Conociendo a los Afar, la tribu que vive en el lugar mas caliente del planeta

Uno de los lugares más inhóspitos de la tierra, con temperaturas que alcanzan los 55 grados centígrados, es el hogar donde una tribu de pastores nómadas llevan vagando desde hace cientos de años, logrando adaptarse a los climas extremos para sobrevivir.

El pueblo que vive en el lugar más inhóspito del planeta
El pueblo que vive en el lugar más inhóspito del planeta / Istock / guenterguni

El Cuerno de África ha sido y sigue siendo una de las regiones más peligrosas del planeta, con una política sumida en el más profundo caos, extremismo y un impacto directo y brutal del cambio climático. Por si fuera poco, este lugar alberga el que para muchos expertos es el desierto más inhóspito, donde las temperaturas alcanzan los 55º centígrados, lo que ha llevado a otorgarle el título indiscutible de infierno en la tierra. Se trata del desierto de Danakil, un territorio baldío e imposible de recorrer por completo, por lo que a día de hoy sigue sin saberse cómo de grande es, cómo se originó y, lo más sorprendente, cómo es posible que pueda albergar una comunidad de pastores subsaharianos, que lo recorren desde hace centenios.

Redacción Viajar

Se trata del pueblo afar, una tribu milenaria que abarca la franja del desierto que se extiende por Eritrea, Etiopía y Yibuti, donde salvan distancias de decenas de kilómetros en busca de agua para sus animales. A día de hoy no sabemos gran cosa de ellos, pues pese a pertenecer a la región desde antes de la formación de las naciones en donde se comprende, apenas hay registros de esta sociedad. El interés llegó con el estudio de esta parte del mundo, donde la tierra está cubierta de sal y azufre y el agua burbujea en las charcas a temperaturas cercanas a la ebullición. Como han podido sobrevivir es un milagro para la ciencia, una maravilla que corrobora lo poco que aún conocemos el mundo.

Los pastores del infierno

A los 35º centígrados, las condiciones climáticas se hacen imposibles para la vida humana, según los expertos. Es una premisa que el pueblo afar lleva desafiando durante varios siglos, guiando sus caravanas de camellos a través de las áridas grietas y las balsas de agua y sal. Solo en Etiopía suman un millón y medio de personas que se organizan en pequeñas comunidades.

Las carabanas cruzan decenas de kilómetros de desierto en busca de agua

Las carabanas cruzan decenas de kilómetros de desierto en busca de agua

/ Istock / Frizi

La climatología los obliga a permanecer en movimiento, lo que ha condicionado la mayoría de aspectos que, por ahora, nos han llegado de ellos. Viven en las ari, unas tiendas portátiles con forma ovalada, construidas con maderas y tela, que organizan en campamentos circulares rodeados de espinos, que los protegen de enemigos y depredadores.

Lagos tirabuzones de pelo negro y un cuchillo curvo ceñido a la cintura son dos elementos por los que podrás reconocer a un afar. Se trata de uno de los pueblos más antiguos de África, habitando la región desde hace 2800 años y adaptándose generación tras generación a las hostilidades del medio. Su historia es más larga que la de muchos países, por lo que han evolucionado a merced de los eventos históricos que han tenido lugar en esta parte del mundo.

Se caracterizan por tener el pelo largo y trenzado

Se caracterizan por tener el pelo largo y trenzado

/ Istock / rweisswald

Practican el islam desde las incursiones musulmanas en el siglo X, aunque las uniones monógamas son las más comunes, dando comienzo, en su mayoría, desde una temprana edad. Quizá sean uno de los pueblos más afectados por el colonialismo, que dejó su territorio dividido entre tres estados con peligrosas fronteras, por lo que suelen ser reservados con sus hospitalidad y viven en pequeñas comunidades herméticas. Puede ser esta la razón, entre otras, por la que el matrimonio entre familiares es una práctica común.

Su característica más sorprendente es, sin duda, su capacidad de soportar diariamente un calor extremo. La región del planeta que habita tiene una temperatura media anual de 35º, lo que supera el límite para la habitabilidad de la mayoría de seres humanos.

Temperaturas extremas en un paisaje de película

La palabra aridez toma un nuevo significado en el desierto de Danakil que mantiene el récord de la temperatura máxima promedio para un lugar habitado en la tierra. Una de las explicaciones para esto, es su geografía. Se encuentra encima de una grieta en la corteza terrestre, por lo que es propensa a los movimientos tectónicos y erupciones volcánicas, dando lugar a un paisaje extraterrestre lleno de verdes y amarillos fosforitos, con charcas de agua caliente que tardan en evaporarse debido a su alta concentración en sal

Su actividad volcánica es una de las más altas de todo el mundo, lo que no ha impedido que más de 100 mil personas del pueblo afar se hayan asentado en él de forma permanente, dedicándose al comercio de sal natural. En las inmediaciones del Salón, volcán responsable del récord como lugar más caliente, es donde tiene lugar este paisaje imposible, que supera con creces a cualquier decorado de película.

Su acidez, aridez, temperatura y conflictividad son el principio de una larga lista de razones por las que la revista National Geographic nombró al desierto como el “lugar más cruel de la tierra”, donde, sin embargo, el ser humano ha conseguido adaptarse y crear una comunidad milenaria que perdura hoy en día.

Síguele la pista

  • Lo último