Crucero en Melilla.
Crucero en Melilla. / ©Andreas Grunau

Melilla, tan abierta como secreta

Olvida los tópicos, Melilla es un enclave único nacido de su excepcional ubicación en el estrecho de Gibraltar. Miles de cruceristas eligen esta escala para, desde este bellísimo balcón, asomarse a la historia viva de un Mediterráneo que sigue reivindicando la convivencia en una ciudad medieval, modernista y moderna.

Hay destinos a los que les sobra las etiquetas: fortificada y modernista, urbana y marinera, cristiana, musulmana y judía, tan abierta al mundo como secreta… Desde siempre, Melilla se resiste a los tópicos porque es un destino capaz de construirse en cada mirada, para ofrecer todo aquello que el viajero busca. Atracar en su puerto para disfrutarla es toda una experiencia. 

Hay quien disfruta de su herencia europea paseando por la medieval Melilla la Vieja o se recrea en las fachadas de sus más de 500 edificios modernistas. Hay quien acude en busca del exotismo de sus juderías y sinagogas o de sus bazares hindúes, aquí establecidos desde el siglo XIX. Otros persiguen su aroma árabe, el de la canela de su riquísima pastela o el más exclusivo de su perfumería, directamente llegada desde Emiratos Árabes Unidos. Todo en sus poco más de 12 km2. Según se cuenta, los marcados en 1862 por la trayectoria de una bala del cañón Caminante. Se dice que este fue el singular modo pactado para establecer sus límites fronterizos frente a la vecina Marruecos, aunque Melilla ya era enclave español desde 1497.

Edificio Rojo de Melilla.

Edificio Rojo de Melilla.

/ ©P. M

Como antes lo había sido fenicia, a ellos se debe su primer nombre conocido en el siglo VII a. C.: Russadir. Después llegarían los romanos, vándalos y bizantinos, atraídos por este enclave del estrecho de Gibraltar, en el cabo de Tres Forcas, desde donde vigila su imponente faro levantado en 1921. 

Melilla la Vieja

Fue durante siglos una ciudad fortificada, y hoy la ciudadela es conocida como Melilla la Vieja o El Pueblo. Este recinto, que empezó a construirse en el siglo XV, se distribuye en cuatro áreas, tres sobre un peñón rocoso que se adentra en el Mediterráneo y otro más llano en el continente, todos separados por sendos fosos defensivos. El conjunto es delicioso. Un placer descubrirlo adentrándose por la puerta de la Marina pasando por la plaza de los Aljibes o de Estopiñán, donde se ubican los almacenes de las Peñuelas. Es uno de los muchos testigos del pasado militar en la ciudad, hoy sede de los Museos de Historia, Arqueología y Etnografía de Melilla. 

Melilla la Vieja.

Melilla la Vieja.

/ ©Andreas Grunau

Melilla modernista

Fruto del esplendor de la ciudad a finales del siglo XIX y, sobre todo, en el arranque del XX, la ciudad creció bajo los hermosos preceptos del modernismo. El ensanche constituye la mayor representación de esta arquitectura en España, tan solo después de Barcelona, y la mayor de África. Entre sus iconos, el Palacio de la Asamblea, sede del ayuntamiento, las cúpulas apuntadas del edificio Reconquista, la Casa de los Cristales... Pero quizás, el viajero que ha desembarcado quiera pasear por la playa de Trapana, descubrir la Melilla subterránea (en el laberinto de cuevas y túneles que la socavan), buscando la sombra en el parque Hernández o disfrutando de un buen pescadito y coquinas con una cañita en alguna de las muchas terrazas del centro o del barrio del Real.  

Plaza de Toros de Melilla.

Plaza de Toros de Melilla.

/ D. R.

Bonifica hasta el 75 % de tu viaje a Melilla 

Melilla se abre hoy más que nunca al mundo. Como muestra, el Gobierno de la ciudad autónoma ha aprobado unos bonos descuento para los paquetes turísticos contratados con las empresas colaboradoras que acercan más que nunca este destino a la península. La iniciativa se dirige a no residentes en Melilla para viajes de ida y vuelta con estancias de dos a 15 días. Las condiciones según el modelo de transporte y estancia varían. Si llegas en transporte marítimo, el descuento es del 75 % por persona sobre el importe neto del precio del billete del trayecto de ida y vuelta desde Málaga, Almería o Motril. La bonificación tiene estos topes:

◆ Para butaca: hasta 50 € de descuento.

◆ Camarote individual: hasta 100 €.

◆ Camarote doble: hasta 80 €.

◆ Camarote triple: hasta 60 €.

◆ Camarote cuádruple: hasta 50 €.

Si llegas por transporte aéreo, también hay descuento del 75 %:

◆ Desde Madrid, Barcelona y otros de origen distinto: hasta 400 €. No incluye a los viajeros desde Baleares, Canarias y Ceuta al disfrutar ya del descuento de residentes.

◆ Desde Málaga: hasta 160 €.

◆ Desde Sevilla, Granada y Almería: hasta 120 €.

Plaza de España de Melilla.

Plaza de España de Melilla.

/ ©Andreas Grunau

Estos descuentos son para alojamiento turístico gestionado por agencias de viajes adheridas a la promoción, quien haga la reserva por otra vía no podrá beneficiarse. La bonificación se realiza por habitación y día sobre el importe neto del precio. Puedes conseguir el bono en la página bonosmelilla.es o buscando en esta web las agencias de viajes adheridas al convenio. Una vez aceptada la solicitud, el bono tiene una caducidad de un mes para la compra de los billetes.

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