Cómo obtener fotografías originales

Una buena composición no asegura siempre una buena imagen, pero es, desde luego, el primer paso para conseguirla. Pocas veces se logra una fotografía capaz de atraer hacia sí la atención del que la está viendo simplemente apuntando y disparando con la cámara. Muchas de las que ves en las revistas llevan horas de preparación y pulsar el disparador constituye sólo el paso final.

No siempre hay que seguir la
"regla de los tercios". En las
fotos de detalles resulta más
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No siempre hay que seguir la "regla de los tercios". En las fotos de detalles resulta más efectivo centrar al sujeto.

Tomar buenas fotografías tiene más de arte que de técnica. Dominar esta última ayuda, pero para ser capaz de obtener imágenes sobresalientes, esas que no dejan indiferentes a quien las observa, es necesario tener "ojo fotográfico". Hay gente que tiene una predisposición especial para obtener buenas fotos, es como si hubieran nacido con una especie de don. Pero la mayoría no posee esa capacidad de forma innata, así que lo mejor es empezar a practicar la composición cuanto antes para lograr de forma casi automática ver las cosas desde otra perspectiva. Algo básico que todo buen fotógrafo debe conocer es la llamada "regla de los tercios". Ésta permite ir a lo seguro a la hora de lograr una fotografía interesante. Se trata de evitar colocar el sujeto principal en el centro del encuadre, pasando a colocarlo en los bordes de éste. De esa forma se logra dar más interés a la imagen. Y en el caso de que se tengan varios elementos principales, se debe procurar colocar todos ellos fuera del centro, aunque sin ocupar todos los bordes, o el resultado carecerá de interés debido al exceso de puntos fuertes. Otra técnica que funciona muy bien es la consistente en buscar imágenes dentro de otras imágenes. Por ejemplo, si se está fotografi ando una iglesia antigua, ¿por qué conformarse con un plano lejano de la misma? Detalles de ventanas, rosetones, escaleras, puertas y barandillas podrían dar lugar por sí mismos a una fotografía tan interesante o más que la del propio conjunto de la iglesia. Un último consejo para conseguir fotos originales: prueba a colocarte delante de un motivo y fotografi arlo desde distintos ángulos, alturas y distancias, comprobando luego cuáles han funcionado.

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