Favignana, "la Formentera de Sicilia"
Favignana es la más grande de las islas Egedes en Sicilia, un lugar paradisíaco y de aguas transparentes con calas recónditas en donde podrás alejarte de todo, comer atún hasta hartarte y que podría ser una especie de "Formentera a la siciliana"
Antiguamente, el nombre original de Favignana era "Aegusa", que significa "Mariposa", debido a la forma que tiene la isla. El nombre actual viene del "Favonio", el viento que sopla en la isla.
Desde Favignana podrás además visitar el resto de las islas Egedes como Levanzzo o Marettimo ya que es el único punto de partida hacia ellas. La isla no tiene ciudades especialmente bonitas, monumentos ni lugares históricos; principalmente es conocida por sus impresionantes calas y playas, muy reputadas entre los sicilianos como lugar de veraneo. La isla cuenta apenas con 21 metros cuadrados y en tiempos antiguos fue "la cantera" de Sicilia, que suministraba granito y mármol para muchas de las iglesias, palacios y construcciones.
El este de Favignana es precisamente, la parte más apreciada, por las espectaculares calas y por las canteras de piedra, que ofrecen un paisaje peculiar, similar al de un queso Gruyere agujereado.
Son famosas la Cala Rossa, una bahía de aguas transparentes o la Cala Azzura. Otras calas con mucha fama son Cala Rotonda, Cala Grande y Cala Burrone.
La parte occidental de Favignana ofrece, por su parte las puestas de sol más espectaculares de la isla, especialmente desde enclaves como Punta Lunga, Preveto Faraglioni o el faro de Punta Sottile.
Pero si por otra cosa es famosa esta pequeña isla siciliana es por la denominada Tonnara, la antigua y sangrienta manera de pescar el atún que ya empleaban los árabes y que se práctica aún esporádicamente en la isla. Precisamente Roberto Rosellini filmó la Tonara en su famosa película "Stromboli"
El puerto de Favignana, concentra gran parte de la "vida" y el bullicio de la isla. Tras él se extiende el pueblo con sus pequeñas calles y plazas, sus restaurantes y sus tiendas, muchas de ellas dedicadas al atún.
Para llegar a la isla, hay que ir en ferry desde Trápani en Sicilia, de la que le separan 17 kilómetros. Una vez allí, lo mejor es optar por la bici o moto para así ir recorriendo los senderos y descubriendo las playas. También hay un sistema de buses públicos que conectan el puerto con los distintos puntos de la isla.
La mayoría de los alojamientos están alrededor del puerto aunque también hay bastantes casas de alquiler y pequeños bed & breakfast cerca de las calas o zonas más conocidas.
Así que ya sabes, si estabas buscando alguna isla perdida, ésta puede ser una excelente idea para no hacer absolutamente nada.
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