Andorra vive un verano especial

Santuario de MeritxellEl Santuario de Meritxell está constituido por el Santuario Viejo (siglo XII) y el Santuario Nuevo y está declarado Bien de Interés Cultural. El Santuario Viejo se incendió en la década de los ''70 pero aún conserva su estructura y algunas pinturas de su interior. El Santuario Nuevo es uno de los máximos exponentes de la arquitectura de Andorra del siglo XX.

Lagos de TristainaSon tres lo lagos de origen glaciar los que se ubican en el pico de Tristaina: el Estany Primer, el más pequeño de todos; el Estany del Mig, más alargado e indómito que sus hermanos; y el Estany de Més Amunt, en la falta de la montaña. Hasta ellos se accede a través de varias rutas de senderismo de varias dificultades que son perfectas como excursión de un día.

Valle del Madriu-Perafita-Claror Declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco, este valle se caracteriza por sus estructuras medievales en forma de pajar, bordas y orris que servían como refugios de montaña. Y es que la presencia humana en este valle ha sido ininterrumpida.

AuvinyàA solo dos minutos del centro de Sant Julià de Lòria y a quince de La Rabassa y de Naturlandia se encuentra este pequeño pueblo que recrea una población de la Edad Media y que ha conservado su centro intacto gracia a que nunca tuvo acceso público y hasta él sólo se puede llegar a pie. En Auvinyà todas las casas son diferentes y de entre todas las construcciones llama la atención sus dos torres medievales, dos puentes románicos y las puertas de entrada a las casas, provenientes de anticuarios, y cada una con su nombre dedicado a las familias, la naturaleza y los animales. También son llamativos los faroles, balcones y las rejas hechas a mano.

Iglesia de Santa ColomaEsta iglesia situada en Andorra la Vella es una de las más antiguas del Principado. Prerrománica construida entre los siglos VIII y IX se caracteriza por su campanario circular y por los murales románicos que adornan su interior, así como una representación en madera policromada de ‘La Señora de los Remedios'' del siglo XIII.

Creu dels Set Braços Historias y leyendas dominan el imaginario popular de Andorra pero hay una que llama la atención, la de la Cruz de los Siete Brazos. Esta cruz se ubica en un talud en el camino viejo que une Canillo y Meritxell. De ella se cuenta que una cuadrilla de jóvenes quiso burlarse de los miedos de un chico de Prats que temblaba solo de pensar que el diablo podía ir a su encuentro algún día. Después de gastarle una broma de mal gusto, el diablo hizo desaparecer al chico. En el lugar donde ocurrió todo se puso una cruz para que los transeúntes no olvidasen las consecuencias de tal acto. La cruz tenía siete brazos, uno por cada joven que quiso burlarse de su amigo. Uno de ellos desapareció y, extraña coincidencia, la cruz también perdió uno de sus brazos.