3 películas perfectas para viajar por el mundo en Navidad

Las festividades navideñas son sinónimo de buscar el calor del hogar. De pasar tiempo en familia, solo o en pareja y de desconexión. También de viajes. Aunque hay quienes prefieren quedarse en casa. Las películas son una manera perfecta de viajar desde el sofá, pero también de encontrar la escapada perfecta. Apunta estos filmes y sus localizaciones.

Berlanga logró crear una de las mejores películas españolas ambientadas en Nochebuena y convertir Manresa en una "ciudad de película". 'Plácido' cuenta la historia de un grupo de burguesas con mucho tiempo libre que organiza una Nochebuena un tanto diferente: bajo el lema "Siente a un pobre a su mesa". Por muchos años que pasen, esta película no pasa de moda y la perfecta conjunción del elenco, protagonizado por José Luis López Vázquez, te hará reír de la misma manera que lo hizo a aquellos que la disfrutaron en el cine de su pueblo cuando se estrenó.

La localización que eligió Berlanga fue una ciudad "gris" y próxima a Barcelona. Buscaba una ciudad donde nunca pasara nada y allí la encontró. Desde los años 60 ha cambiado mucho, y hoy presume de haber sido el escenario de esta joya cinematográfica, conservando incluso el motocarro del protagonista. Todavía se puede recorrer la localidad reconociendo lo que el director plasmó en la gran pantalla, aunque notarás también que han pasado más de 60 años.

Después de brillar en dos películas juntos, Meg Ryan y Tom Hanks hicieron una de sus actuaciones más memorables en esta cinta dirigida por Nora Ephron, famosa por sus comedias románticas. Es sabido por todos que amor y Navidad forman la pareja perfecta, sobre todo si los intereses amorosos son tan entrañables como estos dos personajes: un viudo con un hijo que no supera la muerte de su mujer y una prometida con un hombre al que no termina de coger el punto. Y más aún si la forma de conocerse es tan especial: a través de un programa de radio.

Esta fue de las primeras películas en hacer de Seattle una buena localización fílmica. Sam y Jonah (padre e hijo) viven en una casa flotante en el lago Union donde, si tienes suerte, igual podrías encontrar una similar para pasar unos días. Por su parte, Annie vive en una típica casa de barrio residencial de Baltimore. Pese a que viven en distintas puntas del país y ni siquiera encontrarse parece posible, el pequeño Jonah intentará todo lo posible porque consigan encontrarse con una cita en el Empire State Building en plena Navidad a la que ninguno de los dos parece querer ni poder ir.

Nominada a los Goya y a los Oscar en la categoría de mejor largometraje de animación, este filme español para toda la familia cuenta la historia de un cartero de pueblo que es enviado a un pequeño pueblo más allá del Círculo Polar Ártico cuyos habitantes parecen no tener ningún tipo de emoción, ni siquiera la navideña. La profesora de la escuela le ayudará a revivir la Navidad con la ayuda de Klaus, un misterioso carpintero aislado en una cabaña que construye juguetes que nunca ha utilizado nadie.

Este pequeño lugar se llama Smeerenburg y fue una localidad que estuvo habitada entre 1617 y 1660, hasta que la caza de ballenas dejó de ser una actividad rentable. Hoy está abandonado y pertenece al archipiélago noruego de Svalbard. Aun así, resulta ser uno de los mejores destinos para avistar osos polares, pues hay más que personas habitándolo. Es la zona habitada más cercana al Polo Norte y su nombre significa "costa fría". De esto no hay ninguna duda.

Para cerrar esta pequeña lista no podía faltar una de las sagas más populares de todos los tiempos y uno de los planes fijos de muchos para estas fechas. La historia del pequeño mago con una cicatriz en forma de rayo en la frente, marca de un intento de asesinato por parte del malvado Voldemort, que inicia sus estudios mágicos en Hogwarts ha traspasado todas las fronteras, físicas y generacionales. Muchos de los viajeros que visitan Londres van buscando los escenarios fantásticos en los que se basó J. K. Rowling y no faltan los rincones donde hay algo relacionado con "el niño que sobrevivió".

Muchos rincones londinenses recuerdan a las localizaciones de las películas, como el Mercado de Leadenhall, donde se halla un mercado victoriano en el que se rodaron las escenas que sucedían en el Callejón Diagon o la estación de King's Cross donde, antes de cruzar los tornos, se encuentra la entrada al Andén 9¾. Además, se pueden visitar los estudios de Warner Bros., la casa de reptiles del Zoo de Londres ZSL o Piccadilly Circus, a donde van a parar los tres amigos en la última entrega de la saga tras huir de los mortífagos. No querer salir de casa no es excusa para no viajar, pues todas estas propuestas te harán viajar desde el sofá.