El Anillo de Oro y el Collar de Plata, las dos joyas de Rusia que no se tocan... se recorren

La famosa ruta del Anillo de Oro atraviesa las ciudades más antiguas de Rusia Central que forman el patrimonio histórico y cultural del país: y es que su forma es la de un gran anillo que rodea Moscú a través de 8 ciudades.

El Collar de Plata, en cambio, nos lleva hacia el noroeste del país mostrándonos la historia centenaria y la arquitectura nacional colorida. A través de lugares de interés naturales y etnográficos, esta ruta mostrará la originalidad única de un norte Ruso que merece ser visitado.

Hacemos una ruta por estas dos joyas rusas… ¿Nos acompañas?

Anillo de Oro: el encanto de las ciudades antiguas

Muchos de los monumentos del Anillo de Oro están incluidos en la Lista del Patrimonio Mundial de la UNESCO. Una especial mención merece el centro histórico de Yaroslavl — una ciudad de muchos siglos de antigüedad. Una de sus principales atracciones es la llamada "Strelka" que es el punto de confluencia de dos ríos: el Volga y el Kótorosl. Precisamente aquí fue fundado Yaroslavl, lo cual nos recuerda el monumento erigido para el milenio de la ciudad.

Strelka es un lugar precioso para pasear: las vistas panorámicas que se abren desde la alta orilla son realmente impresionantes. Entre los lugares que vale la pena visitar está la Torre del Arsenal — donde se guardaban las armas — que conserva parte de la antigua fortaleza. Merece una especial mención el conjunto de iglesias que se encuentran a lo largo de todo el paseo de la orilla del Volga. Además, se puede visitar el Palacio Metropolitano. Fue construido en el siglo XVII como la residencia ceremonial del obispo metropolitano Jonás Sisóyevich, el arzobispo de Yaroslavl. Hoy en día hay una rica colección de iconos exhibida en el palacio. Después de visitar Strelka, los turistas suelen disfrutar de las vistas hacia la ciudad desde el cenador abierto de seis columnas del Volga: se trata de otro símbolo de Yaroslavl.

La Puerta Dorada de Vladímir fue considerada la entrada triunfal de la ciudad en los siglos XII-XIII y sirvió para recibir a invitados de honor. Sus puertas de roble estaban cubiertas con láminas de cobre dorado y brillaban al sol, de ahí su nombre.

El arco triunfal de piedra blanca que alcanzaba una altura de 14 m le dio al monumento aún más majestuosidad. La puerta era un símbolo de riqueza y poder principesco. Muchos todavía consideran que da buena suerte pasar debajo del arco de la Puerta Dorada y pedir un deseo. Debido a los frecuentes incendios e incursiones enemigas, la apariencia actual de la Puerta Dorada es significativamente diferente de la original. Hoy en día alberga una exposición histórico-militar en la que se exhiben puntas de flechas y lanzas, cotas de malla, armas, estandartes y premios.

Los curiosos museos rusos

El Anillo de Oro es famoso por una gran variedad de museos: aquí se pueden ver colecciones de planchas, samovares, carteles publicitarios, jarrones, jarras, teteras, cucharas y monedas.

En los museos de muchas ciudades se recogen muestras de artes antiguos: tallados de madera y hueso, encaje, miniaturas lacadas, pintura sobre esmalte y mucho más. En el museo "Shúrovo Gorodishe" en Súzdal, uno puede sumergirse en la vida cotidiana y las tradiciones de la Rus del Kiev. Los más valientes pueden poner a prueba sus fuerzas en trabajos agrícolas. Aquí hay una herrería, armería, cabras, cerdos y un huerto: todo aquello que tenían los campesinos del siglo X. ¡Es como si una aldea de antaño cobrase vida!

El pueblo provincial Myshkin atrae a los turistas con sus museos de ratones, vodka y tecnología retro. En el Museo del Válenki (botas rusas acolchadas) se muestra todo el proceso de fabricación de este calzado para invierno hecho de lana de oveja.

A los residentes de las ciudades del Anillo de Oro les gusta organizar festivales folclóricos. Es un deber visitar el festival de Tutáyev dedicado al objeto de orgullo de la provincia de Yaroslavl, las famosas ovejas de Romanóv criadas en esta región. La ciudad es irreconocible durante estos eventos. Se llena de adornos, ruido y puestos de venta de los típicos bollos rusos llamados priániki en forma de cordero y pretzels; samovares calientes, ovejas vestidas con adornos y acordeonistas. A los huéspedes se les recibe con pan y sal. La principal diversión es la competición de esquiladores — trabajadores que se dedican a cortar el pelo de los animales agrícolas.

Naturaleza fascinante

El lago Pleshchéyevo cerca de la ciudad de Pereslavl-Zaleski les hará sintonizar con el romanticismo. En este grandísimo lago de agua dulce aislado desembocan docenas de ríos y arroyos. El lago tiene más de 30 mil años de antigüedad. Es el hábitat de muchas especies de peces, el más famoso de los cuales es el corégono blanco que en su tiempo se servía en la mesa real.

