de Los Ángeles se construyó en 1928 y fue el primer rascacielos de la ciudad y edificio más alto hasta finales de la década de los 60 gracias a sus casi 140 metros de altura. Destaca por su torre con una estatua llamada "El Mensajero de la Misión" y alberga las oficinas de los miembros del Consejo Municipal, así como salas de reuniones y espacios públicos para los ciudadanos.

Puedes visitar algunas dependencias de forma gratuita de lunes a viernes en horario de oficina y, si eres amante del cine, hacer unas cuantas fotos (aquí tienes algunos consejos de experto para que te salgan de fábula) a su fachada, ya que ha salido en infinidad de películas. ¿Recuerdas a Spiderman trepando por ahí? 

Walt Disney Center Hall recuerda a… sí, lo habéis acertado, al Museo Guggenheim Bilbao. Y, como no podía ser de otra manera, es obra de Frank Gehry, que lo dio por finalizado en 1996, aunque no abrió sus puertas al público hasta 2003. Este edificio cuenta con unos de los auditorios más importantes de la ciudad y, ojo, porque su sala de conciertos (sede de la Orquesta Filarmónica de Los Ángeles) tiene capacidad para unas 2.200 personas.

El edificio fue financiado por la mujer de Walt Disney para rendir homenaje a su esposo, amante de la música y dicen que es uno de los mejores centros musicales del mundo ya que cuenta con una acústica excepcional. Puedes visitarlo con guía, pero el recorrido no incluye la entrada al auditorio, ya que hay ensayos a diario.

Hay quien dice que Chinatown está en decadencia. Y puede ser verdad, pero pasear por el barrio chino del Downtown tiene su encanto. Además, vas a poder descubrir diversos templos o pasear por calles que han sido utilizadas durante años como platós de cine. Actualmente la calle Chung King, por ejemplo, se ha convertido en una zona muy concurrida para tomar algo por la noche gracias a su ambiente bohemio y las galerías de arte que se han instalado en antiguos comercios chinos.

Debe saber el viajero que el centro neurálgico de Chinatown es su plaza central y también conviene visitar su museo Chino-americano. Ahora bien, a mediados del siglo pasado, se decidió desplazar a la población asiática hasta State Historic Park, que es el barrio chino actual, aunque resulta mucho menos pintoresco.

El arquitecto español Rafael Moneo es el artífice de la catedral de Nuestra Señora de Los Ángeles, que se acabó de construir en el año 2002. Dicho templo se levantó en el lugar en el que se situaba la catedral de Santa Vibiana, que quedó muy afectada tras el terremoto que tuvo lugar en 1994. Viendo el coste que suponía repararla, se decidió erigir un edificio nuevo que no estuvo exento de polémica debido, en gran parte, a su moderno diseño.

La entrada es gratuita y sus dimensiones sorprenden, ya que la catedral está formada por unos 12 pisos y puede albergar hasta unas 3.000 personas. Además, pasear por los alrededores resulta muy agradable gracias a los jardines repletos de plantas, árboles, flores e infinidad de fuentes.

Una de las paradas más pintorescas si estás en el Downtown de Los Ángeles es la de Angel’s Flight, su curioso funicular. Dicen que es el tren más corto del mundo y el que tiene mayor ratio de pasajeros por kilómetro recorrido. Eso sí, no se encuentra en el lugar en el que estuvo el tranvía original (operativo hasta 1969) en Bunker Hill, si no un poco más al sur.

Por un precio simbólico vas a poder realizar este curioso trayecto, pero debes saber que solo hay taquillas en la parte superior. Vamos, que, si lo coges abajo, te tocará pagar cuando llegues a destino. El funicular une California Plaza con South Hill Street y su Grand Central Market, un enclave perfecto para comer, ya que ofrece una amplia variedad de restaurantes de diversas especialidades. 

Más allá de Hollywood Boulevard, en pleno Downtown nos topamos con la calle más antigua de la ciudad, Olvera Street, un auténtico oasis entre los rascacielos que la rodean. Desde la década de los años 30 es una calle peatonal en la que se han instalado diferentes puestecitos que conforman un verdadero mercadillo mexicano.

A lo largo de la calle (que hasta finales del siglo XIX se llamaba Wine Street) hay placas que ofrecen información sobre el origen de los distintos edificios que, o bien están aún en pie, o ya forman parte de la historia de la ciudad. Entre los más destacados se encuentran Sepulveda House, que ahora es un museo que recrea la vida en la ciudad en la década de 1890 o Pico House, hotel de estilo italiano transformado ahora en una sala de exposiciones.

Seguimos en Olvera Street para detenernos en la casa más antigua de Los Ángeles, Avila Adobe. Construida en 1818 para Don Francisco Ávila, alcalde de la ciudad entre 1810 y 1811 se vio seriamente dañada en el terremoto de 1971. Tras la reconstrucción de algunas de sus estancias, se abrió al público como un pequeño museo gratuito en el que se recrea la forma de vida de California a mediados del siglo XIX.

La visita no te llevará más de media hora, pero resulta muy interesante para descubrir la historia de la ciudad. También es crucial visitar en las inmediaciones la zona conocida como la Plaza, ya que en ella hay una placa conmemorativa donde se cuenta que dichos terrenos fueron cedidos por el Rey Carlos III de España al Pueblo de la Reina de Los Ángeles.

Crypto.com Arena, conocido durante décadas como Staples Center, es otro punto imprescindible si paseas por el Downtown. Este recinto deportivo inaugurado en 1999, ha sido sede de varios equipos deportivos de la talla de los Ángeles Lakers o los Clippers de la NBA o los Kings de la NHL. A lo largo de los años, el Staples Center se ha convertido en un lugar emblemático tanto para eventos deportivos como musicales. También se celebró allí el funeral público por Michael Jackson, cuya emisión superó los 2.500 millones de espectadores y se convirtió en una de las más vistas de la historia de la humanidad a nivel mundial.

En diciembre de 2021, el Staples Center cambió su nombre a Crypto.com Arena debido a un acuerdo de patrocinio con la plataforma de criptomonedas Crypto.com. Y actualmente, además de seguir albergando eventos de primer nivel refleja la convergencia de la tecnología y el entretenimiento en una de las ciudades más influyentes del mundo.

En definitiva, Los Ángeles tiene infinidad de rincones por descubrir y en el Downtown vas a poder encontrar auténticos tesoros. Además, aquí tienes las 8 paradas imprescindibles para que vayas a tiro hecho y tu visita a la meca del cine te deje con el mismo sabor de boca que una buena película.