Cinco hoteles en Islas de España y Portugal para una relajante escapada a la costa
Recorremos los archipiélagos de España y Portugal en busca de los mejores alojamientos para alargar el verano.
Rodeadas de todo tipo de playas y calas, las islas de España y Portugal se presentan como los destinos predilectos para una escapada, no solo en verano, sino en cualquier estación. Con climas templados a lo largo de todo el año, y cada una con una personalidad muy diferente, permiten disfrutar de infinidad de posibilidades al aire libre.
Para ayudarte a organizar tu próximo viaje, las hemos recorrido todas en busca de sus alojamientos más reseñables. ¿Con cuál te quedas?
Barceló Funchal Oldtown
Entre las alegres casitas del casco histórico de Funchal, este cinco estrellas cuenta con la localización ideal para explorar la esencia de la capital de Madeira y del resto de la isla. Abierto hace tan solo unos meses, ocupando el espacio de una fábrica de bordados del siglo XVII, cuenta con un diseño moderno que combina la arquitectura de Madeira con algunos objetos históricos que se encontraron durante la reforma. Los bordados, una tradición que se está perdiendo y que en su día tuvo un gran peso económico, son precisamente el hilo conductor con el que Barceló Funchal Oldtown rescata la cultura isleña e invita a sentirse inmerso en ella.
La azotea del edificio guarda la mejor sorpresa, una piscina infinita con excelentes vistas al Atlántico a un lado, y, al otro, al centro histórico bajo la naturaleza de las colinas que lo envuelven. Además, el establecimiento ofrece servicios tan exclusivos como realizar el trayecto, desde o hacia el aeropuerto, en un coche de época o en un barco.
Nobu Hotel Ibiza Bay
La perfecta combinación entre vida mediterránea, espíritu bohemio ibicenco y lujo se ve reflejada en la arquitectura y en la decoración de cada una de las acogedoras estancias de este hotel localizado en la playa de Talamanca, muy cerca de la capital de Ibiza.
Sus dos piscinas se funden con la orilla del mar. Para seguir conectado con el Mediterráneo no hay nada como comer pisando la arena en el Beach Club Chambao. Para cenar elegimos el internacionalmente reconocido restaurante Nobu que nos traslada a Japón a través de su delicioso menú degustación Omakase.
Imposible obviar los tratamientos del spa by Six Senses, con productos y tratamientos de la doctora Barbara Sturm con los que terminar sucumbir a la relajación más absoluta. Pero atención, que si viajas con tu mascota, aquí también hay un spa para ella.
En caso de que estés deseando practicar senderismo y explorar la Ibiza más virgen y desconocida, Nobu Ibiza organiza inolvidables experiencias de aventura y bienestar junto a Hike Station.
Hotel Princesa Yaiza Lanzarote
Junto a las arenas blancas de Playa Dorada, al sur de Lanzarote, este resort cinco estrellas casi parece tocar Fuerteventura e Isla de Lobos, a la que hace honor con su restaurante panorámico de cocina tradicional. Princesa Yaiza cuenta, además, con otros ocho restaurantes de gastronomía internacional, entre los que destaca la cocina tepanyaki de Kampai.
De estilo neocolonial canario, y con influencias árabes, el hotel ofrece la mejor combinación de relax y diversión familiar. Muestra de ello son sus seis piscinas y su amplia agenda de actividades para todas las edades.
Octant Furnas
El corazón de la isla de San Miguel, la más grande del archipiélago de las Azores, encontramos Octant Furnas, la apuesta perfecta para disfrutar de la isla. Este alojamiento exclusivo cuenta con ocho habitaciones con terraza y piscina privada climatizada, idónea para disfrutar en cualquier época del año. Una experiencia de bienestar en plena conexión con la naturaleza por medio de arquitectura contemporánea y una decoración vintage con materiales naturales.
Salobre Resort & Serenity
Sobre una de las colinas del sur de Gran Canaria, este resort se mimetiza a la perfección con el espectacular paisaje que lo circunda. Jardines de cactus, plantas por doquier y piscinas secretas proyectan su apacible atmósfera.
La oferta de Salobre Resort & Serenity atrae a los apasionados del golf, con un campo de 18 hoyos; los sibaritas, gracias a sus restaurantes, con Sidecar a la cabeza, y del wellness, que sobresale por su spa con una cabina de oxigenoterapia para recargar los pulmones de aire puro y por su piscina al aire libre colgando de la ladera la montaña.
La última planta del hotel es la que eleva a sus huéspedes al nirvana, con otra piscina climatizada rodeada de camas balinesas desde donde disfrutar de estupendas puestas de sol.