Descubre el encantador pueblo de Palencia en el que ahora puedes navegar
Frómista es un bello pueblo de Palencia en el que puedes recorrer una etapa del Camino de Santiago, maravillarte con sus monumentos y recorrer sus canales con un barco.
Frómista es un sorprendente tesoro turístico en la provincia de Palencia, que cautiva con su encanto histórico y su rica herencia cultural. Este pintoresco pueblo, situado en la comarca de Tierra de Campos, es un destino imprescindible para los amantes de la autenticidad de la España rural.
La iglesia de San Martín de Tours se alza como su mayor joya arquitectónica, un testimonio tangible del esplendor románico. Esta perfecta estructura, construida en el siglo XI por Doña Mayor de Castilla, impresiona con su diseño puro, sobrio y elegante. Maravilla al instante por su interior, donde se encuentra una impresionante colección de capiteles, que narran historias bíblicas, pasajes mitológicos y fábulas.
El cruce de la fe y la razón
El Camino de Santiago es una de las rutas de peregrinación más antiguas del mundo, a su paso por Frómista los peregrinos finalizan la sexta etapa de las trece con las que se guía al peregrino hasta la tumba del apóstol Santiago.
El encanto de Frómista se extiende más allá de sus monumentos históricos y sus tradiciones locales, el pueblo también es testigo del paso majestuoso del Canal de Castilla. Esta obra de ingeniería, construida en el siglo XVIII, al igual que la ruta jacobea, no deja en Frómista un pueblo ribereño más. Es aquí donde aparece la cuádruple esclusa del Canal de Castilla, auténtica joya de ingeniería, única en los más de 200 kilómetros de la ruta canalera.
Más grandes rutas
Frómista se convierte en un punto de encuentro aún más fascinante al considerar otras rutas significativas que cruzan esta encantadora localidad. Entre ellas, destaca la Ruta de los Sitios Cluniacenses, que conecta diferentes monumentos y sitios de gran importancia histórica vinculados a la orden cluniacense por todo el continente europeo y que camina hacia el objetivo de ser reconocida como Patrimonio Mundial por la Unesco.
Asimismo, se encuentra estratégicamente ubicada en relación con el Camino Lebaniego Castellano. Esta ruta sagrada lleva a los peregrinos desde la Catedral de Palencia hasta el monasterio de Santo Toribio de Liébana, que alberga la Lignum Crucis, el trozo más grande conocido de la cruz en la que se dice que Jesucristo fue crucificado.
La convergencia de estas diversas rutas subraya la importancia histórica y geográfica de este pueblo. Los visitantes tienen la oportunidad de experimentar una mezcla única de peregrinación espiritual, exploración histórica y aventura al aire libre.
San Telmo y el mar en Frómista
Pedro González Telmo, nacido a finales del siglo XII, es el personaje más ilustre de esta villa, hoy es patrón no solo de su pueblo natal sino de los marineros y hombres de mar. No puede causar más sorpresa cuando la gente conoce el origen terracampino de San Telmo.
Una vez más y como si el caprichoso destino quisiera escribir un nuevo renglón en la historia de Frómista, desde hace unos años en la tierra del patrón del mar el visitante puede navegar. El encargado del paseo entre trigales es el barco Juan de Homar que transita los kilómetros que Camino de Santiago y Canal de Castilla transitan juntos.
Una gran gastronomía
Si hay algo en lo que se apoya la visita del turista es en la gastronomía del lugar en cuestión y el lechazo tiene su lugar reservado como plato estrella. Además, la feria de índole nacional del queso y productos agroalimentarios recuerda todos los veranos la importancia quesera del municipio que llego a contar con varias fábricas de quesos de la que hoy sigue existiendo una.
Por todo ello, Frómista como destino turístico se presenta como un punto de conexión excepcional para aquellos que buscan sumergirse en la rica diversidad de rutas culturales e históricas que atraviesan la región.
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