Pequeña Florencia

Visitar Florencia puede ser como un viaje en el tiempo que te llevará directamente al siglo XV, en pleno Renacimiento. La ciudad se expande en círculos concéntricos a partir de un eje visible desde casi cualquier punto: la magnífica cúpula de Brunelleschi (1) , que corona la catedral que da nombre a su plaza más famosa, el Duomo. Junto a ella se levantan majestuosos el Campanile, que hace las veces de faro urbano, y el Baptisterio. Su interior esconde un curioso fresco en el que Dante presenta a Florencia La Divina Comedia.

La vía Roma te llevará hasta uno de los lugares más fotografiados de Italia, el Ponte Vecchio más fotografiados de Italia, el Ponte Vecchio (2) , que une las dos orillas separadas por el Arno. Cruzarlo es un requisito indispensable. El paseo hasta el río te llevará por monumentos y museos ilustres. En primer término, encontrarás la piazza della Repubblica (3) , el antiguo foro romano. Siguiendo ruta, gira hacia vía dei Calzaiuoli, una avenida comercial que desemboca en la piazza della Signoria (4) , epicentro artístico y enclave histórico del poder político de la ciudad. No en vano está presidida por la estatua ecuestre de Cosme I de Medici...

Para tomar algo, elige el restaurante Rivoire, en uno de los laterales de la plaza, con unas magníficas vistas. Si te gusta el chocolate, pídelo de postre; es el mejor de la urbe. Tras reponer fuerzas te espera la Loggia, que, con la fuente de Neptuno, la copia del David de Miguel Ángel y el Palazzo Vecchio (5) es la mejor antesala de lo que está por llegar. Ni más ni menos que la Galleria degli Uffizi (6) , el museo de arte renacentista con joyas como El nacimiento de Venus o La alegoría de la Primavera. Si puedes destinar un día entero a recorrer este recinto y la zona colindante, no te arrepentirás.

Después de este baño de arte, hay que poner rumbo a la zona más bulliciosa, la ribera del río, con sus miles de tiendas y puestos. Aquí encontrarás el alojamiento recomendado: Lungarno Suites (7) , unos cómodos apartamentos privados con impresionantes vistas sobre el río. Los estudios de una habitación cuestan unos 350 €.

Este establecimiento está a unos cinco minutos de la zona de shopping de lujo. Siguiendo la ribera del Arno llegarás a la vía de Tuornaboni, donde las grandes fi rmas internacionales luchan por tener un escaparate. Pero si buscas algo más asequible para hospedarte, dirígete al norte. Allí está el hotel Johanna (Bonifacio Lupi, 14 y www.johanna.it), de estilo más clásico y muy recomendable. Desde 95 €.

El centro está vedado para los automóviles, lo que hace que puedas pasear tranquilamente. Recuerda que en Italia las mejores pizzas salen de los hornos de las "trattorias". La favorita de los lugareños es Da Ruggiero (Vía Senese, 89). Y para darse un lujo recordando alguno de los cuadros protagonizado por Baco en los Uffi - zi, elige una de las mil enotecas que salpican la ciudad, como Fuoriporta (Vía Monti alle Croci,10). Y para divertirse, lo mejor es acercarse al barrio de Santo Spirito.

Más información en: www.enit.it