Diez bosques de Europa totalmente (o casi) vírgenes

Reserva encantadaBrocéliande posee merecida fama de ser un bosque encantado y encantador. Adentrarse en esta masa forestal de la Bretaña francesa significa descubrir el mundo legendario del hada Morgana o el mago Merlin, el Valle sin Retorno, el castaño Árbol de Oro, la fuente de la eterna juventud de Barenton, el hermoso lago Espejo de las Hadas, todos míticos personajes de las leyendas celtas. Robles y hayas son los árboles que dominan la vegetación de este bosque también llamado de Paimpont, localidad más próxima, cercana a la ciudad de Rennes. El roble de Guillotin, que supera los mil años de antigüedad, o el árbol de Hindres, cuyo diámetro abarca los cinco metros, son parte también de los atractivos de un paisaje que, además, posee acebos, abedules y pinos. La reserva forestal puede recorrerse con cuentacuentos. www.france-voyage.comEl bosque negroEs tan frondosa la masa forestal del estado federal alemán de Baden-Wurtemberg que recibe el nombre de Bosque Negro por la oscuridad que producen las sombras de sus abetos y pinos. Pero este efecto solo se aprecia a distancia, porque el interior de los 170 kilómetros de extensión, de norte a sur, y 70, de este a oeste, alberga espacios naturales bien soleados que constituyen los más bellos de Alemania. En coche, a pie o en bicicleta no hay que dejar de visitar las cataratas Triberg, que se precipitan desde los 163 metros de altura sobre siete niveles de terreno. El lago Titisse, situado a los pies de la montaña más alta, Feldberg, representa un magnífico destino para disfrutar de su balneario y practicar el senderismo. www.tourismus-bw.deEn la foto: Bosque Negro.

Pinos gigantesMuy cerca de la capital checa, en las proximidades de la ciudad balneario de Karlovy Vary, se extienden 610 kilómetros cuadrados de pura naturaleza. Pertenecen al bosque de Slavkov, con 26 zonas protegidas cubiertas en su mayoría por adultas píceas que se yerguen por encima de los veinte metros de altura sobre un territorio de rocosa serpentina, joya del bosque que le hace ser el mayor del occidente europeo. La combinación del pino negro y el abedul blanco sobre extensas turberas le otorga una extraordinaria belleza por donde campan las damas voladoras del parque: las aves rapaces. De vez en cuando, las marmotas se dejan también ver en alguna de las numerosas rutas señalizadas que serpentean por los montes más altos, Lesny y Lisyna, siguiendo las cuencas de los ríos Sokolov y Most.www.cestovani.kr-karlovarsky.czCaminos sobre los árbolesCaminar por los mismos senderos que Ana Bolena o Enrique VIII es uno de los atractivos del bosque Salcey, pero lo que le convierte en un destino singular es la pasarela de madera que lo recorre a la altura de la copa de los árboles, robles centenarios con edades que superan los quinientos años. Para acceder a la senda elevada hay que subir por unas escaleras que llevan a una plataforma que permite una privilegiada panorámica de uno de los bosques ingleses más ancestrales. Hay que localizarlo en el condado de Northamptonshire, en Inglaterra, próximo a Northampton, que en la Edad Media formaba parte de un coto privado de caza y hoy es una estupenda propuesta de ecoturismo con actividades educativas para niños. www.visitengland.orgEn la foto: Salcey.

Los árbole de los ApeninosAbruzzo es la región italiana que se encuentra entre los Apeninos y el Adriático. Sus tres parques nacionales y sus numerosas reservas naturales le convierten en la zona más verde de Europa. Dentro del macizo Majella se ubica el bosque de San Antonio, una obra maestra de la naturaleza de fácil acceso. Es una densa extensión forestal que conserva masas de viejas hayas y monumentales arces, que cohabitan con perales silvestres, cerezos, tejos, pinos y abetos sobre un sotobosque que produce una especie autóctona de orquídea. Aquí, el azor es el rey del cielo, pero también lo comparte con gavilanes y cernícalos. La nieve del invierno sobre las llanuras permite practicar el esquí de fondo. En verano, los más atrevidos tienen rutas hacia los montes Pizzalto o Rotella. El hospedaje está garantizado con los establecimientos de ecoturismo. www.abruzzotoeurope.comEntre ososAl despuntar la primavera, los machos de oso pardo de Fulufjället, al oeste de la zona central de Suecia, salen de su madriguera invernal en busca de los cien kilos diarios de bayas salvajes o a cazar los jabalíes que necesitan comer hasta que llegue el nuevo invierno. El bosque ocupa unas 35.000 hectáreas de píceas, o falsos abetos, de las que unas 10.000 pertenecen a uno de los escasos territorios vírgenes de Europa. Aunque es una reserva protegida, se admite el turismo sostenible en una pequeña porción del parque, donde incluso existen cabañas para pernoctar. Unas sendas convenientemente balizadas son las únicas zonas en las que le está permitido al hombre romper el silencio de un ecosistema en el que también habita el alce y su depredador, el lobo. www.visitsweden.comEn la foto: Fulufjället.

Paisaje borealEl mejor prototipo de bosque boreal de Finlandia se ubica en la reserva natural Oulanka, en Kuusamo, tierra de los samis. El Camino del Oso se adentra en el sotobosque que explosiona en primavera. Arándanos rojos y negros, líquenes y brezos acompañan a la dama de las flores, el calypso, orquídea emblemática de este territorio protegido. Sobre esta alfombra verde se asoma una espesa masa de pinos rojos mezclados con abedules blancos, muy cerca ya del Círculo Polar Ártico, fronterizo con Rusia. Por esta región deambulan zorros, comadrejas, armiños, y su cielo es el corredor aéreo de aves de presa. Este paisaje se repite a lo largo de los caminos de la cuenca del río Oulanka, escultor de pasillos abismales. www.visitafinlandia.comLa jungla de TransilvaniaEn el corazón de los Cárpatos rumanos se extiende uno de los bosques prístinos más bellos de Europa. Entre Transilvania y Oltenia, sobre las laderas de la cordillera Hunedora, se localizan varios niveles de arboleda. La cucaracha conocida como el sastre del haya y el búho grande son representativos de la zona de hayedos, mientras que en los abetos acampan carpinteros, urogallos y águilas. En la parte alta conviven los enebros con los venerables ancianos de los bosques, el alerce. Líquenes, edelweiss y orquídeas son las especies que cubren las zonas alpinas, hábitat del águila plateada. El tren y el coche son los mejores medios para acercarse hasta este paraíso del ecoturismo, que cuenta con refugios para comer y pernoctar. www.retezat.ro