Así es la pizza de jamón de Jabugo que une Italia con Huelva
Hasta el 31 de octubre se puede disfrutar de esta colaboración entre Ditaly y Sánchez Romero Carvajal en varias pizzerías.
De base, una verdadera pizza napolitana. Elaborada con harina del Molino Dallagiovanna (que lleva produciéndola desde 1832), con tomate San Marzano (que nace en las faldas del Vesubio napolitano), con queso mozzarella fior di latte de La Puglia, con una fermentación de 48 horas y horneada a 400 grados en horno de piedra durante 90 segundos.
De guinda de la pizza, un jamón de bellota 100% ibérico de la Denominación de Origen Protegida Jabugo, procedente de cerdos criados en libertad en las dehesas del suroeste peninsular español, alimentados con bellotas y pastos naturales en montanera, y curado en unas bodegas centenarias.
La pizza la aporta Ditaly, firma especializada en cocina italiana y pizza napolitana contemporánea del grupo zaragozano La Mafia se sienta a la mesa; el jamón, Sánchez Romero Carvajal, una empresa con más de 140 años de historia. Esta colaboración entre ambas ha dado lugar a una de las pizzas más interesantes, digestivas y crujientes del momento, a la que han bautizado con el nombre de la Jabugo.
Dónde comerla
La Jabugo forma parte de la Colección Ibérica de Ditaly y estará disponible hasta el 31 de octubre en los 12 restaurantes que la firma tiene distribuidos a lo largo del territorio nacional, en Alcorcón, Alicante, Logroño, Madrid, Málaga, Puerto de Santa María, Salamanca, Sevilla, Valencia, Valladolid y Zaragoza. ¿Su precio? 21,90 euros.
¿El sabor? El jamón de bellota 100 % ibérico Sánchez Romero Carvajal Denominación de Origen Protegida Jabugo y su punto exacto de sal proporcionan a la pizza un aroma intenso a bellota y hierba mojada. El bocado combina lo salado, lo dulce y lo crujiente. Y, como guinda, un toque de aceite de oliva virgen extra y un corte con la tijera dorada de sastre con la que Ditaly sirve todas sus pizzas a medida, sello de la casa.
El lanzamiento de la Jabugo coincide con el comienzo del otoño, todo un homenaje a esta época del año en que las primeras hojas comienzan a caer de las encinas y alcornoques en la dehesa de Huelva y el suelo se llena de bellotas frescas.
Época que coincide también con el comienzo de la montanera, cuando los cerdos pastan y se alimentan libremente por este fértil terreno onubense.
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