Úbeda y Baeza, Patrimonio Mundial quince años después

Úbeda y Baeza son el mejor ejemplo del renacimiento humanista español. 

Renacimiento Santa Capilla de la Saviou, Ubeda
Renacimiento Santa Capilla de la Saviou, Ubeda / Borisb17

Ubicadas en el centro geográfico de la provincia de Jaén, rodeadas por un inmenso mar de olivos, las ciudades más monumentales de la Alta Andalucía edificaron su patrimonio y su leyenda a lo largo del siglo XVI. Entrar en ellas es viajar en el tiempo, en la época en que Úbeda era el prototipo de la ciudad donde germinaba la arquitectura privada y el poder civil, y Baeza la sede de un caudaloso patrimonio público, amparado por el clero e iluminado por una de las primeras universidades andaluzas.

Estos días hace quince años que las dos ciudades hermanas fueron declaradas Patrimonio Mundial. Fue el 3 de julio de 2003 cuando el comité de la Unesco aprobó que ambas formaran parte de su club más selecto por los valores excepcionales de su patrimonio renacentista, su vocación humanista y la influencia que su arte tuvo entonces en España e Iberoamérica. La declaración ha hecho justicia con las dos ciudades más monumentales de la provincia de Jaén, cuyos argumentos estéticos fueron determinantes en el siglo XVI e influyeron decisivamente en el patrimonio artístico de la América colonial.

Basilica de Santa Maria de los Reales Alcazares, Ubeda
Basilica de Santa Maria de los Reales Alcazares, Ubeda / Borisb17 / ISTOCK

La historia ha sido generosa con ambas. Sus designios han discurrido por caminos paralelos, hasta el punto de que no pueden ser entendidas de modo separado. Sus cascos históricos se asoman al valle del Guadalquivir y a las azuladas montañas de Sierra Mágina. Baeza ha crecido de un modo más ordenado que Úbeda, pero sus dos conjuntos monumentales han sido preservados con celo, como testimonio de un pasado fascinante donde el poder civil y religioso aunaron esfuerzos por construir dos ciudades influyentes y luminosas. Solo ocho kilómetros las separan. Úbeda es la capital comercial de una ancha comarca dedicada casi por entero al cultivo del olivar. Baeza ha desarrollado en los últimos años un importante tejido de servicios, estrechamente ligado al turismo y a su universidad.

Plaza de Santa María, Baeza
Plaza de Santa María, Baeza / AlbertoLoyo / ISTOCK

Úbeda y Baeza son las dos ciudades más importantes y habitadas de la comarca de La Loma, situada en el centro geográfico de la provincia de Jaén. Sus tierras están moteadas por millones de olivos, muchos de ellos centenarios, cuyo fruto produce uno de los mejores aceites de oliva de España. Las ciudades hermanas están enclavadas en los salientes de un altozano desde donde desciende el valle del río Guadalquivir, cuyas fuentes nacen en la Sierra de Cazorla. A un lado de Úbeda y Baeza se alzan las cumbres de Cazorla, Segura y Las Villas, el parque natural más extenso de España. Mirando al sur se aprecia el corredor natural que desciende hacia las tierras altas de Granada y la gran muralla pétrea de Sierra Mágina, donde se citan las mayores alturas de la provincia de Jaén. A la altura de ambas ciudades, el río Guadalquivir es aún un curso joven, protegido por un paraje natural que forma la sucesión de tres embalses de desigual capacidad. Al norte discurre el cauce fluvial del río Guadalimar y sobre él la comarca de El Condado, último tropiezo que Jaén encuentra antes de vislumbrar las tierras llanas de la provincia de Ciudad Real

Síguele la pista

  • Lo último