El lago Pleshchéyevo se suele considerar la cuna de la flota rusa. A finales del siglo XVII, conquistó el corazón del joven emperador Pedro I. El gobernante ruso fue fascinado por la belleza y el tamaño del lago, y se le ocurrió la idea de construir aquí una escuadra naval en miniatura, precursora de la marina rusa. Pedro I participó personalmente en la construcción de las miniaturas de yates y barcas. Actualmente, en este lugar se encuentra la casa museo "Barquita de Pedro I", lugar de interés digno de atención de los huéspedes de la ciudad.

Collar de Plata: un increíble viaje por el Norte ruso

El viaje a través del "Collar de plata de Rusia" se puede empezar desde la capital cultural del país, San Petersburgo. Los lugares de interés de esta ciudad son innumerables: es la Fortaleza de Pedro y Pablo, la Catedral de San Isaac, la gran colección del Hermitage, el Almirantazgo, la Iglesia del Salvador sobre la Sangre… entre otros.

Es sorprendente la atmósfera de la capital del Norte que atrae a personas creativas de todo el mundo Por ejemplo, el moderno escritor francés Frederic Begbeder en su libro "Ideal" escribe: "Todos los que vienen a San Petersburgo constantemente repiten la palabra"fantástico".

El siguiente punto de viaje es la región de Leningrado. Es difícil de subestimar la importancia histórica de este territorio. Aquí a los turistas la espera la fortaleza "Oreshek" en Shlisselburg, que se alza majestuosamente en una pequeña isla, la capilla de Nikolas Milagroso en el pueblo de Homorovichi, la villa turística de Verjnie Mandrogi, así como la reserva Gladyshevsky, el monasterio de la Asunción en Tijvin, los lugares de interés del campo Lodeinoy, Vyborg, Strelna, Staraya Ladoga, Priozersk, entre otros inumerables lugares de interés.

El extremo norte

La región de Arkhangelsk es rica en su belleza natural y en los monumentos de arquitectura. Los turistas están interesados en visitar la ciudad de Arkhangelsk y pasear por el terraplén del río Severnaya Dvina, donde a los lugareños les gusta pasar el tiempo, y en junio hay un festival de teatros callejeros. Allí se puede ver la Iglesia de San Nicolás y el Patio de asientos del siglo XVII, un monumento de la arquitectura de piedra rusa, visitar el famoso Museo de Arquitectura de Madera de los Pueblos del Norte en el pueblo de Malye Karely, el Onega y las islas Solovetsky.

La región de Vologda sin exageración puede llamarse la fortaleza de la antigüedad rusa. El recorrido por esta región incluye la visita de Vologda, donde se encuentra la espléndida Catedral de Santa Sofía, el Monasterio Salvador Prilutsky, el antiguo Kremlin, la casita de Pedro I. Cerca, en Veliky Ustyug se encuentra la finca del Abuelo del Frío, un personaje de cuento de hadas que trae regalos a los niños para el Año Nuevo. Allí también verán el templo de Procopio, el Jardín de Invierno, la Iglesia de la Ascensión y las mansiones de los comerciantes. En Kirillov se puede visitar el monasterio Kirillo-Belozersky, incluido el Cuerpo Archimandrita, construido en el estilo de cadena. En Totma, Museo de marineros, el monasterio Spaso-Sumorin. Belozersk será recordado por su Kremlin y Vytegra por el Cabo Infinito.

Más allá del círculo polar ártico

Tras el Círculo Polar Ártico se encuentra la región de Murmansk, cuyo centro administrativo es Murmansk, la ciudad polar más grande del mundo y uno de los principales puertos de Rusia. Aquí a los viajeros los espera una sorprendente naturaleza del norte, reservas y áreas de residencia de los pueblos indígenas listos para contar sus tradiciones. La atención de los turistas merece la Península Rybachi y de Sredni, Lovozero con el pueblo único Saami, el Museo de Mineralogía en Apatity, la reserva Seydyavri en Revda y mucho más.

¿Naturaleza? Por supuesto…

La riqueza de la naturaleza y el turismo durante todo el año es lo que atrae tanto a los rusos como a los extranjeros a Karelia. Por lo tanto, Petrozavodsk, Kizhi, Kem y Marcial están incluidos en la ruta del "Collar de plata de Rusia".

La República de Komi es interesante por sus tradiciones culturales, así que vale la pena venir aquí en busca de una cultura original de los pueblos del norte. Lo mejor es hacerlo en el Etnoparque finno-ugrico en Syktyvkar. Los amantes de las actividades al aire libre podrán admirar la cascada Buredan, recorrer las rutas desde Vorkuta hasta la montaña Borzov, y también a los glaciares de Boch y de Dolgushin. También verán los lugares sagrados de los pastores de renos.

El último punto es el Distrito Autónomo de Nenets. El clima severo, las tradiciones indígenas y los bellos paisajes atraen a muchos viajeros que visitan museos, centros etnoculturales y campamentos de renos de Nelmin-Nos y Naryan-Mar.