En Toledo encontrarás la mejor croqueta del mundo
El cocinero Javier Ugidos, del restaurante Tobiko, gana la quinta edición del campeonato que se celebra en Madrid Fusión. Para ello ha combinado ingredientes de la gastronomía japonesa y española. Una croqueta cremosa de jamón ibérico rebozada con panko, una especie de pan rallado japonés.
No cabe duda que la croqueta es icono de la gastronomía española por goleada. Pero ahora también podemos decir que, gracias a Javier Ugidos, chef en el restaurante Tobiko (Toledo) tenemos la mejor croqueta del mundo. Este miércoles se hacía con el quinto campeonato internacional que promueve en el congreso culinario la firma de jamón Joselito.
Para conseguir ser la mejor croqueta del mundo, Javier Utilizó panko para rebozar esta rica croqueta. El panko es un ingrediente japonésparecido a nuestro pan rallado. Además, usó materia prima de primera calidad como no podía ser de otra forma. Para la masa bechamel apostó por leche entera y "jamón ibérico con toda su grasilla" afirma Ugidos. Para la fritura usó aceite de oliva hasta su punto justo para conseguir una apariencia doradita sin llegar a tostarla.
Javier Ugidos es un cocinero toledano de 34 años y asegura haber vivido una experiencia gratificante tras presentarse por primera vez al concursoy ganarlo, con la mejor croqueta del mundo. Ni más ni menos. Abrió su local familiar hace cuatro años y lo bautizó con el nombre Tobiko (nombre nipón del pez volador). Dice admirar la gastronomía japonesa. De hecho en su restaurante combinan algunos platos con elementos orientales. Sin embargo, en su cara siempre hay hueco para el plato estrella, las croquetas. por ello se le ocurrió la idea de combinar la croqueta, muy típico en las casas españolas, con un toque japonés, el rebozado con panko.
Junto a Javier Ugidos también competían otros seis finalistas del certamen que vinieron de diferentes regiones de la geografía española. Entre ellos se encuentran Álex Sampedro de Gijón; Víctor Membibre en Madrid; Dani Frías de Santa Faz, Alicante; Carlos Arias de Suances, Cantabria y Ricardo Campos de Nolasco, Zaragoza. Tras una cata a ciegas en la que el jurado tuvo que probar dos croquetas de cada participante, "la decisión fue unánime" según afirmó el exchef de Sant Pau, Miquel Antoja quien se encontraba entre los miembros del jurado.
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