Descubre los sabores de Hungría: un viaje gastronómico navideño
Deleitarse con la gastronomía húngara es imprescindible en cualquier viaje al país del Danubio, aunque también la excusa perfecta para visitarlo.
Con ingredientes coloridos y un potente sabor, las recetas tradicionales húngaras acercan la esencia de su historia a través de postres y platos llenos de carácter, donde predominan las sopas, los guisos y las carnes. Una excelente fusión entre la rica herencia gastronómica y la cocina más innovadora con la que vivir un delicioso viaje culinario.
La col rellena y el goulash, un guiso elaborado con carne de vaca y verduras, son dos de los platos estrella, especialmente durante las estaciones de otoño e invierno. Durante estos fríos meses del año también están presentes los potajes de verduras y la sopa de pescado de río halászlé, que combina a la perfección la tradición pesquera del país con su pasión por los sabores profundos. El halászlé es un plato especialmente típico durante fiestas como la de Navidad. Asimismo, en las mesas del país no falta el túrós csusza, una pasta acompañada de tocino frito y requesón.
Como condimento, siempre está presente el paprika, un pimentón dulce que se ha convertido en el souvenir perfecto con el que llevarse el sabor húngaro a casa. Este recuerdo sensorial indispensable en la cocina local, se puede adquirir en el popular Mercado Central de Budapest. El pimiento rojo se seca y se muele para proporcionar sabor y color a las comidas, y su importancia es tal que Hungría es uno de los mayores productores de paprika del mundo.
La influencia de culturas a lo largo de la historia le ha proporcionado a Hungría una amplia repostería entre la que sobresalen el strudel de manzana y el Dobos Torte, una especie de tarta con capas de chocolate y caramelo creado por el chef local József C. Dobos de quien adquiere el nombre. Además de estos pasteles, hay otros postres peculiares que se caracterizan por sus notas saladas: los crepes Gundel de nuez y ron, las bolitas de requesón Túrógombóc y los ñoquis a la Somló, con pasas y ron.
La alta gastronomía de Budapest
Budapest es la ciudad donde probar todas estas recetas tradicionales mezcladas con la cocina contemporánea en alguno de sus diversos restaurantes. Pero también es recomendable aprender sobre ellas por medio de experiencias, recorridos y talleres culinarios.
Siete restaurantes están reconocidos con estrella Michelin en la capital. Todos ellos se ubican en el barrio de Belváros, una lujosa zona de Pest donde abundan los edificios neoclásicos, las tiendas de diseño y los palacios barrocos. Estos establecimientos de vanguardia combinan la cocina húngara y la portuguesa o llevan al culmen los sabores más clásicos.
Entre los prestigiosos restaurantes destacan Salt, con una estrella Michelin y una estrella verde Michelin otorgada por su filosofía de sostenibilidad, y Stand, con dos estrellas Michelin. Los platos de este último reinventan la cocina húngara para llenarla de sabores y texturas, y maridarlos con vinos Tokaji, originarios de la región de Tokaj. Declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO gracias a la supervivencia de tradiciones vitivinícolas en las que se tienen en cuenta las características del suelo utilizado, esta región produce vinos blancos únicos y de ella sale el caldo más noble entre los dulces y protagonista hasta del himno nacional. Visitar una de sus bodegas es toda una experiencia para apreciar el conocido como "vino de los reyes y rey de los vinos".