Un viaje cinematográfico por los rincones más emblemáticos de España

España no es solo un destino turístico de primer orden, sino también el epicentro cultural donde la pasión por el cine y la gastronomía se entrelazan en una danza embriagadora. A lo largo y ancho del país, los paisajes y calles vibran bajo las cámaras de cineastas nacionales e internacionales, dando vida a cientos de películas cada año. Vivir en España es, sin duda, sumergirse en un festín para los sentidos, donde cada día se presenta como una escena digna de la gran pantalla. Desde las grandes producciones de “Orgullo y pasión” (Stanley Kramer, 1957) hasta los westerns rodados en Tabernas (Almería), España se configura como un gran plató. Precisamente no todas estas películas de vaqueros fueron filmadas en Andalucía. Uno de los lugares de peregrinaje más divertidos para los amantes del género es el cementerio de Sad Hill ¡en Burgos! A media hora de Lerma y a escasos minutos de Santo Domingo de Silos se rodó “El bueno, el feo y el malo”, (Sergio Leone, 1966) con Clint Eastwood. El lugar es el decorado original que se construyó para la escena final de la película. ¿Te animas a apadrinar una tumba? Hay una asociación que, gracias a los donativos, ha conseguido mantener 5.000 de ellas.

De Burgos nos vamos a Aragón. ¿Has visto la película “Mari(dos)”? En ella Paco León y Ernesto Alterio (Emilio y Toni), luchan por demostrar quién de los dos es el único y auténtico marido de Celia Freijeiro (Laura). El escenario principal de esta ficción es uno de los enclaves más bonitos de España: el Pirineo aragonés: Formigal, Candanchú, y el Balneario de Panticosa, un clásico de los resorts de montaña. Con sus impresionantes montañas y valles, es fácil entender por qué la cineasta Lucía Alemany eligió esta zona para rodar su película.

Y de la comedia a la acción. En Ávila se encuentran algunos de los paisajes más glosados por la historia española. Santa Teresa de Jesús amaba esta tierra casi tanto como lo han hecho docenas de directores. Por ejemplo, John Milius eligió esta ciudad amurallada para rodar en 1982 algunas de las escenas de “Conan el bárbaro” con el grandísimo (en todos los sentidos) Arnold Schwarzenegger, Jorge Sanz y la bella Nadiuska como madre entregada (ojo spoiler: sí, a la que cortan la cabeza en el primer minuto de película). En concreto, esa escena inicial se rodó entre Robledillo y La Hija de Dios (a 30 kms de la capital abulense). Y sí, pocos años después, en 2005, Ridley Scott rodó “El reino de los cielos” junto a Orlando Bloom, Liam Neeson, Eva Green, Edward Norton y Jeremy Irons. La idea es que el lugar se pareciera lo más posible a Jerusalén y Kerak, pero el reino de los cielos es mucho más… sin duda lo advirtieron cuando los actores probaron las yemas de Santa Teresa.

No lejos de Ávila, Valladolid, con su rica historia y arquitectura imponente, ha sido escenario de dos grandes producciones: el musical “Voy a pasármelo bien” (David Serrano, 2022) y la recién estrenada “Memento Mori” con Yon González, Francisco Ortiz y Juan Echanove. Ambas producciones, cada una en un estilo diferente, muestran la versatilidad de la capital castellana como un destino de pantalla sugerente (¡y con unas tapas de primera!).

Ridley Scott, volvió a pensar en Castilla y León, concretamente en Salamanca, para rodar “1492: La conquista del paraíso” (1992). Con un reparto encabezado por Gérard Depardieu, y Sigourney Weaver, las dos catedrales, el convento de San Esteban, la Clerecía, la iglesia de San Benito, la calle Compañía, la plaza Concilio de Trento y los Patios de Escuelas fueron los escenarios de lujo usados por el director norteamericano para recrear la ciudad en el siglo XV.  Pero la versatilidad de Salamanca es tal que en los últimos años, “En el punto de mira” (2008) y “Mientras dure la guerra” (2019), han servido a los directores Pete Travis y Alejandro Amenábar, para mostrar un thriller apasionante en el primer caso y una historia biográfica-dramática en el segundo.

Vamos a hacer un pequeño recorrido por el norte. Primero hacia Galicia, donde la ruta gastronómica resulta tan atractiva para los turistas como la histórica o arquitectónica. Sin embargo, hay una forma diferente de mirarlo en conjunto. Lo ideal, el viaje de los conocidos chefs Gordon Ramsay, Gino D'Acampo y Fred Sirieix que han rodado en Santiago para su conocida serie “Gordon, Gino y Fred”, en la que viajan alrededor del mundo explorando culturas y cocinas. Durante su estancia en Santiago de Compostela, Ramsay, D’Acampo y Sirieix pasearon por la plaza del Obradoiro y algunas de las calles del Casco Viejo, hicieron la compra en el Mercado de Abastos y hasta se apuntaron a una queimada en un pub local.

La flamante ganadora de la Concha de Oro del Festival de San Sebastián 2023, "O Corno" (Jaione Camborda, 2023), nos traslada a la Galicia de los años 70 y al mundo de las mujeres trabajadoras. Esta potente historia se ha rodado en el espectacular entorno de la Ría de Arosa (Pontevedra). Y, sin ir muy lejos, podemos dar un salto a Vigo y Pontevedra y recorrer los lujosos escenarios de “Un asunto privado”, una de las series más divertidas y trepidantes de los últimos años con unos Aura Garrido y Jean Renó magistrales.

