Si llevas esto en la maleta, puedes tener problemas en la facturación del aeropuerto
Algunos objetos no se pueden transportar en la bodega del avión porque ponen en riesgo la seguridad del pasaje. Descubre cuáles son.
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Llega el momento de hacer las maletas. Una la vamos a facturar y, la otra, irá con nosotros en la cabina del avión. Todos tenemos más o menos claro qué objetos no vamos a poder llevar en nuestro equipaje de mano, sobre todo, en relación a los líquidos, ¿verdad? Ahora bien, hay algunos objetos que no se pueden transportar en un vuelo comercial ni aunque vayan facturados. Aquí tiernes un listado bastante extenso para que no tengas ningún problema cuando llegues a los mostradores de facturación del aeropuerto.
Aena, compañía pública española que gestiona las infraestructuras aeroportuarias de nuestro país, ofrece un documento que se puede consultar en su página web, en el que refleja la normativa europea sobre seguridad aérea y los artículos prohibidos en las aeronaves. Muchos de estos objetos entran dentro de ‘lo previsible’, pero hay algunos otros que nunca te habrías imaginado que no se pueden facturar.
Hay que tener en cuenta que la normativa se suele actualizar con regularidad para adaptarnos a los nuevos tiempos y hábitos de consumo de los pasajeros y, por ello, vas a descubrir objetos que, a pesar de formar parte de nuestro día a día, están prohibidos (o al menos hasta la última normativa publicada en noviembre de 2022).
Si viajas a Estados Unidos, por ejemplo, debes saber que ‘el Departamento de Agricultura prohíbe la entrada de carne fresca, seca, enlatada y de cualquier otro producto derivado (jamón serrano, chorizo, morcilla, lomo, longaniza), así como productos preparados con carne, por lo quedan prohibidas las latas de fabada, de cocido, y similares'.
En cambio, sí hay productos permitidos como pueden ser el chocolate, los turrones, las conservas de pescado, o los quesos duros o semiduros.
¿Qué objetos no puede facturar un pasajero?
Según AENA, no pueden llevarse en el equipaje facturado una serie de artículos entre los que se incluyen explosivos, líquidos inflamables o sustancias tóxicas. Pero es que, además, resulta sorprendente saber que, aunque ahora se hayan normalizado, ¡están prohibidos tanto los cigarrillos electrónicos en las maletas facturadas como cualquier batería de litio que no esté dentro de un aparato electrónico!
La lista completa de los artículos que no se pueden facturar según AENA es la siguiente:
- Explosivos (incluye detonadores, espoletas, granadas, minas y explosivos)
- Gases: propano y butano, etc.
- Líquidos inflamables (se incluyen la gasolina y el metanol)
- Sólidos inflamables y sustancias reactivas (se incluyen el magnesio, los encendedores, los fuegos de artificio y las bengalas)
- Oxidantes y peróxidos orgánicos (se incluyen la lejía y los kits de reparación de carrocerías)
- Sustancias tóxicas o infecciosas (se incluyen los raticidas y la sangre infectada)
- Material radiactivo (se incluyen los isótopos para uso médico o comercial)
- Corrosivos (se incluyen el mercurio y las baterías para automóviles)
- Piezas de un motor que hayan contenido combustible
- Cigarrillos electrónicos
- Baterías de litio en maletas inteligentes y fuera de los dispositivos electrónicos.
Además, conviene consultar con la compañía aérea seleccionada, puesto que se pueden prohibir otros artículos distintos de los enumerados. Eso sí, la tripulación (tanto de tierra como de vuelo) debe hacer un ‘esfuerzo razonable’ para informar a los pasajeros sobre tales artículos antes de que haya finalizado la facturación del equipaje. Además, hay que tener en cuenta que el personal de seguridad está autorizado a denegar el transporte de todo equipaje facturado que contenga un artículo no enumerado que suscite su recelo.
¿Y si tengo que transportar un arma?
Se pueden transportar armas de fuego y otras armas reglamentadas en el equipaje facturado, previa autorización de la Oficina de Intervención de Armas de la Guardia Civil. El viajero debe saber que existe un folleto informativo a disposición del pasajero que describe los trámites que hay que seguir para el transporte de armas en aeronaves comerciales.
En definitiva, viajar en avión es toda una experiencia que ya forma parte del día a día de millones de viajeros que disfrutan de aeropuertos espectaculares y de destinos mágicos. Eso sí, ahora ya sabe el viajero lo que puede no puede guardar en la maleta para evitar problemas en el mostrador de facturación.
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