10 Patrimonios de la Humanidad tan alucinantes que parecen de mentira
La UNESCO se encarga de nombrar los lugares que son irrepetibles, y los seres humanos nos encargamos de descubrirlos con nuestros propios ojos.
Desde 1972, la UNESCO (Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura) ha nombrado lugares protegidos debido a su "valor excepcional" y que se convierten en patrimonio de la humanidad. Año tras año se van uniendo nuevos enclaves a la lista. Están repartidos por todo el mundo y los hay de todo tipo: enclaves naturales, ciudades y pueblos enteros, iglesias, calles, playas, obras de arte... Hasta el momento hay 1.052 lugares inscritos y los países con mayor número son Italia, China y Alemania. Al otro lado de la balanza está Norteamérica, que pese a ser una región de gran extensión cuenta con tan solo 44 lugares declarados. Algunos de los más impresionantes están incluidos en esta lista.
Bosque lluvioso de Gondwana, Australia
Este comprende varias zonas protegidas, aunque está localizado principalmente por la gran escarpadura de la costa oriental australiana. El entorno volcánico y la inmensa cantidad de especies de animales en peligro de extinción hacen de él un lugar especial que se debe conservar de la mejor manera posible. El nombre que se le otorga proviene de cuando había un único continente, Pangea, cuya zona sur se denominaba Gondwana, hace más de 500 millones de años.
Delta del Okavango, Botsuana
En pleno desierto patrimonial -en África hay 11 países que no cuentan con ningún patrimonio-, aparecen paisajes como este del Delta del Okavango, en Botsuana. Su agua no desemboca en el mar, como suele ser normal, sino en el desierto. En sus crecidas aumenta su extensión de 15.000 a 22.000 kilómetros cuadrados y está siempre repleto de todo tipo de animales salvajes que pueden observarse desde la distancia.
Mausoleo de la dinastía Qin Shi Huang en China
A unos 30 kilómetros al este de la ciudad de Xian se encontró un mausoleo que llevaba enterrado y olvidado durante 2.000 años. Se tardó casi 40 años en construir y en él se cree que estuvieron implicados unos 700.000 obreros. Así, se acabó creando un mausoleo para el emperador Qin Shi Huang de 2,13 kilómetros cuadrados de superficie con un ejército de 8.000 guerreros de terracota, 520 caballos y 130 carros de combate repartidos en tres fosas. Todavía no se ha hallado la tumba del emperador.
Templo de Abu Simbel en Egipto
Los monumentos hallados en Nubia están todos protegidos por la UNESCO, desde Abu Simbel hasta Philae. Es una zona arqueológica excepcional con templos como el de Ramsés II o el santuario de Isis. Se considera un auténtico museo al aire libre del Antiguo Egipto que se construyó hacia el año 1284 a.C. El objetivo era ensalzar la figura del faraón y homenajear a tres dioses del Antiguo Egipto (Amón, Ra y Ptah). Este concretamente permaneció oculto durante siglos, pero finalmente se descubrió en 1813.
Corte de los leones en palacios nazaríes de la Alhambra, España
La Alhambra, el Generalife y el Albaicín de Granada son considerados Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO desde 1984. Muchos siglos antes, a mediados del XIII, se construyó como primer palacio del reino nazarí, convirtiéndose en los siglos siguientes en una ciudadela con una zona militar y una ciudad palatina. La Alhambra -en un primer momento llamada Alhamar- está rodeada de jardines bajo el nombre de Generalife. Estas fortificaciones se extendían por el Albaicín, donde los Ziritas tenían sus castillos y palacios, pero de los que no ya queda nada.
Un lago del Pantanal, Brasil
Pese a que los humedales cubren poco más del 6% de la superficie terrestre, el Pantanal tiene una extensión de casi 20 millones de hectáreas, siendo el más extenso del planeta y cubriendo parte de Brasil, Bolivia y Paraguay. Es por ello que solo este representa el 3% de todos los que hay en el mundo. Aun así, tan solo un 5% está protegido, mientras que el resto es propiedad privada utilizada para el pastoreo de ganado.
Tótems en SGang Gwaay, Canadá
La aldea de Ninstints deja en el bosque una señal de vida del pueblo haida: tótems de carácter funerario y conmemorativo. Estas esculturas esculpidas en los troncos de los árboles son las únicas que se mantienen en Norteamérica. Según los arqueólogos tienen más de 13.000 años de existencia. Para un haida, un tótem es tanto arte como naturaleza, espera que pasado el tiempo vuelva a consumirse y a pertenecer a la tierra. Por eso también es tan complicado de conservar y solo aquí hay 32.
Cataratas del Iguazú, Argentina-Brasil
Todo el Parque está protegido por la UNESCO, aunque en su corazón se halla lo más conocido y quizá impresionante: la catarata del Iguazú. De 80 metros de altura y 2.700 metros de ancho, funciona como frontera entre Argentina y Brasil. La selva que la rodea contiene más de 2.000 especies de plantas vasculares y fauna de la región -monos aulladores, jaguares, caimanes...-; así como otras especies en peligro de extinción como la nutria o el oso hormiguero gigante.
Templo Kakatiya Rudreshwara (Ramappa), India
Este el templo más importante en honor al dios Shiva, construido en un complejo amurallado en la época de la dinastía de los Kakatiyas (siglos XII a XIV). Sus esculturas son de una calidad artística espectacular, representando escenas de danzas regionales y elementos de la cultura de aquel momento. Está en perfecta consonancia con el entorno, puesto que sigue con los parámetros que expresan los textos dhármicos, que defienden que los templos deben formar parte del medio que los rodea.
Canal du midi, Francia
El Canal du Midi o Canal del Mediodía une las dos costas del sur de Francia, algo que ya se quería llevar a cabo desde la época de Nerón pero que solo logró Luis XIV. Lo conforman 214 kilómetros de canal y casi 6,5 millones de metros cúbicos de agua. Se puede recorrer en barco, a pie o en bicicleta, disfrutando de los más de 60.000 árboles que rodean el paseo y que hacen que te olvides de la época en la que vives.