Belleza insólita: así son los lugares más remotos del mundo

Nuestro planeta está lleno de rincones por descubrir que poco a poco van saliendo a la luz para gusto y disfrute de los viajeros. Hay algunos que ya se han convertido en todo un reclamo turístico, pero existen algunos que no reciben a miles de personas cada año por lo difícil que es acceder a ellos. Hablamos de los lugares más remotos del mundo, destinos que desafían a la geografía y a las grandes distancias y donde contra todo pronóstico viven personas felices y tranquilas. 

La capacidad del ser humano para adaptarse a condiciones adversas es inexplicable y los habitantes de estos destinos nos demuestran que es posible vivir en un aislamiento extremo del cual es muy complicado salir y donde la vida prosigue con normalidad. Algunos de estos enclaves están alejados a miles de kilómetros del país más cercano y otros simplemente no cuentan con carreteras de acceso. Por eso, aquí hablamos de los lugares más remotos del mundo. 

Tristán de Acuña

Esta isla está considerada como uno de los lugares habitados más remotos del mundo debido a su lejanía respecto a otras civilizaciones. La sociedad más cercana se encuentra a casi 2.500 kilómetros, en la isla de Santa Elena. Si sus habitantes desean pisar tierra firme, deberán recorrer 2.805 kilómetros hasta Ciudad del Cabo (África) o 3.350 kilómetros hasta Río de Janeiro (Brasil). 

Sus poco más de 300 habitantes viven felices en una pequeña población de la isla, en Edimburgo de los Siete Mares. Pertenecen al Reino Unido y están ubicados en medio del Océano Atlántico. Lo más curioso es que entre esos 300 habitantes solamente se encuentran 8 apellidos diferentes y solamente dos de sus ciudadanos no han nacido en la isla. 

Rapa Nui

Este destino conocido como La Isla de Pascua es la isla habitada más remota de cualquier continente y guarda un sinfín de misterios y secretos. Rapa Nui emerge en el remoto Pacífico y está ubicada a más de 3.500 kilómetros de Chile, el único lugar con vuelos a esta misteriosa tierra. Su principal atractivo es un monumento famoso en el mundo entero y que ha salido en un sinfín de películas y series, los moais.

Estas inmensas estatuas que se levantan sobre la tierra son todo un misterio ya que nadie sabe cómo llegaron hasta allí ni de dónde han salido. La isla tiene el mismo tamaño que Formentera y llegar hasta allí es sumamente complicado por lo que sólo unos pocos afortunados pueden disfrutar de este destino único en el mundo. 

Alert

Este congelado destino se encuentra a nada más y nada menos que 817 kilómetros del Polo Norte y se ha consagrado como uno de los lugares más remotos y fríos de nuestro planeta. Los únicos seres humanos que pisan este suelo helado son los científicos de la base militar y la estación meteorológica canadiense que allí se encuentran.

La localidad más cercana a Alert se encuentra a más de 2.000 kilómetros y para llegar hasta allí se puede hacer por carretera o en avión ya que ambas posibilidades se encuentran en la localidad y son consideradas la carretera y el aeropuerto más al norte del planeta. Pero la lejanía no es su único problema, las temperaturas de la zona alcanzan los 40 grados bajo cero en invierno y las máximas registradas son de 3 grados en verano. Pero a pesar del frío y su remota ubicación, Alert es el lugar ideal para disfrutar de las increíbles auroras boreales. 

Ittoqqortoormiit

Este destino de nombre impronunciable y que cuesta hasta de leer se encuentra en Groenlandia. Pero su accesibilidad es casi tan complicada como su nombre ya que sólo se puede llegar hasta allí en helicóptero o en un pequeño barco que navega hasta Ittoqqortoormiit durante un par de meses al año. Allí viven poco más de 400 personas y una de sus características más impresionantes es su variedad de fauna.

Osos, zorros, ballenas, morsas y focas viven felices en compañía de esos pocos humanos que habitan en sus tierras. Sus casas coloridas destacan en un paisaje en el que el blanco de la nieve se mezcla con el azul del mar creando un enclave mágico. Este precioso y remoto lugar es una muestra de las bellezas ocultas que esconde nuestro planeta. 

Isla Macquarie

Los destinos más remotos del mundo se reparten por todo el planeta y entre Nueva Zelanda y la Antártida encontramos uno de los más increíbles. Se trata de la Isla Macquarie, un enclave declarado Patrimonio de la Humanidad hace 30 años por su espectacular paisaje y su importancia geográfica.

Esta isla es uno de los lugares más inaccesibles del mundo y sus pocos habitantes son científicos que estudian el terreno y una inmensa colonia de pingüinos que viven felices en un paisaje único. Sus playas de arena negra son el destino perfecto para los valientes que se atrevan a viajar hasta allí para descubrir uno de los lugares más remotos del mundo.