6 alojamientos para vivir con sencillez de un entorno lujoso

En un mundo donde el ritmo frenético y el lujo ostentoso a menudo dominan nuestras vidas, encontrar un refugio de paz y autenticidad se ha convertido en un verdadero tesoro. Este verano, relájate en alguno de estos seis encantadores alojamientos que redefinen el significado del lujo. Una cuidada selección de hoteles con encanto, casas rurales y apartamentos únicos, Rusticae ofrece la combinación perfecta de confort, elegancia y conexión con la naturaleza.

Un coqueto hotel de tan sólo cuatro habitaciones que se configura como uno de los alojamientos más exclusivos de Granada. Puede que sea por su inmejorable ubicación en el corazón de la ciudad, o por las imponentes vistas de La Alhambra, pero sin duda también por el trato atento y cuidado de sus anfitriones.

Cada una de las habitaciones de La Casa Juan Ranas en Granada es distinta, y todas ellas tienen su propio encanto. El Bañuelo destaca por su baño turco, Los Arcos se caracteriza por la portada de madera tallada del siglo XVl y terraza, El Cielo tiene dos grandes ventanales abiertos hacia La Alhambra y El Torno destaca por la privacidad que ofrece al tener entrada independiente desde la calle y cuenta además con una terraza privada.

La gastronomía está presente en dos espacios. El Cenador, abierto al público y que propone una cocina donde el producto de primera calidad es el protagonista y La Terraza desde donde las vistas son todo un regalo.

Hotel de Aldaca Rural está situada en el centro urbano de Jerte. Es una antigua casa de 1810 que ha sido restaurada y convertida en un pequeño hotel rural con encanto. Se han respetado sus elementos originales, la piedra y la madera de castaño, manteniendo su autenticidad y sabor de antaño.

El hotel tiene 5 habitaciones para adultos. Cada habitación tiene el nombre de un ave (Cigüeña, Mirlo, Herrerillo, Colirrojo y Verderón) y todas tienen baño privado. Algunas habitaciones tienen balcón o mirador con vistas al Valle del Jerte.

Los huéspedes pueden reservar directamente en el alojamiento las actividades que propone la empresa ‘Garganta de los Infiernos, actividades en la naturaleza’, como rutas de senderismo o 4x4 para descubrir el Velle del Jerte y sus alrededores. 

Cantexos es un hotel situado en Luarca, el bello pueblo asturiano conocido como «la villa blanca de la Costa Verde». Se trata de una casona tradicional asturiana con sus galerías, la piedra, el tejado de madera típico asturiano, sus vigas y los muros interiores de piedra que se han podido recuperar de la construcción original y tras una cuidada rehabilitación en la que se ha introducido un toque fresco y moderno, el resultado ha sido este hotel con encanto en el que vivir una experiencia rural única.

El hotel rural Cantexos tiene 10 habitaciones, algunas de ellas con vistas al mar, jardín privado y bañera con hidromasaje, y todas diferentes.

Sus desayunos caseros, elaborados con productos de su propia huerta y complementados con productos artesanos y de gran tradición asturiana.

Hotel Las Tejuelas es un hotel rural de 13 habitaciones situado en una impresionante finca en la zona de las Villuercas. Está a tan solo 15 km de Guadalupe (reconocido como uno de los pueblos más bonitos de España) y cerca de Mérida, Cáceres y Trujillo.

El cortijo se construyó en 1994 y cuenta con elementos típicos de este tipo de edificación: tres patios y una ermita consagrada que permite celebrar ceremonias religiosas. Hay un salón con chimenea, zona de lectura, restaurante, cafetería y sala de juegos con televisión, futbolín y ping-pong. Su punto fuerte es su gran finca donde disfrutar del aire libre, del agua de sus arroyos y sus pantanos y contemplar animales en libertad (venados, corzos, jabalíes, muflones y distintas aves). En la finca se pueden hacer rutas de senderismo o dar paseos en bici que se pueden alquilar en el propio hotel.

En Cercedilla, dentro del Parque Nacional de la Sierra del Guadarrama y a tan solo 55 km de Madrid, encontramos Hotel Luces del Poniente.

Hotel Luces del Poniente cuenta con 14 habitaciones, sencillas, acogedoras y funcionales, entre las que destacan la suite con jacuzzi y la suite con chimenea. Las zonas comunes del hotel, con amplios ventanales para observar la sierra que rodea al hotel. Cuenta con un precioso jardín y piscina climatizada.

Torre Do Rio es un complejo textil rehabilitado que data del siglo XVIII, bañado por un meandro del río Umia en plena naturaleza gallega.

Nada más entrar ya se percibe un ambiente íntimo y acogedor que envuelve cada una de sus estancias y sus 14 habitaciones. La decoración clásica con mobiliario de madera, textiles naturales y todo tipo de detalles, crean en el interior de este hotel rural una atmósfera realmente cálida.

Los exteriores son un enclave natural único, 10.000 metros cuadrados preparados para disfrutar de cada rincón. La piedra natural, el verde y el agua, dominan el paisaje que puede apreciarse desde el mirador de nuestra casa. La piscina natural con cascada es el punto fuerte del jardín.

La privilegiada zona del Salnés en la que se erige esta torre con tres siglos de historia destaca por su oferta termal y gastronómica. Tanto Caldas a menos de 1 km como Cuntis, a menos de 10, disponen de balnearios de aguas naturales. También es visita obligada acercarse a los puentes romanos de la zona y el espectacular salto del río Umia.