Nueva York dedicará un parque a Marsha P. Johnson: transgénero, negra y activista LGTBI

Hay personas que cambian la historia, y es que aunque no lo parezca hay pequeños gestos y pequeños actos que pueden convertirse en grandes cambios y grandes referentes para una sociedad cambiante.

Drag queen y con una personalidad totalmente transgersora para la época, Marsha P. Johnson fue y es una de las caras visibles en la lucha por los derechos del colectivo LGTBIQ+ y, también, de los derechos de las mujeres transgénero negras.

Ha sido considerada, además, como una de las activistas más importantes en los enfrentamientos con la policía durante los disturbios de Stonewall. Pero no es solo eso, su activismo llegaba hasta las puertas de su casa… junto con Sylvia Rivera, Johnson fue ‘madre’ de la Casa STAR (cuyas siglas significan Travestis Callejeras de Acción Revolucionaria, en español)

Las casas en la América de la época de los años 70, 80 y 90 se creaban como una especie de ‘comunas’ en las que la gente del colectivo LGTBIQ+ que había sido rechazada y expulsada de sus hogares podían ir a pedir ayuda, comida e incluso un techo en el que dormir.

Y es que Marsha, con su casa STAR, ayudó a tantas drag queens, mujeres trans y jóvenes que vivían en los muelles de la calle Christopher como pudo. Tal era así que abría las puertas de su casa en el Lower East Side de Nueva York para que sus hermanas del colectivo no tuvieran que pasar por esa situación por mucho tiempo más.

Hasta tal punto llegó su afán por ayudar a los jóvenes rechazados por sus familias que llegó a instalar un refugio que les sirviera como casa, como apoyo y como una forma de empezar una nueva vida.

Esta activista, que además fue una abierta defensora y luchadora por el tratamiento contra el VIH, nació el 24 de agosto de 1945 y murió en 1992 a los 46 años. Las circunstancias de su muerte, cuya investigación se reabrió en 2012, siguen sin resolverse.

75 años para conmemorar a Marsha

75 años para conmemorar a MarshaAhora, en el marco de su 75 cumpleaños, el gobernador de Nueva York, Andrew M. Cuomo, ha anunciado que se le dedicará el parque estatal de East River en homenaje a esta activista de los derechos civiles.

De esta forma, se convertirá en el primer parque estatal de Nueva York en homenajear a una persona LGBTQ+ y a una mujer transgénero de color. Para ello, el estado mejorará las instalaciones del parque e instalará obras de arte público para conmemorar la vida de Jhonson y su papel en el avance de los derechos LGTBQ+. Su gobernador, Cuomo, es consciente de ello y lo hizo saber en la gala de la Campaña de Derechos Humanos.

"Marsha P. Johnson fue una de las primeras líderes del movimiento LGBTQ y solo ahora recibe el reconocimiento que se merece. Dedicarle este parque estatal y colocar obras de arte público que cuentan su historia, garantizará que su memoria y su trabajo en la lucha por la igualdad sigan viviendo", afirmó un Cuomo orgulloso de reformar este parque en su nombre.

El parque, que será reformado, contará con diversas obras de arte sobre Marsha P. Jhonson, en ellas se conmemorará la vida de la activista, instalándose dos grandes muros de cimentación en los que se pretende crear una galería natural al aire libre con materiales e historia sobre el movimiento LGTBIQ+.

También, con el objetivo de generar conciencia en las nuevas generaciones, se pondrán carteles que muestren el rol de la activista en la lucha por la garantía de los derechos para las personas que padecían SIDA durante la década de los sesenta y los setenta.

Su vida y su muerte, a la pequeña pantalla con Netflix

Su vida y su muerte, a la pequeña pantalla con NetflixNetflix, en 2017, saco a la luz el documental ‘La muerte y vida de Marsha P. Jhonson’, un documental que narra en forma de crónica la vida de esta activista y su compañera Sylvia Rivera, las figuras mas prominentes y representativas de la liberación gay y los derechos transgénero en la ciudad de Nueva York desde la década de 1960 hasta la de 1990.

Este documental se centra en la investigación sobre la muerte de Marsha P. Jhonson en 1992, que inicialmente fue dictaminada como un suicidio por la policía de Nueva York a pesar de ciertas circunstancias sospechosas del caso.