100 años de Eduardo Chillida, el artista que esculpió San Sebastián

Un paseo por el San Sebastián que él mismo creó y disfrutó de la mano de la exposición de la Fundación Eduardo Chillida - Pilar Belzunce.

'Peine del Viento' es la escultura más popular de Chillida y de su ciudad natal
'Peine del Viento' es la escultura más popular de Chillida y de su ciudad natal / Istock / Wirestock

El viento, las oquedades, el hierro y la madera, la fusión con la naturaleza, son imprescindibles en la obra de Chillida. El artista vasco nació hace ya 100 años, un frío 10 de enero de 1924, en San Sebastián, la ciudad que él mismo "esculpió" -junto con Oteiza-. No fue hasta que estudió en París cuando comenzó a idear formas más monumentales. De hecho, antes jugó casi una veintena de partidos como portero en la Real Sociedad, aunque parezca algo contradictorio: "Un periodista estaba escandalizado porque yo hubiera sido portero de fútbol y escultor. No veía relación entre una cosa y otra y yo le convencí de que estaba en un error", declaró.

Eduardo Chillida en su estudio de Ingeborg, 1990

Eduardo Chillida en su estudio de Ingeborg, 1990

/ Jesús Uriarte

Muchas veces, los hechos no tienen que ser lógicos, sino una realidad. Y en su caso lo fue, del mismo modo que su arte era incomprendido por muchos. La Fundación Eduardo Chillida - Pilar Belzunce pretende dar a conocer su obra mediante exposiciones, publicaciones, proyectos audiovisuales, educativos y académicos, bajo el lema 'Eduardo Chillida. Lugar de encuentro'. Porque el objetivo de su obra era precisamente ese, crear lugares, y eso es lo que hizo. Él mismo dijo al principio de su carrera: "Un día soñé una utopía, encontrar un espacio donde pudieran descansar mis esculturas y la gente caminara entre ellas como por un bosque".

Obras que contruyeron el San Sebastián que conocemos

Aquello que en su día fue tan solo un sueño de un crío, hoy es una realidad. Obras como 'El peine del viento' (1976) son un icono de su ciudad natal: un conjunto de tres piezas de acero que parece emerger del mar y, como su nombre indica, peinar el viento. Está ubicada a los pies del monte Igueldo -que alberga además uno de los parques de atracciones más antiguos- y en uno de los extremos de la playa de Ondarreta, dando a la panorámica una apariencia de naturaleza viva.

Eduardo Chillida junto a su 'Peine del Viento'

Eduardo Chillida junto a su 'Peine del Viento'

/ Archivo Eduardo Chillida

En este mismo lugar hay también una pequeña escultura de un metro de altura: 'Besarkada' o 'Abrazo' (1997), homenaje a su amigo Rafael Ruiz Balerdi, pintor donostiarra fallecido en 1992. Otra playa más conocida que la ya mencionada, la de La Concha -la mejor de Europa-, alberga el 'Monumento a Fleming' (1955), un encargo del Ayuntamiento que se ha movido de un lugar a otro hasta acabar en el mítico paseo marítimo. Al otro lado de la bahía se impone el monte Urgull, con la obra 'Torso' (1948), otro homenaje esta vez al militar Pedro Arana Aizpurua.

'Besarkada' de Eduardo Chillida

'Besarkada' de Eduardo Chillida

/ Wikicommons

Son muchas las esculturas que presiden los paseos por San Sebastián -y de otras ciudades como Gijón, Barcelona o Sevilla-. Sin embargo, es en Hernani donde el propio artista decidió abrir un museo, el Chillida Leku, que recoge la gran parte de su obra: 43 piezas de gran formato y 60 más pequeñas. El caserío está en mitad de la naturaleza, por lo que hace de la exposición un museo al aire libre, lo que él soñó. Su obra no pretendía imitar la naturaleza, como muchos pueden llegar a pensar, sino incluirla y abrazarla. Por lo que consideraba el caserío como un lugar para demostrar que había estado allí.

100 años de Eduardo Chillida

Las múltiples exposiciones que se desplegarán por la efeméride de Chillida podrán disfrutarse en diferentes puntos pues, como él decía, "soy como un árbol, con las raíces en un país y las ramas abiertas al mundo". Viajará por Donostia-San Sebastián, Madrid, Valladolid, Palma de Mallorca, Barcelona, Berlín, Frankfurt, París o Washington, sin dejar de añadir elementos hasta 2026 que se prevée que finalice el homenaje. Para su hijo, Luis Chillida, esta "es una ocasión para difundir no solo su obra, sino también sus valores, sensibilidad y aportaciones a la historia del arte contemporáneo".

Eduardo Chillida junto a Lugar de encuentros III

Eduardo Chillida junto a Lugar de encuentros III

/ Luis Perez Minguez

En el ámbito local, el Museo San Telmo, Tabakalera, Centro Internacional de Cultura Contemporánea, el Museo Balenciaga, el Museo de Bellas Artes de Bilbao o Artium acogerán exposiciones individuales y colectivas en los próximos meses. Como, por ejemplo, el habitual Solsticio de verano que en 2024 contará con la colaboración del Ayuntamiento de Hernani. Cada muestra pretende nutrir el conocimiento del arte de Chillida, que abrazó los horizontes de todo el mundo con sus brazos que, para él, eran como ramas de árbol.

Síguele la pista

  • Lo último