Perú: una experiencia para chuparse los dedos

¿Imaginas un destino que lo tenga todo? En Viajar queremos ponértelo (muy) fácil y por eso hemos decidido que necesitas conocer Perú. El país que destaca por la diversidad, autenticidad, naturaleza y gastronomía tiene mucho que ofrecer al visitante. 

Entre nuestros puntos imprescindibles para alucinar con las maravillas del país andino destaca, cómo no, Santuario Histórico de Machupicchu, pero también los Sarcófagos de Karajía, la Catarata de Gocta (conocida localmente como La Chorrera), la ciudad de Arequipa (la segunda más poblada del país), la Reserva Nacional Pacaya Samiria, el macizo nevado del Huascarán y, por supuesto, Lima.

Lima, capital gastronómica de Latinoamérica

Lima es la única capital sudamericana al borde del Océano Pacífico. Una ciudad que ejemplifica a la perfección cómo su pasado logra la armonía perfecta con la tradición y arquitectura contemporánea. Recorrer sus calles es admirar sus iglesias, sitios arqueológicos y casonas con balcones que conviven con modernos edificios. En 1991, su Centro Histórico fue declarado Patrimonio Cultural de la Humanidad. Además otro gran motivo para visitar la ciudad es su gastronomía. Un viaje para los sentidos en el que queremos detenernos en esta ocasión.

Y es que Perú ha sido elegido el Mejor Destino Culinario en 10 ocasiones por los Travel World Awards y su capital está a la cabeza de este boom. Lima es la abanderada mundial del arte de la buena mesa. Una ciudad que asistió a su despegue definitivo de la mano de la gastronomía, con la que protagonizó una revolución sin igual.

Hoy muchos de sus restaurantes no sólo están adscritos a la lista de los 50 Best, sino que además han conquistado los paladares del planeta y tienen un papel crucial como pilar de identidad del país.

Fue hace unas tres décadas cuando el mundo descubrió las virtudes de una cocina que era el resultado de una amplia despensa y de siglos de mestizaje. Los productos autóctonos se unieron a los ingredientes llegados de Europa, Asia y África dando lugar a lo que hoy conocemos como Cocina Fusión. 

Daniela Soto-Innes, chef y socia de Cosme en Nueva York e invitada a formar parte del 50 Best Explores, lo define así: “Si tienen los mejores restaurantes es por una razón: el producto que tienen es único. Llegan a ir al medio de la selva a buscar un insumo específico. ¡Es una locura genial!”.

Experiencias gourmet en la ciudad 

Los cebiches, cada vez más sofisticados; los tiraditos, la papa a la huancaína, el lomo saltado, los anticuchos o el chifa, que aúna la tradición china con la peruana, o la Nikkei, que es el resultado de fusionar producto japonés y peruano, son motivos suficientes para elaborar todo un mapa a base de restaurantes top en la ciudad. 

¿Nuestros favoritos? El Mercado, destaca por su gran cocina en un ambiente informal de una terraza siempre llena. Astrid y Gastón, uno de los referentes gastronómicos de la capital peruana. Rafael, La Huaca Pucllana (pionero de la nueva cocina peruana), el Cordano, bar tradicional con historia o la Antigua Taberna Queirolo de Pueblo Libre, especializada en tradicionales platos criollos. También La Picantería, Isolina o alguno de los nuevos huariques, como Cumpa.

Además de la ruta por los mejores restaurantes de la ciudad, en Lima se puede elevar la experiencia gastronómica reservando un tour por sus mercados, o clases de cocina de la mano de alguno de sus reputados chefs. Sin duda un planazo inolvidable.

La Libertad, Lambayeque y Loreto, la fiesta ‘del buen comer’ sigue por aquí

Otro hot spot de la cocina peruana es La Libertad. Ubicada en la costa norte del Perú, siempre tiene sus puertas abiertas para recibir a aquel turista que tenga el anhelo de conocer sus tierras, plagadas de tradición y ecosistemas únicos.

En esta zona destacan las diferentes variedades de platos hechos, en su mayoría, a base de pescados y mariscos. Sus cebiches, shambar, una suculenta sopa a base de menestras que también incluye jamón ahumado, el pepián de pava o los frejoles y pescado a la trujillana bien merecen una buena sobremesa. 

Ubicado en la costa norte del Perú, Lambayeque es una de las regiones con mayor crecimiento turístico del país. La facilidad para llegar a esta zona (1 hora y 15 minutos por vía aérea desde Lima) y su clima soleado la convierten en una de las excursiones favoritas para nacionales y extranjeros. En el plano gastronómico, su cocina es aclamada por todo aquel que la prueba, ya que guarda secretos milenarios que le otorgan una sazón peculiar. Arroz con pato, un seco de cabrito, un espesado lambayecano o un chinguirito, que coquetea con la deliciosa comida marina, son los platos más aplaudidos de la mesa en esta región.

Tanto La Libertad como Lambayeque forman la Ruta Moche, una región muy rica en historia, naturaleza y arqueología en la que es imprescindible visitar el complejo ceremonial de Huacas del Sol y la Luna, Chan Chan, la mayor ciudad de barro jamás construida en América, las pirámides de Túcume o el yacimiento Huaca Rajada.

La región más grande del Perú, Loreto, está ubicada en el oriente de la Amazonía peruana que ocupa el 60% de la superficie del país. Quizá por su extensión, la gastronomía de Loreto merece un apartado propio por su variedad de sabores e ingredientes. Entre los platos típicos de la región destacan la ensalada de chonta o palmito, el cebiche de dorado, el inchicapi, sopa de gallina con maní, culantro y yuca, el timbuche a base de caldo concentrado de pescado y culantro o la cecina seca y salada