Tres hoteles para soñar con el buen tiempo

¿Qué tal unos días en Brasil?: Tivoli Ecoresort Praia do Forte

Un entorno paradisíaco flanqueado de playas doradas y abrazado por 30 000 hectáreas de selva tropical. Tal es el marco de este eco-resort emplazado en las inmediaciones de la siempre mágica Salvador de Bahía. Aquí, en este rincón de exotismo tropical, en esta explosión de ritmo y color brasileño, descansa Tivoli Ecoresort Praia do Forte, el hotel con el que siempre soñaste. Un auténtico templo del bienestar que es, además, respetuoso con el medioambiente y la apabullante biodiversidad de la que hace gala.

En él, además de admirar el paisaje desde sus elegantes instalaciones, se puede disfrutar de las técnicas de relajación tailandesas del Anantara Spa. Nada menos que 4 000 metros cuadrados íntegramente dedicados al wellness, en los que, además de salón de belleza, gimnasio, zona de relajación, piscina de hidromasaje, tres saunas, piscina de agua fría, circuito doble y pediluvio, los huéspedes pueden encontrar completos masajes y tratamientos que combinan antiguas terapias orientales y rituales del país de la samba.

La Grecia más exclusiva: Blue Palace

El placer de las pequeñas cosas encuentra su razón de ser en este sofisticado hotel de Creta, la isla mayor del país heleno. Nada puede ser más placentero que vivir una estancia de lujo en cualquiera de sus habitaciones de colores claros, espaciosas y elegantísimas, la mayoría con una piscina privada cuyas aguas miran, en el horizonte, a un mar rabiosamente turquesa. En el Blue Palace para bajar a la playa, existe un funicular que salva la pendiente y que desemboca en una playa privada donde dejarse cautivar por los ecos mitológicos.

Después están los patios de piedra que se mantienen siempre frescos, los jardines flanqueados por olivos, acacias y palmeras, y los restaurantes varios donde entregarse a una de las gastronomías más saludables del mundo. Por si fuera poco, en este encantador hotel los deseos son, más que nunca, órdenes inmediatas. Porque hasta existe un Departamento para Asuntos Románticos (es su nombre literal) creado para satisfacer los más exquisitos antojos que requieran los enamorados. Una cena íntima en la playa ambientada con velas y flores, un baño a solas en el spa con champán y fresas con chocolate, una visita en helicóptero privado a la isla de Santorini, una travesía en velero…

Sensualidad filipina: El Nido Resort

Cualquiera de los dos complejos de lujo que llevan el nombre de El Nido Resort es la opción perfecta para una desconexión de la rutina en un lugar increíble de creer. Uno está en la isla de Lagen y otro en la isla deMiniloc, dos auténticos edenes emplazados en el extremo norte de Palawan, la isla filipina que ha sido elegida hasta en tres ocasiones como la mejor del mundo. Una isla alargada que presume de idílicas playas rodeadas de arrecifes, montañas tapizadas de jungla, acantilados de piedra caliza y hasta un río subterráneo que permite navegar por sus entrañas.

Más allá de un emplazamiento espectacular, estos hoteles exhiben una exquisita decoración y un servicio impecable que logra cubrir cualquier necesidad del viajero. Para los amantes de la diversión existen numerosos deportes acuáticos: ‘windsurf’, pesca, banca, kayak… y por supuesto, buceo, ya que El Nido es una de las mecas de esta modalidad en el mundo: sus aguas encierran toda la variedad posible de fauna y flora acuática.