Cuidado si viajas a esta zona de Irlanda: está considerado uno de los lugares más peligrosos del mundo

Irlanda es un país que tiene mucho que ofrecer. Desde su bulliciosa capital, Dublín, hasta ciudades como Cork o Galway. Un país en el que las prisas se deben dejar olvidadas para poder disfrutar con calma de escenarios tan mágicos como los acantilados de Moher o las Skelling Islands, tan fascinantes como peligrosas.

Viajamos ahora hasta Skelling Michael, isla que ha visto como varios viajeros han perdido la vida debido a las particularidades y peligrosidad de su terreno. Aún así, si se siguen las precauciones adecuadas es un lugar que merece la pena visitar. Los paisajes son sobrecogedores pero, si necesitas más motivos para visitarla, aquí tienes uno de peso (sobre todo si eres fans de ‘Star Wars’: podrás pisar el famoso monasterio Jedi que aparece en la séptima y octava película de la mítica saga.

El lugar más peligroso de Irlanda

Llegar a Skellig Michael no es ni fácil ni cómodo. Vayamos con la verdad por delante, aunque la realidad es que cualquiera esfuerzo habrá merecido la pena cuando, desde lo alto, se contemple la inmensidad del mar y la isla en la que nos encontramos.

Las Skellig son dos islas desiertas (Skellig Michael y Little Skellig) situadas a unos 16 kilómetros de Irlanda, en el océano Atlántico. Para llegar hasta ellas, se debe coger un ferry situado en Portmagee, un pequeño pueblo costero situado en el Ring of Kerry y a unas cinco horas en coche desde la capital.

Skellig Michael: una de las islas más peligrosas del mundo

Las Skellig Islands están declaradas como Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. Tal es su belleza que los directores de las últimas entregas de ‘Star Wars’ las eligieron como escenario para sus largometrajes y, desde entonces, muchos fans de la saga las han apuntado como próximos lugares a visitar.

Conviene saber que para poder gozar de esta maravilla de la naturaleza (que además es un santuario animal) conviene reservar la visita con mucha antelación, ya que el acceso al lugar está muy restringido. Solo 200 privilegiados pueden pisar las Skellig Islands al día, puesto que el aforo está controlado y solo se puede acceder en uno de los 15 ferrys que tienen permiso para llegar hasta allí.

¿Qué ver en Skellig Michael?

Llegar a Skellig Michael puede ser todo un desafío si el mar está bravo. Y es que aquellas personas que se marean con el vaivén de las olas pondrán un pie en tierra con las energías mermadas. Y lo más duro está por llegar. De ahí, la peligrosidad del lugar.

Los aventureros más miedosos empezarán a pensar que no ha sido una buena idea llegar a Skellig Michael, ya que las advertencias de seguridad (con video incluido) son constantes. Además, los carteles de ‘peligro de muerte’ tampoco es que animen demasiado.

¿Es peligrosa Skellig Michael?

Una vez procesada toda la información relativa a la seguridad llega el momento clave, ya que toca ascender hasta la parte alta de la isla por unos 600 escalones de piedra que, en algunos tramos, son bastante estrechos y peligrosos. Si eres un viajero con vértigo, quizá este no sea el mejor escenario para ti, ya que en determinados puntos no hay donde agarrarse. Eso sí, las vistas son indescriptibles.

El gran peligro de esta isla reside en la ascensión hacia las ruinas del monasterio, ya que la humedad es constante y el terreno es bastante resbaladizo. Las botas de montaña resultan fundamentales para evitar cualquier tipo de percance.

En definitiva, las Skellig Islands son un lugar mágico, pero solo recomendable para personas sin vértigo, ya que su terreno las convierte en uno de los lugares más peligrosos del mundo.