Entramos en el sorprendente hotel hecho con un millón de bloques de sal

A orillas del majestuoso Salar de Uyuni, en Bolivia, y bajo un imponente cielo exultante de colores y estrellas, se erige repleto de un significado histórico el Palacio de Sal, también conocido como el Hotel Palacio de Sal.

Este lugar posee una singularidad única, y es que es el primer hotel construido con bloques de sal de todo el planeta y que nos muestra la evidencia de un hecho irrebatible: ningún sueño, por extraordinario que parezca, se diluye antes de hacerse realidad.

Y es que para hacer algo grandioso, se necesitan tan solo dos cosas: tener una idea tan loca que nadie la crea y ser valiente. Y es así como nació este imponente, espectacular y precioso hotel situado en uno de los lugares más bellos del planeta.

Un palacio… de sal

Este palacio fue construido en 1998 por el sueño de Juan Quesada Valda en el mayor desierto del sal del mundo, el de Uyuni, que se extiende a través de 10.500 kilómetros cuadrados.

Y es precisamente gracias al sueño de su fundador y mil experimentos como nació este lugar sui géneris, con una espectacular arquitectura y cuyo principal leitmotiv ha sido el de recrear una realidad alternativa donde todo conecta con la belleza de las cosas y, sobre todo, con la espectacularidad del ambiente que le rodea.

Y es así como nace esta utopía que aún permanece a salvo y que se sostiene a partir del elemento que le da nombre: la sal. Aquí no encontraras cemento, ladrillos, tornillos o piezas de acero… sus paredes, suelos, techos, muebles e incluso esculturas están hechas mediante la sal.

Todo al blanco…

Y te preguntaras… pero ¿Dónde encuentro este hotel? A tan solo 25 kilómetros de la ciudad de Uyuni, en un lugar tan asombroso que se integra perfectamente en un entorno donde el cielo y la tierra se unen. Y conforman una experiencia única en un palacio blanco que cuenta con 46 habitaciones con todo lujo de detalles… salados, por supuesto.

Tal es la espectacularidad del primer hotel de este tipo en todo el planeta que ya impacta a todo el que se atreve a visitarlo desde el primer momento… con un espectacular lobby de sal que da la bienvenida a la estancia de 4.500 metros cuadrados construidos, como puedes imaginar, por un millón de bloques de sal del Salar de Uyuni.

Sobre el Salar de Uyuni

Con una superficie de unos 12.000 kilómetros y situado al suroeste de Bolivia, el salar de Uyuni es el desierto de sal más grande del mundo. Está situado a una altura aproximada de 3.700 metros de altitud y se extiende como una infinita llanura blanca que, en época de lluvias se convierte en un espejo.

Y es por eso que se le llama ‘donde el cielo y la tierra se unen’, porque cuando llueve el suelo refleja al cielo en uno de los espectáculos naturales más hermosos de todo el planeta y en el que podemos sentir, literalmente, lo que es caminar sobre las nubes.

¿Te animas?