Los mejores balnearios de Budapest para sumergirse en la historia y mimar el cuerpo
Envueltas en verdaderas joyas arquitectónicas, las maravillosas aguas terapéuticas de estos baños termales proporcionan una de las experiencias indispensables en la capital de Hungría.
Aunque los balnearios de Budapest se han convertido en todo un reclamo turístico, los efectos curativos de sus aguas ya se conocían en la época romana y, desde entonces, forman parte de la cultura húngara. Y es que el país guarda en su subsuelo una amplia red de manantiales naturales. Nada menos que 1.500 fuentes y más de 270 tipos de aguas minerales y medicinales.
Los numerosos complejos termales repartidos por la capital disponen, además, de instalaciones de spa, saunas, piscinas y, en algunos casos, incluso divertidas atracciones acuáticas. Todo un mundo de bienestar donde buscar la calma, renovar energías tras un ajetreado día turístico y ensimismarse con su impresionante arquitectura.
Balneario y piscina de Rudas, donde pasado y presente se funden
Más de 450 años de antigüedad versan sobre los muros de este balneario fundado durante la ocupación otomana. Su pasado puede respirarse en su sala central, que se asemeja a una mezquita, pero lo mejor será relajarse ante las espectaculares panorámicas de Budapest en su piscina de agua caliente, situada en la azotea. Algunos días de la semana, están abiertos solo para hombres y otros para mujeres, mientras que durante los fines de semana el acceso está permitido para ambos sexos.
La elegancia del balneario Gellért
A orillas del río Danubio y a los pies de la colina de Gellért, desde donde fluyen sus aguas, encontramos un estiloso balneario construido en 1918 en estilo Art Nouveau. Posteriormente se edificó el hotel al que pertenece en la actualidad.
Gellért dispone de 10 piscinas cubiertas y dos exteriores para zambullirse en la más profunda calma. Su piscina principal es especialmente bella, rodeada de columnas y bajo los grandes ventanales de su cúpula.
Los baños Széchenyi, un refugio histórico en un parque
Este oasis de aguas terapéuticas es el más grande de Budapest y uno de los más grandes de Europa, con más de 20 piscinas cubiertas y al aire libre. Cargado de romanticismo y ubicado en el Parque de la Ciudad, también conocido como Városliget, se caracteriza porque la composición química de sus aguas es muy similar a la del río Nilo.
Széchenyi se encuentra entre las atracciones principales de Budapest y su imagen más famosa de es la de los bañistas jugando partidas de ajedrez en las piscinas exteriores.
Palatinus Strand Baths, piscinas en la naturaleza
Aquellos que además de un relajante baño busquen algo de diversión, podrán dirigirse a Palatinus, un complejo de piscinas abierto en 1919 en la Isla Margarita. Se trata del primer baño en que los visitantes podían bañarse al aire libre. Actualmente cuenta con spa y piscina de olas, además de otras 14 piscinas.
La adrenalina de Aquaworld Resort Budapest
La conexión con el agua en Hungría es tan importante que colma hasta a los adictos de la adrenalina y del entretenimiento. Al norte de Budapest encontramos Aquaworld, uno de los parques acuáticos cubiertos más grandes de Europa con una piscina de olas, once toboganes gigantes y, por supuesto, varias saunas y baños termales.