La nueva aguja ya corona la catedral de Notre-Dame de París: ¡cuenta atrás para su reapertura!

La cruz de metal sobre la aguja de la catedral de Notre-Dame ya vigila de nuevo el cielo de París a 96 metros de altura. Casi cinco años después del fatal incendio que sufrió la catedral parisina y que derrumbó su tejado y su aguja, la puntiaguda estructura (casi idéntica a la que en 1859 diseñara Viollet-le-Duc durante los trabajos de restauración de Notre-Dame) volvía a coronar la catedral. Y todo, un año antes de su reapertura. Así lo anunciaban y lo mostraban con un vídeo desde Rebâtir Notre-Dame de Paris, la cuenta oficial de la institución pública encargada de la restauración del templo.

Sin embargo, la cruz no es el último elemento que corona la aguja de madera de Notre-Dame. La estructura la remataba una estatua de un gallo a modo de veleta, que milagrosamente se salvó del incendio y fue encontrado entre los escombros por uno de los restauradores. Eso sí, había sufrido alguna abolladura, pero tras ser restaurado, será colocado también en unos días sobre la cruz. Dentro del gallo se encuentran las reliquias de Saint Denis, Santa Genoveva y una de las 70 espinas de la corona de Cristo.

Una vez colocado el gallo en lo alto de la cruz, los carpinteros pasarán el testigo a los techadores ornamentales, que cubrirán toda la aguja con un armazón de plomo para que resista el paso del tiempo. De hecho, la caída de la aguja durante el incendio, además de dar lugar a una de las imágenes más devastadoras del suceso, fue la causante de que se pusiera en peligro toda la estabilidad de los arcos de piedra que se encontraban debajo. Fue el pesado metal fundido de la aguja el que cayó a través de las bóvedas góticas sobre la nave de la iglesia.

De todas las partes destruidas en el incendio, la del crucero fue la primera en completarse. Ha sido restaurada de forma idéntica a como la diseñó Viollet-le-Duc en madera de roble por parte de carpinteros de Normandía.

Para la reconstrucción se han empleado 1.400 robles franceses y se pidió la colaboración de expertos artesanos en carpintería medieval que trabajaban en el proyecto Guédelon, un interesante proyecto de reconstrucción de un castillo medieval que ya os contamos hace algún tiempo en la web de VIAJAR.

Todo apunta a que la promesa que Francia hizo de restaurar la catedral de Notre-Dame en cinco años va a cumplirse. Una promesa que pasó por restaurarla como estaba exactamente antes del incendio, desechando finalmente las ideas que se propusieron para reinventar el monumento. La fecha prevista para la reapertura al público de Notre-Dame es el 8 de diciembre de 2024, aunque para los Juegos Olímpicos de este verano en París se dará la bienvenida a algunas zonas.