Lugares encantadores de Midi-Pyrénées

Moderna escultura del Ángel de Nazaret, obra del artista local Marc Petit, en una plaza a la espalda de la Catedral de Saint Etienne.

Interior dell Convento de los Jacobinos donde la columna del abside de la iglesia es famosa por sus nervaduras en forma de palmera de 22 ramas.

Niños jugando en las fuentes en el Casco histórico de Toulouse.

El Puente Valentré (patrimonio mundial de la UNESCO) sobre el rio Lot al amanecer.

En el número 5 de la rue de la Bourse, en Toulouse. Thomas Cabrol, prestigioso analista sensorial vinícola en Francia con más de 10 años de dedicación a los caldos, y su esposa Anne Cabrol, que ejerce de sumilier, ambos de 39 años, crearon en 2013 este bar de vinos para sugerir una experiencia sensorial y gustativa en torno a las mejores propuestas del mundo. Ofrecen desde caldos franceses o españoles hasta alguno incluso muy peculiar de Tasmania, y lo acompañan con unas excelentes tapas: culatellos de Brozzi, Domecq y su Pata Negra Lampiño, Bonet en quesos... En un espacio encantador de planta baja y sótano, donde el propio visitante puede servirse sus propios chatos automáticamente con una especie de tarjeta de crédito de vinos que le dispensa el local. Eligieron el nombre del establecimiento, Nº 5 Wine Bar, siguiendo el del famoso perfume Channel nº 5.

En la granja La Ferme des Campagnes elaboran el foie gras desde 1972, criando los patos al aire libre.

Las tiendas de artesanía, donde serás atendido por los propios artesanos son un atractivo más de Cordes. En la imagen el taller de Isabelle Weber.

La sima de Padirac, con rios subterraneos en las que tendrás que adentrarte con barqueros tras haber descendido previamente 75 metros de desnivel vertical.

Todos los años, durante el primer fin de semana de julio, Rocamadour recupera aun más su espíritu medieval en una gran fiesta para pequeños y grandes, mendigos y caballeros y príncipes y princesas, siempre con la atenta mirada de los monjes del célebre santuario. Torneos, banquetes, procesiones nocturnas, actuaciones musicales... y muchas más sorpresas se viven en dos días que concluyen con un espectacular juego de fuegos artificiales, donde hasta parece que toda la fortaleza se incendia.

Calleja con vista al fondo de la iglesia de Saint-Cirq-Lapopie.

Panorámica del rio Garona en Toulouse al anochecer.