Lujo en el corazón de Madrid

Ubicado en pleno centro histórico de Madrid, entre la Carrera de San Jerónimo, la plaza de Canalejas y las calles de Sevilla y Alcalá, en un conjunto que forman siete excepcionales edificios de gran valor histórico y arquitectónico encontramos el magnífico Four Seasons Hotel Madrid.

Símbolo del lujo con mayúsculas, este es el primer hotel en España de la prestigiosa cadena canadiense y se han estrenado por todo lo alto. Doscientas habitaciones incluyendo 39 suites, 22 residencias privadas, Galería Canalejas de tiendas de lujo, un aparcamiento de 400 plazas, 2.500 obras de arte, todas ellas hechas por diferentes artistas españoles, el spa más grande de la ciudad, un restaurante dirigido por el tres estrellas Michelín Dani García...

La cifras del nuevo Four Seasons Hotel Madrid están a la altura de su obra, uno de los más importantes proyectos de la arquitectura española que incluye la restauración de siete edificios históricos que habían sido abandonados durante 10 años.

Remodelación histórica

Con una inversión de 608 millones de euros de los que 7 han sido destinados a la restauración, el proyecto que firma el estudio de arquitectura Estudio Lamela (T4 de Barajas, la ampliación del estadio Santiago Bernabéu y la ciudad deportiva del Real Madrid) ha incluido la restauración de casi 8.000 metros cuadrados de fachada, algunas de cuyas piedras fueron sacadas de una en una para su posterior reconstrucción, y alrededor de 16.700 elementos históricos de los que unos 3.700 han sido reincorporados al edificio.

Sin duda un proyecto de transformación nunca antes visto en el que uno de los desafíos ha sido mantener el necesario equilibrio entre tradición y modernidad, conservando espacios tan singulares como el antiguo patio de operaciones del Banco Español de Crédito, que es ahora el lobby del hotel y que durante un tiempo albergó distintos comercios.

Para lograrlo se catalogaron y restauraron carpintería de madera, cerrajerías metálicas, lámparas, vidrieras de gran tamaño algunas de las cuales han regresado a su ubicación original, elementos decorativos como escayolas, cenefas, herrajes e incluso puertas blindadas de gran tonelaje provenientes del antiguo banco. Todo para que visitantes y autóctonos puedan disfrutar de esta joya que ya ha abierto sus puertas en pleno centro de Madrid.