Esto es lo que debes visitar en Gran Canaria si la visitas en primavera
Esta hermosa isla llena de contrastes sorprende por su espectacular mosaico de climas y paisajes entre dunas y playas.
Con el fin del invierno, una escapada a Gran Canaria puede convertirse el perfecto pistoletazo de salida a las temperaturas. En concreto, esta isla canaria es uno de los idílicos destinos del archipiélago, dada su naturaleza exuberante, su desierto de dunas, sus pintorescos pueblos y, evidentemente, sus playas infinitas.
Barrio histórico
En la capital, Las Palmas de Gran Canaria, te deslumbrará el aristocrático barrio de la Vegueta, cuyas calles empedradas, catedral y edificios de estilo colonial respiran historia por los cuatro costados. En concreto, la Catedral fue construida con piedra volcánica, al igual que muchos otros edificios de la isla. Un negro que contrasta con los tonos de las fachadas de las casas coloniales. Tras recorrer el casco histórico, nada como hacer parada y fonda en Deliciosa Marta, el restaurante de moda en la capital.
Tampoco podemos perdernos el barrio comercial y marinero de Triana, llamado así por las similitudes que, en sus orígenes, tenía con el barrio homónimo de Sevilla. Tras su fundación en el S. XV como expansión de Vegueta, fueron muchos los andaluces que se establecieron aquí venidos de sus tierras con los conquistadores. La Calle Mayor de Triana, vía de gran belleza arquitectónica y larga tradición comercial, cuenta con espléndidos edificios como el Teatro Pérez Galdós, el Gabinete Literario, o la Iglesia de San Francisco. El barrio tiene como puntos de encuentro de sus habitantes la Plaza de Hurtado de Mendoza y la Plaza de Cairasco, lugares perfectos para descansar y disfrutar en alguna de sus amplias terrazas.
La ermita de San Telmo (S. XVII) es un ejemplo de arquitectura mudéjar, con portada gótico renacentista y uno de los retablos más bellos de Gran Canaria. Otra de las maravillas que encontrarás en el parque del mismo nombre que rodea a la ermita es su singular quiosco modernista (1924), una de las joyas que este estilo, aún conserva su decoración original.
Desierto de dunas
Al sur de la isla se encuentra uno de los parajes más hermosos de la isla: las dunas de Maspalomas, un inmenso arenal con precioso puntos como la playa del Inglés o el faro que ilumina las noches estrelladas. Lo mejor es vivir un atardecer en este rincón canario, viendo como la luz se cuela entre la arena dorada hasta evadirse en el intenso azul del mar. Luego, podemos cenar en el Restaurante Rincón Canario, con una excelente carta que podemos degustar frente al mar.
En Maspalomas son varias las empresas que ofrecen también viajes en camello para recorrer las dunas como hacían antaño los locales y comerciantes extranjeros.
Otro paraje natural sumamente especial es el Roque Nublo, que, de hecho, es el símbolo de Gran Canaria. Se trata de un roque volcánico al que podremos acercarnos en coche para, tras una agradable caminata con vistas panorámicas, llegar hasta la base de la espléndida roca. En estos terrenos hay también otras excursiones que harán las delicias de los amantes del senderismo.
Playas para todos los gustos
Al sur de Gran Canaria se encuentran las más amplias playas de la isla, de aguas tranquilas y en su mayoría de arena rubia. Al estar situadas en los principales núcleos turísticos, cuentan con todos los servicios, además de ser las de más fácil acceso.
Las playas del norte son bien distintas: pequeñas calas de arena oscura o de roca volcánica, con mayor oleaje y algunas con accesos más complicados, aunque también existe la opción de refrescarnos en acogedoras piscinas naturales. Eso sí, son playas bellas y salvajes, capaces de hacernos conectar con la naturaleza en su estado más puro.
Coronando los grandiosos acantilados del noroeste de la isla, un paisaje conocido como "cola de dragón", se encuentra el Parque Natural de Tamadaba, uno de los bosques primigenios de pino canario mejor conservados de las Islas Canarias junto al de Inagua, el refugio del pinzón azul, una pequeña ave exclusiva de esta isla.
Pueblos entrañables
Gran Canaria nos permite perdernos entre paisajes que parecen de otro planeta y pueblos con historia y esa alegría canaria que desprenden sus gentes. Es el caso de Tejeda, junto al Roque Nublo, o de Teror, con amplios miradores de madera desde los que podremos admirar la belleza volcánica.
Mogán está considerado como la pequeña Venecia de Canarias, y en Arucas podrás degustar su famoso ron con miel acompañado por las típicas papas arrugadas con mojo picón.
Sorprendente verde
Aunque pueda parecer imposible pensar en verde en esta isla, todo lo contrario. Así de sorprendente es Gran Canaria. En La Reserva Natural Especial de Los Tilos de Moya podrás conectar con la naturaleza mientras recorres los últimos reductos de laurisilva de la isla, un bosque de árboles de la Era Terciaria con senderos que parecen mágicos y vegetación exuberante. Además, es Zona Natural Protegida. En el Centro de Interpretación que se encuentra en la entrada del Barranco de los Tilos te contarán todo sobre sus especies arbóreas y fauna y te indicarán la mejor manera recorrer los senderos que recorren los dos kilómetros que abarca la reserva.
Descubre Gran Canaria de la mano de la revista VIAJAR, un pequeño continente al que podrás llegar gracias a Club VIAJAR. Descubrirás todas las maravillas que oculta la isla canaria, desde las preciosas playas rodeadas de campos de dunas hasta conquistar sus más altas montañas. Un destino sin parangón que no te puedes perder.