A escasos kilómetros de Gijón y Oviedo y sin salirnos del Cantábrico se rodó la serie “Valeria”. Entre las playas de Huelgues, Carranques y La Palmera, todas cercanas entre sí, hasta los pueblos marineros con más sabor de la zona: Perlora y Candás, llenos de festivales culinarios. Para visitar las localizaciones de una de la serie de misterio favorita de los más jóvenes, “Alma”, nos alejaremos de la costa hacia el impresionante valle del Nalón y las impresionantes estribaciones de Brañagallones, en cuyo refugio de montaña transcurre gran parte de la acción.

Damos otro pasito a la derecha para profundizar en el bosque de Irati, en Navarra, donde el misterio brota detrás de cada árbol. Paul Urkijo, el director de cine que fue nominado a un Goya por el mejor guion adaptado de “Un año, una noche”, eligió la impresionante Selva de Irati para ambientar una aventura épica repleta de acción, fantasía y leyendas. La Selva de Irati es uno de los hayedos-abetales más grandes y mejor conservados de Europa. Si te animas a recorrerla de la mano de un antiguo guarda de Irati, además descubrirás aquello que suele ser invisible a los ojos, como huellas y señales de la fauna, usos de las plantas, historias de contrabandistas o la fascinante comunicación entre árboles y hongos. Una actividad para sentir, vivir y disfrutar de la naturaleza en familia.

Cambiamos de tercio, o más bien de género. Para los que no conocen los doramas, hay que decir que se trata de un género de programa muy popular en Corea. Ojo, que es muy, muy adictivo. Una de las más conocidas es “La leyenda del Blue Sea, que versa sobre Joseon, un muchacho que en 1598 encuentra a una sirena. Pues, bien, algunas de sus escenas se rodaron en Sitges y tal es el fenómeno fan que rodea a “La leyenda del Blue Sea“ que, siguen llegando autobuses de coreanos que quieren ver una de las vistas más emblemáticas de la villa: la de la parroquia de Sant Bartomeu y Santa Tecla, donde se rodó un episodio de la serie.

Y de un dorama a un thriller creado por la BBC “The Mallorca files”, protagonizada por el policía alemán Max Winter y la inspectora británica Miranda Blake. Ambos resuelven casos entre los expatriados residentes en la isla y en cada capítulo nos transportan a rincones nuevos además de las playas: bodegas, deporte, galerías de arte, campos de golf, rutas ciclistas… Y es que Baleares recibe cada año más de 16M de turistas, pero la isla tiene un enorme recorrido. Comenzamos este periplo desde la estación de tren de Palma de Mallorca a bordo del Ferrocarril de Sóller, una joya ferroviaria de 1912. Descubrimos su arquitectura modernista y el encanto del puerto de Santa Catalina, con su esencia de pueblo pesquero, seguido de la Serra de Tramuntana y el pueblo de Fornalutx y sus rústicas calles empinadas, seguido de la paradisíaca cala de Sa Calobra, donde la montaña besa el mar. Lugares perfectos para solucionar misterios policiales. Por cierto, “The Mallorca Files” tiene más demanda que el 65,6% de todos los títulos de drama en los Estados Unidos.

Cerramos el bloque con una de las zonas de España que ha albergado más rodajes: Andalucía. Con su luz inconfundible y paisajes que atraviesan la historia, se ha convertido en un vasto plató para el cine internacional. Desde las áridas tierras de Almería que mencionábamos al principio hasta las intrincadas callejuelas de Sevilla, donde "Star Wars: Episodio II - El Ataque de los Clones" encontró su palacio de Naboo, pasando por Cádiz, donde se han replicado las costas exóticas del Caribe en "007: Muere otro día", o Málaga, que ha visto nacer a genios del cine y albergado producciones contemporáneas como "Warrior Nun"… La Alhambra de Granada y la Mezquita de Córdoba, por su parte, también han servido de telón de fondo para innumerables documentales y películas que buscan capturar la esencia de un legado cultural que se extiende más allá de las fronteras de España. Pero Andalucía posee además una versatilidad inigualable. “La sociedad de la nieve”, el último estreno de J.A. Bayona basada en la novela homónima de Pablo Vierci y recientemente escogida candidata española a los Oscars, ha sido rodada en Sierra Nevada. En esta ocasión Bayona y su equipo convirtieron Sierra Nevada en los Andes. Rodar en invierno, en plena temporada de esquí fue todo un reto para el equipo técnico.

Ante tal mosaico de emociones y paisajes, culminar un viaje por España es como cerrar los ojos después de un sueño vívido. Los momentos inmortalizados en el celuloide y ahora en formato digital, son un testimonio del embrujo de una tierra que no solo es cuna de cultura y arte, sino también escenario de narrativas que trascienden idiomas y fronteras. Cada fotograma filmado en esta tierra de contrastes es una pincelada que añade color y textura al lienzo de la historia del cine. Y mientras, Spain Film Commission no solo ha sido testigo, sino también artífice, al tender los puentes entre los creadores y estas localizaciones de ensueño a través de Spain Screen Grand Tour, el proyecto desde donde se dan visibilidad a todos estos destinos de pantalla para inspirar a los viajeros que quieren vivir lo que ven. Porque al final del día, más allá del turismo y del entretenimiento, lo que perdura es la capacidad de una tierra y su gente de contar historias que nos unen, nos emocionan y nos hacen soñar.