Un recorrido por los Patrimonios Mundiales de Castilla y León

En primer lugar debemos dejar claro a que nos referimos cuando hablamos de Patrimonio Mundial. Se trata de bienes materiales e inmateriales muy especiales que cuentan con la protección de la UNESCO, ya sea por su valor como monumentos naturales, conjuntos urbanos o tradiciones ancestrales. Todo ellos despiertan un gran interés científico y cultura.

La muralla de Ávila

Ávila, enclave de culturas, ha sabido perpetuar en el tiempo el valor que le ha dejado el paso de los siglos. Permanentemente protegida por su muralla, aun conserva un importante legado hebreo, cristiano e islámico. Hoy en día, su muralla alberga la catedral más antigua del gótico español, la espiritualidad de Santa Teresa y siglos de respeto por su cultura gastronomía y su memoria. Su muralla, es cuanto menos impactante, ya que abarca una longitud de 2,5 kilómetros, tiene 9 puertas, 87 torreones y más de 2.000 almenas. Su principal tramo visitable, de 1.700 metros, una la casa de las Carnicerías con el puente Adaja.

Tras las huellas del apóstol

La Ruta Jacobea es, por excelencia, el denominado Camino Francés. Una ruta que discurre desde la frontera con Francia hasta Santiago de Compostela, donde se veneran las reliquias del apóstol Santiago. El descubrimiento de la tumba de Santiago el Mayor en Compostela supuso un antes y un después en la historia de la peregrinación en Europa. Desde el siglo XI, el Camino de Santiago es la ruta cristiana más importante, y el paso de los años ha llenado sus rincones de historia, cultura y millones de historias personales.

Esta ruta atraviesa horizontalmente Castilla y León e inunda de monumentos e historia las tierras de Burgos, Palencia y León. En diversos lugares podemos encontrar ejemplos de arte románico así como destacadas catedrales del estilo gótico como la de Burgos o León, y obras del Renacimiento como el Hospital del Rey en Burgos, el Monasterio de San Zoilo de Carrión de los Conde y la Catedral de Astorga.

La Catedral de Burgos

Esta catedral fue levantada sobre el solar de la anterior catedral románica considerada inadecuada para la ciudad de Burgos. Su construcción evidencia dos fases bien diferenciadas: el gótico clásico y el flamígero. Se inicia en 1221 y concluye en 1765. Un amplio periodo histórico que ha dejado su impronta en el edificio.

En 1984, la UNESCO declaró la Catedral de Burgos como Bien Patrimonio de la Humanidad. Desde entonces, ostenta el privilegio de ser la única de España con este título. Los casi 550 años que duró la construcción de esta obra, la convirtieron en un monumento único, reflejo del momento artístico, religioso, social y económico de cada época.

Las Médulas

Se trata de un conglomerado de naturaleza e historia reconocido como Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en 1997. Se constituyen por una red de túneles y galerías creadas por con el fin de explotar el yacimiento que aún hoy sorprende por el sistema de extracción de oro que los romanos desarrollaron en su interior.

Las Médulas son un regalo para los sentidos e impresionan tanto por dentro como por fuera. Ofrecen unas vistas panorámicas desde el Mirador de Orellán y cuentan con galerías visitables que nos adentran en la historia más profunda de la comarca.

Salamanca

Esta ciudad, que se encuentra asentada junto al rio Tormes, se considera una de las joyas arquitectónicas de Castilla y León. Fue declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en 1899. Es una ciudad renacentista por excelencia, brilla por su vinculación con la cultura, su estrecha relación con la Universidad, la abundancia de patrimonio artístico y arquitectónico cuidado con esmero y la impronta dejada por el paso de algunos de los escritores y pensadores más famosos a lo largo de los siglos.

Solo hace falta perderse por sus calles para descubrir el encanto particular que envuelve esta ciudad y si prefieres una vista del entorno desde las alturas solo basta con subir a lo alto de la catedral para contemplar la paz de este lugar. Sin duda tampoco puedes perderte la ciudad a la luz de la luna.

El Acueducto de Segovia

Hablar de esta ciudad es hablar de la construcción que indudablemente se asocia con ella: el Acueducto. Una de las más extraordinarias obras de ingeniería civil romana en España, realizada para conducir hasta la ciudad el agua de la sierra de Guadarrama. Sus 15 kilómetros de longitud son solo parte de un pasado cargado de hechos históricos. Entre los monumentos de Segovia destaca el elegante Alcázar, fortaleza desde la que Isabel la Católica salió para proclamarse reina.

Siega Verde

Situado junto al rio Águeda, entre los términos municipales de Villar de la Yegua, Castillejo de Martín Viejo y Villar de Argañán, se encuentra el yacimiento Siega Verde. La casualidad llevó al arqueólogo Manuel Santonja a conocer la existencia del primer grabado con la ayuda de un pastor de la zona por el año 1988.

Siga Verde está formado por 94 paneles de piedra que discurren por la misma orilla de río Águeda. Dicha ubicación y la erosión los han mantenido ocultos durante miles de años.

Atapuerca

La fortuna quiso que a finales del siglo XIX, a causa de la excavación de una trinchera para el paso de un ferrocarril minero quedara al descubierto el yacimiento de la sierra de Atapuerca. Nadie imaginaba la riqueza que albergaba ese suelo. En 1979 se iniciaron las primeras excavaciones con carácter sistemático en la sierra y en el año 2000 la UNESCO lo declaró Patrimonio Mundial, reafirmando en años posteriores su valor universal.

Este yacimiento arqueológico que se extiende por la sierra de Atapuerca se encuentra en la provincia de Burgos, solo a 15 kilómetros de la capital. A día de hoy se considera uno de los enclaves arqueológicos más importantes del mundo. La importancia de sus hallazgos ha supuesto toda una revolución científica y ha convertido a Burgos en el epicentro de la información sobre el origen y la evolución del ser humano.