Curiosidades de Ámsterdam, la Venecia del Norte
Si hablamos de ciudades con agua, lo primero que nos viene a la cabeza es Venecia, pero fue el escritor y comerciante italiano Lodovicio Guicciardini quien rompió esa norma e hizo de la ciudad de Ámsterdam la icónica Venecia del Norte con sus estudios y relatos. A través de su obra publicada en 1567, Descripción de los Países Bajos, el autor nos acerca a esa primera visión de la metrópoli holandesa como una ciudad protagonizada por el agua.
¿Por qué hay tantos canales en Ámsterdam?
Sus más de 165 canales y 1500 puentes protagonizan el transcurso del río Amstel, convirtiendo a la ciudad en una de las urbes portuarias más importantes del mundo. Son varias las formas a través de las cuales se puede descubrir cada uno de sus rincones emblemáticos, desde en barco o canoa, hasta a pie o tranvía. Pero sin lugar a dudas la bicicleta, es por antonomasia, el medio más típico y singular para adentrarse en la ciudad y formar parte de la cultura holandesa.
El origen del nombre Ámsterdam
Perderse por las callejuelas de la ciudad en bicicleta, dejarse acariciar por el sol que irradia entre sus históricos edificios medievales y vanguardistas o disfrutar de una postal multicolor reflejada sobre sus canales, resulta un plan perfecto para cualquier época del año en la ciudad . Y es que, Ámsterdam, cuyo nombre originario es 'Dam del Amstel', es la cuna de numerosos artistas y escritores, y un lugar de inspiración para todo el que se atreve a vivirla gracias a la particularidad del recorrido de sus aguas por sus calles.
¿Qué tienen los artistas con Ámsterdam?
Pintores como Rembrandt o Van Gogh sembraron sus inicios artísticos en la capital Holandesa, lo podemos comprobar yendo a la propia casa de Rembrandt, convertida en museo tras trabajar y vivir allí diecinueve años.
Van Gogh y otros artistas, los favoritos de la ciudad
En el museo de Van Gogh, ubicado en la explanada de Museumplein, descubriremos los famosos cuadros de girasoles del pintor, sus almendros en flor, sus autorretratos y hasta su particular dormitorio en Arles. Todos ellos junto con pintores como Johannes Vermeer con 'La joven de la perla' o la composición abstracta de los cuadros Piet Mondrian, han sido cómplices de la magia que acoge la ciudad, recorriendo las calles del barrio del Jordaan o del Pijp y dejándose envolver por el verde del pulmón de Vondelpark, al sur del cinturón de canales del centro histórico.